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La poeta, prosista y periodista Ana Blandiana, considerada un referente de la resistencia frente al comunismo rumano, aseguró este lunes que, pese a que parte de su obra fue censurada, siempre se sintió “libre” para crear, porque, a su juicio, “ninguna dictadura del mundo puede impedir que un escritor escriba”.
Blandiana, Premio Princesa de Asturias de las Letras 2024, hizo estas reflexiones durante un encuentro con alumnos de secundaria y bachillerato que participaron en el programa educativo ‘Toma la palabra’, organizado con motivo de la entrega de estos galardones.
Blandiana (Timisoara, 1942), que convirtió su vocación literaria en resistencia moral frente a la férrea censura del dictador Nicolae Ceaucescu, explicó que “siempre se ha sentido libre para escribir”, pero el problema residía “cuando quería publicar” lo que había firmado.
En este sentido, señaló que fue censurada en tres ocasiones y que también hubo una época en la que se impidió que sus obras accedieran a librerías y bibliotecas.
Autora de más de una treintena de libros de poesía, novelas y ensayos traducidos a más de 25 idiomas, Blandiana -seudónimo de Otilia Valeria Coman- comentó que la poesía ha sido empleada por ella y también por sus colegas como un “mecanismo” para escapar de la censura, porque “nacía de palabras que decían solamente la verdad”.
La escritora, reconocida con el Princesa de las Letras por ser “una creadora radicalmente singular” con una obra “indómita”, se mostró optimista con el futuro que tiene la poesía, porque “puede salvar el mundo”.
“Prueba de ello es que en las cárceles comunistas en Rumanía se han escrito muchos poemas, incluso en condiciones en las que no había lápiz ni papel”, insistió.
Impacto de las redes sociales
La escritora se mostró muy emocionada al conocer los trabajos audiovisuales que realizaron 25 centros educativos de Asturias (norte) sobre algunos de sus poemas, entre ellos ‘Animal Planet’, ‘En las colinas’ y ‘Sobre patines’.
Blandiana reflexionó con ellos acerca del impacto de las redes sociales, unas herramientas que “parecen que van en contra de la soledad, cuando, en realidad, la potencian”.
Además, la autora abordó el impacto que tendrá el desarrollo de la tecnología y, tras mostrarse convencida de que a corto plazo “los robots van a ser más inteligentes que las personas”, dijo que la única forma de resistir es potenciando aquellos espacios que están vetados para ellos como “la naturaleza, los sentimientos y las emociones”.
En el actual contexto de conflictos bélicos y ante los retos que enfrenta la sociedad, Blandiana también se preguntó ante los estudiantes “quién sabe si el deber de su generación es salvar el mundo”. “Para eso tenéis que leer, para enteraros de lo que ha existido hasta vosotros”, les aconsejó.