Opinión

Migración y frontera sur

Migración y frontera sur

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

La frontera sur de México está delimitada por una línea de 1,149 km, de los que 956 colindan con Guatemala y 193 con Belice, en tanto corresponde a cuatro estados de la República Mexicana: Campeche, Chiapas, Tabasco y Quinta Roo. Está región experimenta una gran cantidad de flujos regulares e irregulares de personas provenientes mayoritariamente de países centroamericanos. Cada año transitan en México medio millón de centroamericanos, en su mayoría de Guatemala, Honduras y El Salvador. Cruzar ilegalmente la frontera que separa Guatemala de México es muy fácil: basta con pagar tres dólares y subirse en una balsa para llegar a la orilla Suchiate. El problema no es cruzar la frontera, sino atravesar México.

En los últimos años, el gobierno mexicano ha perseguido y deportado a más migrantes que las propias autoridades estadunidenses. Un reporte de la Dirección de Migración de Guatemala, precisó que 5,868 centroamericanos —2,788 guatemaltecos, 2,232 hondureños, 526 salvadoreños y 43 nicaragüenses— fueron deportados por tierra por México del 1 al 31 de enero de 2018, frente a 4,038 en el primer mes de 2017. Con la llegada de Trump al gobierno se establece un mayor control de las fronteras y otras medidas drásticas como la reciente política de “tolerancia cero” que contemplaba que los niños fuesen separados de sus padres en la frontera sur de Estados Unidos, logrando que los centroamericanos reconsideraran sus planes.

Frente a la incertidumbre, migrantes de tránsito por México que tenían intenciones de llegar a Estados Unidos están optando por quedarse en nuestro país y debido al aumento de restricciones prefieren fusionarse con la población aunque sean indocumentados. Es probable que muchos aquellos que planeaban llegar a Estados Unidos decidan asentarse sobre todo en los lugares donde cuenten con redes familiares y sociales. A los centroamericanos les interesa quedarse en México por la facilidad del idioma, pero también influye el que haya comunidades de centroamericanos establecidas aquí, lo cual facilita la migración y permanencia.

Se estima que viven aproximadamente 300,000 centroamericanos en México, en comparación con los 3,000,000 que viven en Estados Unidos.

Ante el sombrío panorama para llegar a Estados Unidos y la decisión de no regresar a Centroamérica, muchos están tramitando estatus de refugio en México, un fenómeno cada vez más común en el país que durante décadas fue ruta de tránsito.

México y los países centroamericanos deben construir una nueva era de cooperación para dar una solución efectiva y viable a la creciente migración centroamericana que se está concentrando en México. Para afrontar el problema será necesario idear una estrategia integral cuya visión procure el respeto por los derechos humanos, la dotación de mayor seguridad en la frontera sur del país, aunada al mejoramiento de la infraestructura binacional en la línea fronteriza. Por lo que esta estrategia deberá ser integral puesto que se presenta como uno de los grandes retos para la nueva administración de México, las relaciones bilaterales con los países centroamericanos y por supuesto, con Estados Unidos.

cpi@prodigy.net.mx