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34 años después, Libia entrega a EU al fabricante de la bomba del atentado de Lockerbie

El libio Abu Aguila Masud, coautor de la explosión del vuelo de PanAm, cuyos restos cayeron sobre la localidad escocesa, matando a 270 personas,

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Abu Agila Masud, durante un juicio celebrado en Libia por otros cargos, fue secuestrado de su casa en Trípoli hace un mes

El libio acusado de fabricar el explosivo que destruyó el avión del vuelo de Pan Am sobre la localidad escocesa de Lockerbie hace 34 años se encuentra ahora bajo custodia de Estados Unidos, según confirmaron este domingo las autoridades escocesas y estadounidenses.

Hace dos años, Estados Unidos presentó cargos contra Abu Agila Masud y solicitud su extradición a Libia, donde esta encarcelado por otros delitos ajenos al atentado terrorista ocurrido el 21 de diciembre de 1988 y que dejó un saldo de 270 muertos, muchas de las víctimas, estadounidenses que hacía el vuelo Londres-Nueva York para celebrar las Navidades con sus familias.

La bomba oculta en una maleta explotó cuando el Boeing 747 de PanAm sobrevolaba la localidad escocesa de Lockerbie. Todos los 259 pasajeros y miembros de la tripulación fallecieron al igual que otras 11 personas en Lockerbie tras caerles los restos del avión.

Secuestrado en Trípoli

No trascendió si EU negoció en secreto la extradición o no, pero el canciller libio declaró hace unas semanas a la BBC que su gobierno “estaba muy abierto a colaborar en este asunto”.

Lo que sí está confirmado es que Musud fue secuestrado de su casa en Trípoli por un comando armado hace un mes, y que su familia acusó al gobierno de no aclarar qué sucedió y si estaba detrás de su secuestro.

El peor atentado desde el 11-S

El atentado sigue siendo el ataque terrorista más mortífero de la historia del Reino Unido y el segundo más mortífero para los estadounidenses, solo superado por los del 11 de septiembre de 2001. Pedazos del avión se esparcieron por un área de más de 2,000 kilómetros cuadrados y los restos de 17 víctimas nunca fueron localizados. El atentado llevó a aumentar las medidas de seguridad y los controles en los aeropuertos.

Abu Agila Masud es considerado el "tercer conspirador" tras la caída del avión.

La investigación inicial de Estados Unidos y el Reino Unido ya apuntó desde el principio a un hombre llamado Abu Agila Masud como sospechoso, pero entonces no fue identificado ni localizado. Un documental emitido en 2015 por PBS (la televisión pública estadounidense) y producido por el hermano de una de las víctimas le señaló como responsable del atentado.

Tras la caída del régimen de Muamar el Gadafi (quien felicitó al comando terrorista por el éxito de su misión encargada por los servicios secretos del país) y la posterior ejecución del coronel. Masud perdió a su protector y fue detenido por otros delitos; pero en 2012 confesó a la policía libia su implicación en el atentado.

Además de su participación en el atentado de Lockerbie, Masud también estuvo implicado, según Barr, en el atentado de 1986 contra la discoteca LaBelle de Berlín (Alemania Occidental), en el que murieron dos militares estadounidenses y una mujer turca.

Un portavoz del Departamento de Justicia estadounidense dijo a los medios estadounidenses, sin precisar fecha, que está previsto que Masud comparezca ante un Tribunal de Distrito del Distrito de Columbia por los dos cargos criminales en su contra relacionados con la explosión.

La burla de Gadafi

Hasta ahora, el único condenado por el atentado de Lockerbie fue el también libio Abdel Baset al Megrahi, entregado por el régimen de Gadafi en 1999 para lograr el levantamiento de las sanciones internacionales por su apoyo al terrorismo.

Fue juzgado en Países Bajos bajo ley escocesa, pues Gadafi se negó a entregarlo a Estados Unidos o Reino Unido. Al Megrahi fue sentenciado a cadena perpetua a comienzos de 2001, pero luego fue liberado en 2009 por las presiones de Gadafi, que alegaba que el preso padecía un cáncer terminal con solo una esperanza de vida de unos meses. Fue recibido como un héroe en Libia, para indignación del Reino Unido y Estados Unidos, y acabó muriendo en 2012.

Descubierto por la ropa

Aunque Al Megrahi siempre se declaró inocente, según la sentencia que le condenó, facturó una maleta en el aeropuerto de Luqa, en Malta (base de operaciones de las líneas aéreas libias), donde trabajaba, hasta el de Fráncfort, y de allí a Heathrow, en Londres, donde el artefacto explosivo, escondido en un radiocasete y con un temporizador activado, embarcó en el vuelo 103 de la aerolínea Pan Am con destino a Nueva York.

La principal prueba contra Al Megrahi, alto funcionario de los servicios secretos libios, fue la declaración de Anthony Gauci, un ciudadano maltés en cuya tienda fueron adquiridas las ropas encontradas en la maleta que contenía el explosivo. Otro acusado fue absuelto en el mismo juicio.