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Carlos Aguilar: Desde 1990, la obesidad creció, principalmente, entre países más pobres

México no es el país con mayor obesidad del mundo. Es un mito que se repite, añade el especialista

congreso tec de monterrey

El Director de Investigación del INCMyNSZ fue uno de los autores principales de la mega investigación publicada por The Lancet.

El Director de Investigación del INCMyNSZ fue uno de los autores principales de la mega investigación publicada por The Lancet.

Antimio Cruz

Entre 1990 y 2022, la obesidad creció principalmente en los países con menores ingresos económicos. Además, ahora se presenta en edades más tempranas. Estos son datos del mayor meta-estudio sobre obesidad y desnutrición mundial realizado hasta ahora, en el que fueron comparados 3 mil 663 análisis, de 200 países, que estudiaron a 222 millones de niños, adolescentes y adultos.

Los resultados de esta investigación fueron expuestos y explicados, en el campus central del Tecnológico de Monterrey, por el doctor Carlos Aguilar Salinas, director de Investigación del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INCMyNSZ), quien es uno de los 20 principales autores del estudio que reunió el esfuerzo de más de mil científicos y que fue publicado en la revista médica The Lancet, con el título Worldwide trends in underweight and obesity from 1990 to 2022.

“El impacto que ha tenido la malnutrición en la salud humana es un fenómeno dinámico y que no ha llegado a un estado estable”, explicó el doctor Aguilar Salinas ante un grupo de 200 expertos de Costa Rica, Chile, España, Estados Unidos y México reunidos en el Congreso Internacional de Investigación sobre Obesidad, que organizó el Institute for Obesity Research, del Tecnológico de Monterrey.

Un análisis un poco más detallado del estudio multinacional permite ver que unos pocos países sí tuvieron avances en la prevención y atención a enfermedades asociadas con la dieta y alimentación.

Entre 1990 a 2022, la prevalencia combinada de bajo peso y obesidad en adultos disminuyó en 11 países. En contraste, la prevalencia combinada aumentó en 162 países.

En ese periodo de 32 años, se profundizó más la información sobre diferentes en exceso de peso por género: en 177 países se registró aumento en el porcentaje de mujeres con obesidad y en 140 países creció la tasa de hombres con obesidad.

DATOS VS MITOS

Durante su exposición, el mexicano especialista en epidemiología y fisiopatología, aclaró que México no es el país con mayor obesidad del mundo ni con mayor obesidad infantil.

“Es un mito que se repite, la idea de que México es el país con más obesidad en adultos y con más obesidad infantil, de todo el mundo. Esta afirmación sólo se refiere a la comparación de los países que son miembros de la OCDE, pero si se revisa la información de los 200 países del estudio de The Lancet se verá que las mayores tasas de obesidad están en países árabes, de Medio Oriente y de las Islas del Pacífico”, apuntó Aguilar Salinas, quien es médico cirujano, endocrinólogo y doctor en Ciencias Médicas.

“La obesidad se ha vuelto una enfermedad relacionada con la pobreza. Desde 1990, sólo la región de Europa del norte ha logrado controlarla. Las tendencias mundiales muestran crecimiento en todo el mundo y sólo el centro de África sigue padeciendo la otra gran carga, que es la desnutrición”, agregó.

Desde el punto de vista teórico y conceptual, el investigador del Instituto Nacional de Nutrición comentó que todavía está abierta la discusión de cómo debe definirse a la obesidad y cómo debe medirse pues se puede enfocar la atención a la grasa abdominal, la grasa debajo de la piel u otro tipo de indicadores sobre exceso de peso.

“Los métodos más precisos para medir la obesidad son los estudios con Resonancia magnética nuclear y los de Densitometría, pero sus precios son demasiado elevados para aplicarlos a toda la población. Es por esto que seguimos usando el Índice de Masa Corporal (IMC) como indicador estandarizado”, indicó.

También en su exposición el Doctor Aguilar subrayó dos ideas: 1) Los países con menores ingresos y en vías de desarrollo son los que van a padecer más la carga económica y social que genera la obesidad y sus complicaciones, y 2) Una sola medida difícilmente va a resolver la obesidad por la gran diversidad de perfiles genéticos y contextos ambientales de las personas afectadas.

En México, las mayores comorbilidades asociadas con la obesidad son: dislipidemia, hipertensión arterial, depresión, diabetes y problemas de movilidad.

Piden actuar sobre el entorno que fomenta el aumento de peso

Los más de mil científicos que firman el meta estudio de The Lancet coincidieron en algunas recomendaciones para políticas públicas. “En primer lugar, existe una necesidad urgente de prevenir la obesidad, apoyar la pérdida de peso y reducir el riesgo de enfermedad, mediante el tratamiento de los mediadores de sus peligros, como la hipertensión y la hipercolesterolemia, en las personas con obesidad. La prevención y el tratamiento son especialmente importantes porque la edad de inicio de la obesidad ha disminuido, lo que aumenta la duración de la exposición. La mayoría de los esfuerzos para prevenir la obesidad se han centrado en comportamientos individuales o cambios aislados en el entorno construido o alimentario”.