Wendy Cabrera Rubio (CDMX 1993) presenta una exposición individual que comparte innecesariamente espacio y título con otra de Charlie Godet Thomas. Cabrera Rubio escribe junto a Neil Mauricio Andrade un guion que fusiona el espectáculo de carpa, el teatro didáctico y el acto de campaña de un político de pueblo quien nunca se presenta.

Al intercalar personajes entre tres planos escenográficos, Wendy subvierte la creación de profundidad de la Cámara Multiplanos desarrollada por los Walt Disney Studios en 1940 con una obra protagonizada por una china poblana, un veterano del Escuadrón 201 con el que México participó en la Segunda Guerra Mundial y Panchito Pistolas, gallito mexicano encolerizado por qué no se respeta su identidad y coprotagonista de Los Tres Amigos, 1944, filme de Disney que junto al apoyo de la CIA al Expresionismo Abstracto se suma a la expansión geopolítica y cultural de los Estados Unidos durante la política del Buen Vecino de Roosevelt y el inicio de la Guerra Fría.

Este proyecto en un museo privado, más otros de Wendy en la galería Nordenhake (ver Artgenetic 14MAR2020), o su cita con “pinturas” de fieltro a caricaturas sobre arte abstracto de Rius, Vadillo o Maris Bishofs en Kurimanzutto; reintroducen al Arte de Crítica Institucional un potencial objetual y comercial previsto por The Camel Collective o el Raqs Media Collective, pero escaso en Andrea Fraser, Hito Steyerl, Walid Raad, Jeremy Deller, Harun Farocki o The Otolith Group; mayoría de artistas expuestos por el MUAC, UNAM.

Inusual para el arte Millennial, Wendy Cabrera Rubio realiza con su arte señalamientos con potencial histórico: ¿El Arte de Crítica institucional muere al entrar al mercado del arte objetual?, ¿La crítica al neoliberalismo es sólo un mecanismo de adaptación del capitalismo?, ¿Esta en crisis la jerarquía institucional del curador sobre el artista?; como con lo personal, ¿Lo objetual es político?