César Vigné: “El miedo mantiene vivo al stuntman”
ENTREVISTA. El especialista nos comparte su experiencia en la industria audiovisual, así como su participación en filmes como Bardo o Apocalipto
cine
El stuntman César Vigné.
Crónica Escenario tuvo la oportunidad de charlar con César Vigné, un stunt mexicano que trabajó como parte del elenco de Bardo. El artista lleva varios años en la industria, incluso participó en la serie Soldados o Zombies, creada por Nicolás Entel y difundida vía Amazon Prime.
En México el trabajo de los stuntman siempre ha estado perdido dentro de la industria cinematográfica, ¿cómo te sientes al respecto ante esta falta de reconocimiento histórico?
Antiguamente era como un secreto que no eran actores los que hacían las escenas y se buscaba mucho proteger ese secreto o ese truco, hoy en día es un poco más abierta esta relación, los mismos actores reconocen que hay cosas que no hacen y le dan el crédito a los stunts y creo que es algo interesante. También creo que el stunt muchas veces no va por el reconocimiento, es más un reto contigo mismo, de entrada, no se busca el reconocimiento, pero poco a poco se va buscando más, hay stunts que lo buscan, pero en un principio, y no sólo en México, el stunt vive en el anonimato.
¿Cómo ingresaste a la industria como stunt, como hombre de piedra?
Empecé de chavo con las artes marciales, hice muchos años de capoeira y de ahí me fui complementando con otras artes marciales. Siempre me gustó mucho la acrobacia. En algún momento hubo un casting para una película donde buscaban a unos acróbatas que no se notara que era gimnastas, que no se viera como algo muy preparado, y ese fue mi boleto de entrada. Tuve la oportunidad de hacer el casting y quedarme. Fue una experiencia muy interesante trabajar con Mel Gibson y estar en Veracruz, vivir un mundo completamente nuevo para mí, me gustó mucho y de ahí busqué cómo continuar con eso.
De todos los stunts que has hecho, has estado en cintas como Apocalipto, Resident Evil, Bardo, pero hasta ahorita, ¿cuál es el que mayor reto te ha presentado y que más orgulloso te sientas de verlo en pantalla?
El reto más grande que tuve cuando empecé con esto fue que yo venía controlando mi cuerpo, tenía el conocimiento de mi cuerpo, y el día que me encontré a los caballos fue un reto complicado. Bastante complicado. Después de varios años de entrenar tuve la oportunidad de ir a una serie con caballos, fue un reto grande, porque además de lo complicado que en un principio puede ser manejar a un caballo, saber que lo tienes que hacer dentro del set, con la cámara cerca, con actores, en persecuciones, vaya, es un reto complicado. La serie se llamó Texas Rising, de History Channel, y para mí fue una experiencia increíble. Después de ella mis proyectos favoritos, mis stunts favoritos, son a caballo. Las películas de época me encantan, pero antes de disfrutarlo tanto si fue un reto. La verdad sí creo que fue el reto más grande.
¿Qué significó para ti poder coordinar la gran secuencia de batalla en el Castillo de Chapultepec para Bardo?
Fue un gran reto desde la investigación, desde ver de qué venía, no querían que fuera una batalla brutal sino una especie de reenactment, como le dicen los norteamericanos, una recreación histórica de una batalla importante, en momentos Alejandro González Iñárritu quería que se viera con la realidad de una batalla, pero en momentos nos damos cuenta de que sólo era una representación, encontrar ese punto medio fue complicado. Fue muy interesante trabajar con tantas personas, eran aproximadamente 120 extras corriendo y disparando y cayendo en planos abiertos, con paneos donde se seguía toda la acción, entonces no había espacio para algo de relleno, para algo que se viera falso, no estético. Una pantalla muy abierta hace que veas muchas cosas al mismo tiempo y ninguna se puede contraponer o encimar, ni dejar un espacio hueco, creo eso fue lo más complicado. Obviamente la parte de las peleas, de las caídas, lo son, pero en este caso en particular fue hacer que visualmente funcionara la escena, y todas las batallas que estaban pasando al mismo tiempo.
¿Cómo fue sentir la energía del castillo, el compromiso de estar ahí?
Estar ahí recreando una batalla que se vivió ahí… Desde que empiezas a hacer el scouting, a analizar el lugar, a preguntarte cómo fue, quiénes llegaron, cómo se enfrentaron, dónde estaban, por dónde entraron, es empezar a entrar en la imaginación y en la historia. Quieras o no revives un poco lo que paso ahí en ese año.
¿Quiénes han sido tus mentores en esto?
Mis primeros mentores fueron Julián Bucio y Balo Bucio, con ellos empecé a trabajar y estuve muchos años, ahí empecé mi entrenamiento y mi aprendizaje de lo que quieren decir los stunts y de lo que se trata ésta profesión. Algunos años después tuve la oportunidad de colaborar con Gerardo Moreno, otra de las figuras más importantes de los stunts en México, y ahí también fue un paso lleno de aprendizaje y de vivencias. En algunos momentos, en algunas situaciones, he tenido la oportunidad de ir a Los Ángeles y ahí he podido entrenar con grupos de renombre y con gente hace cosas muy interesantes, como 87eleven Action Design, la familia Gilbert y varios que son como los grandes desde mi punto de vista, que son las personas que admiro. Y estudiando y buscando un poco de más recursos.
¿Cómo te sientes sabiendo que actualmente tú ya eres un referente para los jóvenes que quieren entrar al mundo del cine como stunts, como hombres de piedra?
A veces parece que no te das cuenta cuando disfrutas lo que haces, de repente ya te empieza a tocar a hacer otras cosas, es el paso del tiempo, ahí te das cuenta de que ya pasaron muchos años y que de ser el nuevo, el que estaba aprendiendo, fuiste alguien que ya tenía algo de experiencia y así vas avanzando hasta que, de pronto, va llegando gente más nueva.
Actualmente hay una gran producción en México, lo que lleva a una gran cantidad de gente haciendo proezas en pantalla, ¿qué tanto apoyo tienen ustedes dentro de la industria, por la gente de la industria, para seguir realizando su trabajo?
Yo creo que actualmente ha crecido mucho esta especialidad de los stunts, por la cantidad de proyectos y cosas que vienen y la cantidad de acción que traen. Como parte de la industria, desde mi experiencia, creo la gran mayoría de los grupos de stunts han ido sobresaliendo, formándose y creándose, un poco por cuenta propia, sin depender mucho de una institución o de un gremio- Se han ido haciendo gremios stunts, agrupaciones, tenemos ya varios años en que estamos reconocidos por la ANDA, que pertenecemos a la Asociación Nacional de Actores, lo cual nos ha hecho el camino mucho más dócil y mucho más sencillo en muchos aspectos. Básicamente creo que ese ha sido el cambio más grande que hemos tenido en los últimos veinte años.
¿Qué tan fácil es el paso de ser stunt a ser un actor principal o secundario en pantalla?
Todo stunt tiene una parte actoral, tienes que actuar la escena, solo que no la actuamos con la voz sino con el cuerpo. Evidentemente el stunt siempre va a tener mayor capacidad de trabajar con el cuerpo, y aquellos que le buscan y que estudian y van encontrando la forma de trabajar la dicción, la voz, porque la energía del personaje si la trabajamos, cuando vas a ser el represor o el reprimido, cuando vas a estar en medio de una batalla, tienes que entrar en la parte de la historia y entender quién eres y qué está pasando. Todo eso viene a formar parte de la coreografía y de la historia que estas contando. Si hay una parte histriónica pero muchas veces la complicación es al momento de los diálogos, al momento de mantenerte en cámara, en esos momentos que son miradas, reacciones, puede que nos cueste más trabajo. Hay gente muy preparada que es stunt y que además ha estudiado actuación y puede hacer sus propias escenas, diálogos y acción.
¿Qué piensas de alguien como Tom Cruise, al que hemos visto hacer acrobacias y romperse la pierna y hacer todo eso?
Es una persona impresionante, desde su trabajo como actor desde hace muchos años y actualmente se da el lujo, porque él produce, ya que cuando hay una productora de por medio no permiten que pase eso porque pone en riesgo todo el plan de trabajo, pero en su caso donde es el productor puede darse el lujo de hacer sus propias escenas, creo es algo muy padre. Debe ser una experiencia muy interesante la de poder hacerte tu película y hacer lo que quieras. Seguro se rodea de los mejores, pide toda la asesoría y tiene un equipo atrás que ve, hasta donde se pueda, que esté a salvo, todos sabemos de ese accidente [al filmar Misión Imposible 6] donde sí tuvo fracturas, pero son gajes del oficio.
¿Cómo ha sido esa experiencia para ti, la de accidentes en grabación?
Alguna vez tuve una buena caída, no me fracturé nada, no pasó nada, pero pues sí fue, digamos, un buen trancazo, estuve como tres semanas en reposo y en observación. La escena probablemente no era tan complicada pero el lugar donde la hicimos, fue en el desierto, el tiempo que teníamos, todo complicaba mucho las cosas y ahí te das cuenta que aunque la escena no sea muy complicada o no vaya a haber una atropellada o no vengan veinte caballos a toda velocidad, a veces puede parecer sencilla pero de todos modos tienes que tener todo tu foco y toda tu atención y estar presente de todo lo que está alrededor y de y de todo lo que podría salirse del plan, Muchos nos preguntan si no sentimos miedo, que si los stunts no tienen miedo, yo creo que en el stunt el miedo es lo que te mantiene con vida, porque si no tienes miedo no mides los riesgos y si no los mides es muy fácil que ocurran accidentes, hay que saberlo trabajar y controlar. Para aprender a trabajar con fuego o con alturas debes de aprender a controlarte, a respirar, a entender tus límites y cosas así, con mucho enfoque y respeto porque al momento que crees que ya sabes o es fácil, yo creo que ahí viene la posibilidad de un accidente.
¿Qué viene para ti? ¿Qué proyectos vienen? ¿Qué películas vienen?
Actualmente tengo un par de proyectos más cómicos, normalmente son pocas cosas, no son cosas pequeñas porque la comedia requiere situaciones muy violentas, como una atropellada, una caída, un resbalón con una patineta, cosas donde no hay chance de esconderlo mucho, ya que va pasando alguien y se cae y tienes que plantearlo con violencia y credibilidad. Vienen un par de temporadas de cosas que hicimos el año pasado, algunos comerciales. Prácticamente estamos en eso en esta época.