Un ataque masivo ucranio con drones se ha cobrado su primera vida en la región de Moscú desde que comenzó la guerra, hace dos años y medio. Se trata de una mujer de 46 años que murió en su departamento en una torre de viviendas en Rámenskoye, a medio centenar de kilómetros al sureste de la capital rusa. Otros seis residentes del edificio resultaron heridos.

Otro edificio de gran altura de Rámenskoye fue alcanzado por otro dron, lo que desató un incendio que obligó a su evacuación. Al menos 54 de sus 102 viviendas resultaron afectadas por el fuego.

Vuelos interrumpidos

Los fragmentos de un dron derribado por las fuerzas antiaéreas rusas del aeropuerto Zhukovski, no lejos de las torres de viviendas impactadas.

La amenaza de los aparatos ucranios también interrumpió tres de los cuatro aeropuertos que sirven a la capital rusa.

Los aeropuertos de Domodédovo y Vnúkovo, situados en la trayectoria de los drones provenientes de Ucrania, cancelaron los despegues y aterrizajes durante varias horas y los retrasos acumulados de hasta ocho horas aumentaron la tensión en sus zonas de embarque.

Por su parte, el aeródromo de uso civil y militar Zhukovski seguía sin operar pasado el mediodía por la caída de un dron y sus gestores emplazaban a los pasajeros a esperar “a la finalización de las labores de los investigadores”.

A pesar del impacto de la primera víctima en el corazón de Rusia desde el inico de la guerra, el Kremlin insiste en que la situación está bajo control.

“Nuestro ejército ya ha adquirido bastante experiencia en la lucha contra drones y obtiene buenos resultados”, declaró este martes el portavoz de Vladímir Putin, Dmitri Peskov, en alusión a los 144 drones ucranianos derribados este martes sobre territorio ruso, y sin entrar en detalles sobre la primera víctima moscovita de la guerra.

"Son enemigos"

Pese a todo, el vocero de Putin denunció que “los ataques nocturnos contra zonas residenciales no pueden ser relacionados con los ataques de las operaciones militares. El régimen de Kiev sigue demostrando cuál es su esencia, son enemigos”.

Nada dijo, no obstante, sobre los centenares de ataques nocturnos rusos contra la población ucraniana y con un trágico número de bajas, con más de diez mil civiles muertos y otros 40 mil heridos.