Como un legado de la actual administración, la atención primaria a la salud mental con enfoque preventivo, deja atrás el abordaje exclusivo en Hospitales de Psiquiatría.

El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) resaltó que en el presente sexenio se logró transformar la atención a la salud mental, al colocarla al centro de sus políticas para brindar atención integral y bienestar a su derechohabiencia.

Para lograr lo anterior, se modernizaron procesos, capacitación y actualización del personal médico para avanzar hacia un manejo con enfoque integral y preventivo, y el fortalecimiento de programas comunitarios.

Norma Magdalena Palacios Jiménez, titular de la Coordinación de Salud Mental y Adicciones, destacó que la gestión de Zoé Robledo, al frente del IMSS, deja un legado de compromiso y avance significativo en esta materia al impulsar un modelo de atención primaria a la salud que pone énfasis en la promoción, prevención, participación social, así como la colaboración y enlace con instituciones afines.

Con ello, sostuvo, se dejó atrás el viejo modelo centrado en la atención exclusiva por personal de psiquiatría y los Hospitales de Psiquiatría o centros de salud mental.

Ahora, con la creación de la Coordinación de Salud Mental y Adicciones se marca una ruta de atención transversal en los tres niveles de atención, para que todo el equipo de salud conozca y aborde el tema, cuente con las herramientas para que cuando la población usuaria llegue a solicitar un servicio, se brinden acciones preventivas y dar la atención integral, desde primera ayuda psicológica, intervenciones breves y orientaciones apropiadas en la materia.

Palacios Jiménez señaló que en cuanto a la infraestructura, desde octubre del 2023 se trabaja en la habilitación de espacios dentro de las unidades médicas hospitalarias que permita otorgar atención adecuada e integral para las personas que presentan alguna condición de salud mental, en particular para conducta suicida tanto en niños, niñas y adolescentes, como en personas adultas.

La educación continua al personal institucional se imparte a través de diversos cursos que favorecer el desarrollo de habilidades necesarias en la materia y que están alojados en plataformas institucionales como CLIMSS, la perteneciente a la Coordinación de Educación en Salud y de aliados estratégicos como la Organización Panamericana de la Salud y los Servicios de Salud IMSS-Bienestar.

Enfatizó que además de los planes y programas de salud, la promoción de un enfoque preventivo, también se trabajar directamente con la población para detectar y otorgar tratamientos oportunos, que reintegren a las personas para continuar con sus actividades en las mejores condiciones.

La doctora Palacios Jiménez detalló que entre 2021 y 2023 se han implementado acciones definidas en las ocho estrategias y 16 líneas de acción del Programa de Atención Integral a la Salud Mental del IMSS, el cual permitió estandarizar la detección de problemas de salud mental a través de la aplicación de un cuestionario de cinco preguntas en los módulos de PrevenIMSS y de Enfermería Especialista en Medicina Familiar que permite establecer la sospecha de depresión, ansiedad y trastorno de pánico en derechohabientes mayores de 20 años.

Con dicho cuestionario se han hecho ocho millones de detecciones, lo cual es relevante, dijo, porque uno de los grandes problemas es el diagnóstico tardío, que, en el caso de problemas de salud mental puede demorar entre 10 y hasta 15 años, pero una persona con sospecha es remitida con el personal médico familiar, se hace la confirmación y se inicia tratamiento.

Asimismo, se han brindado más de 500 mil consultas, que incluye la atención por psiquiatría y psicología en forma anual.

A la fecha se cuenta con 407 psicólogos y 426 psiquiatras, además de personal no especializado integrado por 17,346 médicos familiares y 2,915 médicos generales, distribuidos en las más de 1,800 unidades médicas de los tres niveles de atención del IMSS a nivel nacional.

Sostuvo que en el mediano plazo se planea fortalecer y hacer una mejor distribución del personal especializado y robustecer las competencias del personal no especializado bajo el modelo de salud mental propuesto y se otorgue la atención a las situaciones complejas como conducta suicida en niños, niñas, adolescentes y personas adultas.