José Luis Jiménez, vicepresidente de Enlace con Gobierno de Coparmex Ciudad de México, destacó que el fenómeno del nearshoring representa una oportunidad crucial para impulsar el empleo y mejorar los salarios en la capital. 

Durante su intervención en la última sesión de la Comisión Ordinaria "Desarrollo Económico y Oportunidades del Nearshoring para la CDMX", organizada por el Consejo Económico, Social y Ambiental de la Ciudad de México (CESA), Jiménez subrayó que la especialización de la mano de obra local es un activo que puede ser capitalizado a través de este proceso de relocalización de empresas.

Según el vicepresidente, el nearshoring no solo promete beneficios directos para los trabajadores, al aumentar sus ingresos gracias a empleos mejor remunerados, sino que también generará un impacto positivo en la recaudación fiscal.

"Al momento de generar más ingresos se generan más impuestos y el gobierno tendrá más recursos para poder invertirlos en infraestructura y en lo que se necesite", señaló Jiménez Barrera, quien representó a Adal Ortiz Ávalos, presidente de Coparmex Ciudad de México, en el evento.

Jiménez Barrera enfatizó que la capital del país cuenta con dos zonas estratégicas para aprovechar al máximo el nearshoring: la zona de Vallejo, conocida por su concentración industrial, y las áreas céntricas, donde las grandes corporaciones pueden establecer sus sedes. No obstante, advirtió que para atraer inversiones extranjeras, es fundamental facilitar la instalación de empresas en México, especialmente en términos de impuestos y otras regulaciones.

El directivo también hizo hincapié en la necesidad de una colaboración efectiva entre el gobierno, la iniciativa privada y la sociedad para crear un entorno propicio para estas inversiones. "Coparmex Ciudad de México tiene el conocimiento y la experiencia para entender las necesidades de las empresas, y podemos ser un puente entre los distintos actores para asegurar que estas inversiones sean rentables y sostenibles a largo plazo", afirmó.

Finalmente, Jiménez Barrera resaltó la importancia de la certidumbre para el éxito del nearshoring en la Ciudad de México. "Las empresas necesitan tener la confianza de que sus inversiones serán redituables, y si logramos crear un entorno de estabilidad, todos ganan: los trabajadores con mejores salarios, el gobierno con mayor recaudación y los empresarios con oportunidades de crecimiento", concluyó.