Opinión

En Haití, Taboada sí gana encuestas

"Para manipular eficazmente a la gente, es necesario hacer creer a todos que nadie les manipula".

*John Kenneth Galbraith

Eso es justamente lo que quiso hacer el precandidato del @CartelInmobiliario al gobierno de la Ciudad de México, Santiago Taboada, tras disfrazar de panistas y acarrear a migrantes haitianos para intentar levantar su cierre de precampaña.

Perversos, como son los prianistas, si algo salía mal planearon culpar del montaje a sus adversarios.

En el evento, organizado en la Alcaldía Gustavo A. Madero (GAM), un reportero videograbó y preguntó a los inmigrantes sobre su procedencia y si apoyaban a Taboada, vestidos con camisetas del PAN y ondeando banderas de ese partido, los interrogados detuvieron su zarandeo momentáneamente y, con cara de ¿what?, balbucearon dos o tres palabras ininteligibles en creole, idioma que se habla en Haití y que combina lenguas de origen africano con el idioma francés.

Los pocos medios que dieron cuenta del deleznable acarreo de las personas más vulnerables que hay en el país, en vez de cabecear sus notas favorablemente el acto de cierre de campaña -como esperaban los prianistas- ponderaron el abuso y sus titulares decían: "Taboada acarreó migrantes haitianos"; "Panistas acarrearon haitianos para evento de Taboada", y "Taboada se pasa de rosca, hasta acarrea migrantes haitianos".

Los titulares encendieron todas las alertas del cuarto de guerra del aspirante prianista al gobierno de la CDMX.

Tras ser publicado por portales de noticias y un diario de circulación nacional, el vídeo inundó las redes sociales con decenas de comentarios en contra de la ignominia.

Pese a la evidencia, Taboada se descaró y declaró públicamente: "es un montaje para atacarme".

Todavía el senador Emilio Álvarez Icaza -pseudo defensor de derechos humanos- para tratar de hacer creíble esa mentira, acusó directamente del montaje al jefe de gobierno de la CDMX, Martí Batres, sin presentar una sola prueba.

Lo que no se esperaban el par de levantafalsos es que los traicionara un militante de su propio partido.

Se llama Adrian Alfaro, coordinador de la campaña del PAN en GAM, quien en su cuenta de Facebook confesó que el PAN tramó el montaje de la participación de los migrantes haitianos en el cierre de campaña de Taboada.

La confesión fue borrada unos minutos después de publicada, pero el daño ya estaba hecho.

Además de pagar "su apoyo" a los indefensos migrantes, trascendió que Taboada también compró la presencia de otros grupos de acarreados.

Son tiempos electorales, de proselitismo, de conquistar espacios en la política, pero la forma de hacer proselitismo retrata de cuerpo entero a las y los aspirantea, y a los partidos que representan.

Los panistas se aprovecharon de la condición hipervulnerable de los migrantes, pero es inaceptable que vulneren sus derechos humanos al tratarlos como objetos.

Abusar de la necesidad de comer y sobrevivir de la gente es racista e inmoral.

Ojalá y no se repita nunca más, por ningún partido político, otro episodio tan denigrante como el que tramó Santiago Taboada y el PRIAN.