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En busca de la materia oscura, encienden nuevamente el Gran Colisionador de Hadrones

El viernes reiniciaron los experimentos cuando dos haces de protones circularon en direcciones opuestas por el acelerador

tres años sin trabajos

Una vista del acelerador de hacrones.

Una vista del acelerador de hacrones.

El acelerador de partículas subatómicas más poderoso del mundo, localizado en la frontera entre Suiza y Francia, reinició ayer sus actividades después de mantenerse en pausa tres años, debido al confinamiento por la pandemia de COVID19, pero también a causas de una serie de renovaciones que elevaron sus capacidades de detección de altas energías y componentes fundamentales de la materia.

Conocido popularmente como CERN, el Laboratorio de la Organización Europea para la Investigación Nuclear es un aro de 27 kilómetros de longitud que hace viajar en su interior partículas de materia de dimensiones pequeñas al extremo y las hace chocar para observar y medir las interacciones de materia y energía.

El viernes reiniciaron los experimentos cuando dos haces de protones circularon en direcciones opuestas por el acelerador, impulsados por una inyección de energía de 450 mil millones de electrovoltios, que irá aumentando a medida que se compruebe que el sistema funciona correctamente.

Antes de incrementar la intensidad en los imanes, cuyo enorme campo magnético produce la aceleración de las partículas, hay que comprobar todos los parámetros de seguridad de la máquina para evitar cualquier incidente.

La tecnología y el grupo de investigadores que trabajan en el CERN hicieron posible que en 2011 se demostrara y en 2012 se anunciara la existencia del Bosón de Higgs o Mecanismo de Higgs, que es el conjunto de condiciones que explicaría la existencia de masa en las partículas más pequeñas conocidas en el Universo.

Tras el reinicio de labores, con nuevos equipos, las tareas de este colisionador de hadrones incluyen buscar evidencia de la misteriosa materia oscura, reproducir los experimentos del Bosón de Higgs para conocer con más detalles esa partícula y realizar experimentos híper especializados que confirmarían o pondrían en duda lo que los científicos llaman el Modelo Estándar de Física de Partículas.