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México cuenta con avanzado protocolo para atención de violencia contra las mujeres

Las personas agredidas sexualmente deben recibir atención inmediata, al considerarse como una urgencia médica

Protesta contra la violencia de género

La violencia contra las mujeres es un problema de salud pública y sus consecuencias pueden ser inmediatas y agudas e incluso duraderas y crónicas, señaló la directora general del Centro Nacional de Equidad y Género y Salud Reproductiva (CNEGSR) de la Secretaría de Salud, Karla Berdichevsky Feldman.

Mención especial hizo de la violencia que puede tener consecuencias incluso mortales, sobre todo, cuando hay más de un tipo de violencia en el trascurso de la vida.

En el marco de su participación en el Coloquio organizado por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), “Impacto de la violencia de género en la salud de las mujeres”, indicó que datos de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (Endireh) 2021 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) señalan que 70 por ciento de las mujeres entrevistadas de 15 años y más reportaron haber sufrido un tipo de violencia alguna vez en la vida.

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Asimismo, en el último año, una de cada tres mujeres reportó haber enfrentado violencia psicológica, y una de cada cinco haber sufrido violencia sexual; de quienes reportaron haber sufrido violencia por parte de su pareja 30 por ciento no solicitó apoyo ni denunció las agresiones físicas y sexuales por no considerarlo importante.

Resaltó que el sector Salud cuenta con un protocolo avanzado de atención, establecido en la Norma Oficial Mexicana 046-SSA2-2005. Violencia familiar, sexual y contra las mujeres: criterios para la prevención y atención, la cual establece que las personas agredidas sexualmente deben recibir atención inmediata, al ser considerada como urgencia médica.

Después del ataque sexual, dijo, las primeras 72 horas son fundamentales para aplicar las medidas sanitarias que eviten infecciones de transmisión sexual, incluido el VIH.

En el caso de un embarazo producto del ataque sexual, las mujeres en esa situación, a partir de los 12 años tiene derecho a recibir atención en los servicios de aborto seguro, sin necesidad de presentar denuncia previa, en tanto que niñas y adolescentes deben ir acompañadas por su madre, padre o tutor, para solicitar el acceso a este servicio.

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La directora del CNEGSR puntualizó que la evidencia científica muestra de manera contundente los efectos y daños que causan los diferentes tipos de violencia en la niñez, la adolescencia y la edad adulta.

“La violencia que se ejerce a lo largo del ciclo de vida de una mujer impacta de manera multidimensional, no sólo a las víctimas en el ámbito físico o emocional, sino a las familias, comunidades y a la nación entera”.

Expresó que este tipo de foros son una oportunidad para articular el trabajo del sector Salud y avanzar hacia la eliminación de la violencia.