Metrópoli

La viabilidad de cosechar lluvia en la CDMX

La demanda diaria de agua en la Ciudad de México es cada día mayor, acciones como la cosecha de agua de lluvia son una alternativa viable para la obtención de este recurso en respuesta al desabasto hídrico que se vive actualmente

Cosecha de lluvia en la CDMX.

Nueve millones de habitantes viven o transitan diariamente en la zona metropolitana de la CDMX, demandan servicios públicos, incluyendo el relacionado con los recursos hídricos. 

Históricamente la dotación de agua se ha resuelto trayendo el líquido desde alguna fuente natural, potabilizándola y enviándola a los millones de hogares citadinos.

¿Y si en lugar de ello se pudiese captar el agua de la lluvia que está presente cinco meses del año en cantidades notables? ¿Y si esto fuese además una forma de resolver, al menos parcialmente, los problemas de servicios en zonas marginadas? 

La cosecha de lluvia es un concepto que implica usar la lluvia para el consumo de los habitantes de la ciudad; implementa procesos más baratos que los tradicionales y, a pesar de su potencial, a la fecha sólo se ha llevado a unos 30 mil hogares en 9 alcaldías. 

CDMX enorme campo de cosecha hídrica

Ciudad de México ocupa el segundo lugar a nivel nacional en cuanto a población en su territorio, así que satisfacer los requerimientos actuales de recursos hídricos resulta cada vez más complejo. La dotación de agua en la ciudad, cabe recordar, comprende la cantidad asignada para cada uno de los habitantes, incluyendo todos los consumos, pero también las pérdidas en la red de distribución que son cada vez mayores, algo que en su momento ha comentado el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (por ejemplo, en ocasiones se le corta el suministro a Iztapalapa para evitar las perdidas en su red, a la que se conectan rudimentariamente gran parte de sus habitantes sin dar aviso a las autoridades).

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda una cantidad aproximada de 20 litros al día por habitante para cubrir las necesidades básicas de higiene y alimentos, sin embargo, en la Ciudad de México el consumo promedio de agua por persona es de 380 litros de agua al día (ver www.agua.org del Fondo para la Comunicación y la Educación Ambiental AC). Con una medida per cápita de consumo diario que rebasa de manera exorbitante la cantidad recomendada, la creciente demanda de agua, así como la disponibilidad por habitante, aunado al abastecimiento proveniente de fuentes cada vez más lejanas y la sobreexplotación de acuíferos, trae consigo una crisis de desabastecimiento por el recurso hídrico en la Ciudad de México. 

A pesar de que organismos como el INEGI en cifras oficiales del 2020 informo que la tasa de natalidad disminuyó respecto al 2019, el fenómeno migratorio y de gentrificación de la Ciudad de México, junto a las condiciones geográficas y los hábitos de consumo, son algunos de los factores que incrementan las dificultades para acceder al agua aún dentro de una ciudad desarrollada. 

De acuerdo con el Fondo para la Comunicación y la Educación Ambiental, el consumo de agua per cápita en 1955 era de alrededor de 40 litros al día; en 2012 el consumo aumentó a 280 litros por persona y las últimas cifras presentan una tendencia de incremento. 

“Se estima que para 2030, con el aumento de la población y el deterioro de los cuerpos de agua, descenderá hasta 3,430 metros cúbicos por habitante por año” declara el organismo civil, es decir, 94 litros al día, pero esto debido a la escasez y no a un uso más racional.

Una de las opciones que ya se lleva a cabo en la Ciudad de México es el programa "Cosecha de Lluvia", iniciativa de la Secretaria de Medio Ambiente en 2019. 

"Cosecha de Lluvia" aprovecha la infraestructura ya existente de los hogares beneficiarios, para capturar miles de litros de agua de lluvia que año con año se desperdician o provocan inundaciones en la ciudad.

Mediante un diseño sencillo, los sistemas que instalamos tienen la ventaja de ser de fácil escalabilidad, y permiten la captación, desinfección y uso de la lluvia de manera consistente.

Diagrama de funcionamiento del sistema de cosecha de lluvia. 

Sedema

Con el cuidado y limpieza adecuados, estos sistemas proveen de agua de excelente calidad a los hogares entre 5 y 8 meses al año, reduciendo la sobreexplotación de los mantos acuíferos y su recuperación ante la demanda, entre otros beneficios de índole ambiental y social.

Las alcaldías con mayor desabasto de agua, de acuerdo con el SUAC, es Coyoacán, Xochimilco, y Tláhuac. Le siguen Azcapotzalco, Milpa Alta, Tlalpan; Iztapalapa, Gustavo A. Madero, Cuajimalpa, entre otras. 

Al menos 319,826 personas en la Ciudad de México no reciben abasto de agua a través de la red pública de agua entubada (INEGI, 2015), por lo que el programa de Cosecha de Lluvia se aplica principalmente en alcaldías con alta marginación y donde el desabasto de agua es un problema constante.

Asimismo, durante 2021, el programa inició el pilotaje de la modalidad de subsidio parcial del 50%. Bajo este esquema, el programa Cosecha de Lluvia otorgó la mitad del costo de la instalación y los materiales del sistema a quienes tuvieran la capacidad de pagar la otra mitad.

Cosecha de lluvia, programa de la Sedema.

Hoy en día la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México reitera que el programa Cosecha de Lluvia es completamente gratuito, con una modalidad de subsidio total. Esta modalidad busca escalar el programa para alcanzar a la población que también padece la escasez de agua, y no cuenta con capacidad para adquirir un sistema de cosecha de lluvia subsidiado. 

A pesar de que este programa ataca de manera directa el desabasto hídrico en algunos hogares de la Ciudad de México, la captación y aprovechamiento de la lluvia no puede ser la única solución al problema del agua en la ciudad. Sin embargo, sus múltiples beneficios, su facilidad de replicabilidad y su potencial para ser una solución que se aplique en toda la ciudad, hacen del Programa una de las soluciones más innovadoras en política pública de disponibilidad del agua y resiliencia, única en su tipo para solucionar el problema de acceso y abastecimiento de agua en contextos urbanos.