Cultura

El INAH es garante en la protección del patrimonio arqueológico: Diego Prieto

 La institución celebra su 84 aniversario con reconocimiento a sus investigadores y el libro "El pueblo maya, ayer y hoy", de arqueólogo Alberto Ruz Lhuillier (1906-1979)

festejo

En la celebración participaron de izq a der: Beatriz Quintanar, María Teresa Franco, Arturo Balandrano, Diego Prieto, José Luis Perea y Alejandra Gómez.

INAH

El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) celebró 84 años de vida reconociendo a sus investigadores con mayor antigüedad laboral y con la presentación del libro "El pueblo maya, ayer y hoy", del arqueólogo Alberto Ruz Lhuillier (1906-1979).

Diego Prieto Hernández, director del INAH, recordó que el instituto fue creado por decreto del presidente Lázaro Cárdenas del Río, el 3 de febrero de 1939, marcando y definiendo una política cultural en el país.

"Desde entonces es la institución garante del estudio, registro, protección, conservación y difusión del patrimonio arqueológico, histórico y paleontológico de México", expresó.

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El funcionario añadió que además de reconocer a los trabajadores que suman a una sociedad mejor, es necesario festejar honrando a los grandes precursores de la arqueología.

"Es el caso de Alberto Ruz Lhuillier, a quien debemos conocer, reconocer y publicar", dijo Prieto Hernández en referencia a la publicación del libro "El pueblo maya, ayer y hoy".

Claudio Ruz, hijo Ruz Lhuillier, recordó que su padre realizó el hallazgo de la tumba de Pakal en el Templo de las Inscripciones en Palenque en 1952.

"Tras el aniversario 70 de la tumba de Palenque es importante reeditar un libro que, pese a ser el libro que mi papá consideraba el más importante de su obra, no ha corrido con suerte favorable ya que no se reeditaba desde hace 30 años", dijo Claudio Ruz.

El también arquitecto comentó que la primera edición de "El pueblo maya" es de gran formato con muchas fotografías y, por tanto, caro de editar y adquirir.

"Considerando que su trabajo tuviera una máxima difusión, mi padre siempre tuvo la vocación de que el conocimiento se hiciera accesible y es por eso que ahora fue un buen momento de reeditarlo", indicó.

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El heredero comentó que la actual reedición implicó rehacer la obra. "A la parte de los textos no se les cambió ninguna coma, las fotografías de la edición original eran inconseguibles, pero en un esfuerzo encabezado por un equipo de profesionales se dieron a la tarea de encontrar imágenes dentro de los archivos del INAH para sustituir las que había", expresó.

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Presentación del libro

𝙀𝙡 𝙥𝙪𝙚𝙗𝙡𝙤 𝙢𝙖𝙮𝙖 𝙖𝙮𝙚𝙧 𝙮 𝙝𝙤𝙮 de Alberto Ruz Lhullier

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— INAHmx (@INAHmx) February 2, 2023
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Es un libro que tiene particular trascendencia no sólo desde un punto de vista familiar en el que me invitaron a escribir unas palabras sobre la trayectoria de mi padre, sino porque es un compendio del conocimiento de la cultura maya del pasado y presente, agregó.

"Los mayas no es una cultura que desapareció, sigue viva y vibrante. Los nuevos conocimientos traen precisión y más dudas y más hipótesis, eso fue una escuela que generó mi padre", añadió.

El heredero comentó que esa es una escuela mexicana de mayistas que aún se mantiene "haciendo a un lado las desviaciones ideológicas que los antropólogos de otros países habían fomentado, mi padre estudió a los mayas aterrizándolos como seres humanos".

–¿Dónde se resguarda el acervo de Alberto Ruz?

–Mi padre dejó una copia de su acervo fotográfico sobre su trabajo de campo en el INAH, entonces la Fototeca del INAH debe de tener ese material.

Existen otras fotografías que ya eran de su archivo personal que conserva mi familia tal y como él lo dejó, que irán a dar junto con su biblioteca a alguna institución que aún no hemos decidido, tenemos que ver quién garantiza mejores condiciones de conservación.

–¿Hay algunas propuestas?

–Hay mucho interés de parte del INAH y de la UNAM, en esta última porque ahí esta el Centro de Estudios Mayas, institución que él fundó para abordar el estudio de la civilización maya desde una perspectiva interdisciplinaria. La decisión dependerá totalmente de quienes puedan ofrecer mejores condiciones de conservación.

El heredero aseguró que en cuanto decida la familia, el acervo será de acceso público. "No se va a vender a ninguna parte, quedará en una institución pública de México".

–¿Cuánto material tiene el acervo?

–No se ha catalogado, es un archivo muy amplio de miles de imágenes y miles de libros, ediciones inclusive muy raras y de pioneros de la antropología, era su archivo de trabajo y hay también correspondencia y notas de sus conferencias. Es un archivo que necesita clasificarse y ordenarse.