Synth Holdings se llama la empresa dedicada a la aportación de los innovadores recursos de la Inteligencia Artificial a la producción cinematográfica; una empresa que, con sede en Los Ángeles, California, ha sido fundada por el destacado productor Santiago García Galván, en alianza con el cineasta Jim Steele, la cual está incorporando a la industria una serie de recursos técnicos para la evolución técnica del llamado Séptimo Arte.
Santiago García Galván, productor de cine, fotógrafo y empresario mexicano que se ha destacado por su innovador enfoque en la industria del entretenimiento en América Latina y en proyectos internacionales, ha trabajado en casi 100 producciones que incluyen cine, televisión, música y proyectos artísticos.
En esta entrevista nos habla del contexto en que surge esta empresa pionera: “Synth Holdings, explica Santiago Garcia, surge en un momento clave de la evolución cinematográfica, donde las tecnologías emergentes, especialmente la inteligencia artificial (IA), están redefiniendo la forma de producir y consumir contenido audiovisual. La empresa la fundé con Jim Steele, productor norteamericano con más de 50 películas en su trayectoria, incorporando en mi caso mi experiencia con casi un centenar de producciones. De esta manera la empresa combina una sólida experiencia en el cine tradicional con una visión innovadora que apuesta por el futuro”.
Egresado de la carrera de Dirección de Cine y Artes Visuales en la Universidad de Artes y Entretenimiento de Madrid (TAI), Santiago García añade que Synth Holdings nace en un momento crucial donde la industria cinematográfica enfrenta una transformación significativa debido al avance de las tecnologías digitales, en especial la inteligencia artificial. Identificamos que el cine, aunque arraigado en técnicas tradicionales, tiene la oportunidad de evolucionar hacia un modelo más eficiente y accesible sin perder su esencia artística. Nuestra misión es integrar la IA como una herramienta que complementa, no reemplaza, las habilidades humanas.
Así, buscamos democratizar el acceso a la educación cinematográfica, reducir los costos de producción, y ampliar las posibilidades creativas, siempre dentro de un marco ético que respete los valores del arte y la propiedad intelectual. Synth Holdings se construyó para servir como un puente entre la tradición y la innovación, aprovechando la IA para potenciar las capacidades humanas en lugar de sustituirlas.
García Galván amplía su explicación: “La idea nace de la necesidad de optimizar procesos, reducir costos y abrir nuevas posibilidades creativas, todo mientras se mantiene el espíritu artístico del cine. Synth Holdings busca ser un puente entre lo tradicional y lo disruptivo, utilizando la IA como una herramienta para democratizar el acceso al cine, aumentar la eficiencia y expandir las fronteras de lo posible, siempre respetando los valores éticos y la propiedad intelectual”.
Es importante decir que el éxito de Synth Holdings radica en la visión conjunta de sus fundadores, Jim Steele y Santiago García Galván, quienes aportaron no solo su vasta experiencia en producción, sino también su capacidad para identificar cómo la IA puede transformar positivamente la industria cinematográfica. Desde el principio, reunieron equipos multidisciplinarios que incluyen expertos en cine, tecnología, ética e innovación empresarial para desarrollar soluciones que respondan a las necesidades del mercado.
“En Filmschool.ai, agrega el entrevistado, combinamos lo mejor del cine tradicional con herramientas de IA que automatizan procesos como el diseño de producción, la previsualización de escenas y la edición básica, permitiendo que los estudiantes se enfoquen en el aspecto creativo. En SynthAds.ai, colaboramos con grandes artistas internacionales y ofrecemos oportunidades laborales a los talentos más prometedores de nuestra escuela, desarrollando campañas publicitarias hiperpersonalizadas y basadas en análisis predictivos impulsados por IA. Por último, en Synth Films, la integración de IA nos ha permitido desarrollar largometrajes que combinan actuaciones de actores reales con efectos visuales de última generación, manteniendo el control creativo en manos de los directores y productores.
Nuestra capacidad para equilibrar lo tradicional y lo disruptivo, siempre dentro de un marco ético, nos ha posicionado como líderes en la integración de IA en el cine.
¿Qué productos ha generado su empresa de IA vinculada al video, la animación y la producción de filmes?, le preguntamos al productor de películas con directores como Guillermo Arriaga, Nick Cassavetes o Demián Bichir.
“Synth Holdings ha desarrollado productos innovadores que están redefiniendo los estándares de la industria audiovisual:
Filmschool.ai: Creamos plataformas educativas impulsadas por IA que asisten a los estudiantes en tareas como el análisis avanzado de guiones, la generación de storyboards en tiempo real y la previsualización de escenas mediante renderizados rápidos. Esto permite a los futuros cineastas combinar fundamentos tradicionales con las herramientas tecnológicas más avanzadas.
SynthAds.ai: Hemos producido campañas publicitarias revolucionarias utilizando modelos de aprendizaje profundo para generar contenido visual adaptado a públicos específicos. Estas campañas destacan por incluir animaciones hiperrealistas y efectos visuales personalizados, todo creado con tiempos y costos reducidos, pero con altos estándares de calidad.
Synth Films: Actualmente estamos desarrollando dos largometrajes que representan un hito en la integración de IA en el cine. Utilizamos actores reales como base, complementando la producción con herramientas de IA para crear entornos virtuales hiperrealistas, efectos visuales avanzados y técnicas de doblaje de voz y sincronización facial que enriquecen la narrativa sin comprometer la esencia del trabajo actoral.
Estos productos reflejan la misión de Synth Holdings: ser un referente en la integración ética y creativa de la IA en la industria inematográfica, aprovechando la experiencia y visión de Jim Steele y la la mía propia para liderar esta nueva era del cine.