Las mujeres del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) celebraron que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación haya emitido la sentencia en la que ordenó al Instituto Nacional Electoral (INE) modificar la convocatoria, en un plazo de 72 horas, para la renovación de la dirigencia del partido, en la que se debe hacer cumplir preceptos constitucionales en materia de participación electoral el registro de la paridad de género, cuando al momento hay enlistadas dos mujeres y 33 hombres como candidatos a la presidencia y nueve candidatas contra 27 del sexo masculino que aspiran a la Secretaría General.

Carol Berenice Arriaga, quien desea estar al frente de la Secretaría General de Morena, advierte en entrevista que el machismo estructural "impidió" ver al INE que en el registro de los candidatos que buscan estar al frente del partido en el poder hay más hombres que mujeres.

"En la convocatoria del Instituto Nacional Electoral no se establecieron las reglas en el tema de la paridad de género. Lo ideal es que no lleguen dos hombres a esas dos carteras. Es decir, el presidente y secretario. Debe ser hombre y mujer, señala la abogada Arriaga.

Entre los obstáculos para que las mujeres militantes de Morena se postulen a los liderazgos están también –dice la candidata a la Secretaría General–los arribismos políticos de personajes como Antonio Attolini Murra, quien busca la Secretaría General de Morena, además de algunos otros hombres, incluso dentro del partido.

"Estamos cuidando los militantes ese arribismo que pone en riesgo a Morena, lo que ha hecho también largo este camino para la renovación de la dirigencia. Attolini fue acusado de traidor por el movimiento #YoSoy132. Él tuvo una afiliación de último momento, fabricada. Y es una vergüenza. Lo ideal a lo que debe aspirar (Antonio Attolini) es a ser militante, y si tuviera un poco de ética retirarse de esa aspiración".

Arriaga advierte que sin igualdad no hay democracia.

Y su posición sobre este largo proceso por el que ha transitado Morena para tener una nueva dirigencia legítima es la judicialización. Las impugnaciones que ha encabezado, dice, Alejandro Díaz Durán –un personaje cercano al senador Ricardo Monreal–.

"Nos están haciendo tanto daño esas posturas. Quizá en algunos temas tenga razón, pero todo lo ha estado impugnando. Y no es la vía, sino el diálogo".

Para Carol Arriaga, hay personas que su postulación a la dirigencia de Morena no son legítimas, sobre todo porque está cuestionada su militancia. Es el caso, incluso, del propio Porfirio Muñoz Ledo, quien es morenista por una candidatura externa.

También señala el caso de Gibrán Ramírez, a quien cataloga de un "teleaspirante" que no es lo que necesita el partido, sino la experiencia en el trabajo político.

"Gibrán tuvo la suerte de asistir a una asamblea fundacional. No dudo de algunas de sus habilidades, pero para dirigir a Morena, un partido tan grande se requiere de más, no sólo ser mediático o dar un debate mediático".

De Mario Delgado, líder de los diputados de Morena en San Lázaro, dice no saber cuántas mujeres asesoras tiene, por lo que tampoco, señala, puede hablar de si es un político que impulse la paridad de género, aunque el puntero para tomar las riendas del partido pregone que pertenece a la "Legislatura de la Paridad de Género".

La secretaria de Mujeres de Morena señala al INE de comportarse bajo un sistema patriarcal, por la normalización de invisibilizar a las mujeres.

"No creo que haya habido dolo para no hacer la observación en la falta de equidad en el registro. Pero lamento que el INE no haya reaccionado ante la falta de ese precepto y del principio en favor de la democracia", dice Carol Arriaga.