Música oscura con Disorder Fest y su segunda edición en Pabellón Oeste
COBERTURA. Aún con una muy pobre entrada de audiencia logró conectar su gran cartel con el poco gentío dentro del recinto donde Health ofreció un show memorable
Concierto
Imagen de la banda Health en su concierto.
El Disorder Fest festejó su segunda edición la noche de este viernes en el Pabellón Oeste con un gran cartel compuesto por cuatro bandas internacionales llenas de aura oscura y ruido para todos los oídos.
Ante una entrada realmente baja, el evento auspiciado por Eyescream Productions arrancó sus actividades de la mano del tridente de chicas Automatic originarias de Los Ángeles, en esta que fue su segunda visita a la Ciudad de México ya que anteriormente vinieron como banda telonera de Bauhaus en el Parque Bicentenario.
Automatic, compuesto por Izzy Glaudini, Halle Saxon y Lola Dompé dieron un repaso al mero estilo del no wave con un repertorio hipnótico con extractos de sus dos álbumes de estudio Signal (2019) y Excess (2022).
La segunda banda en salir fue Cold Showers de California, quienes con su mezcla de shoegaze y post-punk elevaron los ánimos dentro del Pabellón Oeste que lucía algo triste y desolado en comparación a las inmediaciones del Autodromo Hermanos Rodríguez, donde arrancaban las actividades del festival de electrónica EDC México.
Más sonidos desde Los Ángeles llegaron a la capital mexicana con The Soft Moon, el proyecto liderado y creado por Luis Vásquez dando un recital realmente memorable, un espectáculo que dejó boquiabierto a más de uno con aquel emblemático sello del dark wave y post punk bastante explosivo sobre el escenario.
Lo lisérgico de la música de sombras en Disorder Fest 2 culminó con Health entre sintetizadores y su mítico show que siempre es espectacular a nivel audiovisual. Un grupo de culto que ya ha visitado en varias ocasiones los suelos mexicanos en diferentes escenarios y festivales.
Disorder Fest, aún con una muy pobre entrada de audiencia logró conectar su gran cartel con el poco gentío dentro del Pabellón Oeste. Una gran entrega y edición a la que tal vez le hizo más falta promoción y difusión para una mayor asistencia.