El proceso legal para recuperar a sus pequeños y tenerlos nuevamente consigo se ha convertido en una pesadilla para Amaranta Guerrero, una madre angustiada a la que con engaños la separaron de sus hijos de 5 y 6 años, y a quienes desde hace 16 meses sólo puede ver y escuchar por videollamada. A pesar de haber denunciado la sustracción de sus pequeños ha sido tratada por las autoridades judiciales como si ella fuera culpable de algún delito, cuando lo único que exige es que le devuelvan a sus hijos.

Amaranta cuenta a Crónica que su tormento comenzó el 26 de septiembre del 2020, día en el que sus hijos se encontraban de visita con su padre y éste tenía que devolvérselos, pero ese día su pareja le mandó un mensaje de chat en el que le informó que los niños se quedarías otros días más, ya que según le indicó, habían llegado familiares y quería que los pequeños pasaran tiempo con ellos y que después se los regresaría y compensaría esa ausencia.

La incertidumbre de esta mujer creció con el paso de los días al no tener noticias de sus pequeños, y es que sus mensajes de chat ni las llamadas telefónicas le fueron respondidas.

Frente a esta situación Amaranta, quien entró en desesperación al no tener noticias de sus hijos, acudió al Juzgado Familiar número 11 de la Ciudad de México para denunciar la situación que sus hijos tenían que estar con ella, Amaranta meses después acudío al Búnker para tramitar una denuncia de sustraccion de menores al ver que padre no acataba los lineamientos.

Angustiada y sin saber que hacer, Amaranta ha buscado ayuda para tratar de recuperar a sus hijos, por lo que acusó que las autoridades se olvidan de aplicar las leyes como debe de ser y solo responden a intereses personales.

Esta mujer recordó que uno de los momentos en los que comprobó que las autoridades encargadas de impartir justicia no actúan conforme a la ley y si podrían responder en beneficio de otras personas lo vivió el 26 de diciembre de 2019, cuando decidió irse de vacaciones con sus hijos, suceso que a través de un mensaje de chat le informó al padre de sus hijos, en el que le explicaba que regresarían el 5 de enero del 2020.

Esta situación se convirtió en unas vacaciones de terror para ella, toda vez que su expareja, a pesar de tener conocimiento de que se habían ido de vacaciones con los niños, pues le explicó en su mensaje, éste levantó una Alerta Amber, lo que derivó en una acción inmediata por parte de las autoridades que sí actuaron en su contra y en favor de su expareja, lo que no ocurre en este momento en el que tiene 16 meses sin estar con sus pequeños.

Amaranta refiere que el proceso para recuperar a sus hijos se ha tornado en una tormenta con nubarrones negros para ella, toda vez que el 5 de noviembre del 2020, acudió junto con sus expareja a una audiencia ante la juez de lo familiar, pero los niños no fueron presentados, porque el papa comento que había iniciado una denuncia en su contra por violencia familiar.

Amaranta señala que la imputación en su contra carece de toda lógica y de pruebas, ya que sus hijos nunca recibieron maltrato de su parte. Asimismo, aclaró que el padre de sus hijos si tiene antecedentes de violencia familia al haberla golpeado, pero la jueza no tomó en cuenta estas evidencias y por el contrario, se ha mostrado en favor de su expareja.

“La jueza ha sido una persona que no se ha preocupado por impartir justicia, es muy tibia en el tema, cuando son las audiencias ella no se presenta", aseveró Amaranta.

Debido a la indiferencia de la magistrada para impartir justicia, Amaranta señala que tuvo que recurrir a un amparo para poder ver a sus pequeños, lo que está en proceso.

Asimismo, señaló que más que recibir ayuda para recuperar a sus hijos ha sido víctima de amenazas por parte del agente del Ministerio Público, quien con amagos ha tratado de que desista en su denuncia para que sus pequeños regresen a casa con ella.

“¿Tú eres Amaranta Guerrero?, Claro que sí, ubico tu nombre muy bien, que bueno que no tengo la carpeta (del expediente del caso) en mi escritorio, porque si la tuviera aquí ya te arrestaría, yo voy hacer todo lo posible para que pises la cárcel”, fue la amenaza que me lanzó el agente del MP sin que existan pruebas de algo que me haga culpable, subrayó Amaranta al asegurar que no cesará en su esfuerzo hasta que recupere a sus pequeños.

Afectada por esta pesadilla que considera interminable, Amaranta empieza a ver manipulación también en el pensamiento y trato de sus hijos hacia ella.

Amaranta es otra víctima de Violencia Vicaria (daño a una mujer a través de sus seres queridos y especialmente de sus hijas e hijos) y a pesar de la situación y la denuncia que presentó por su situación las autoridades no han hecho nada para apoyarla.