La creación de convocatorias basadas en tecnologías emergentes -como inteligencia artificial, arte generativo y música electrónica-, así como subsidios para infraestructura tecnológica, que se incluya a los Juegos de Rol en las convocatorias de apoyos y promover lectura desde perspectivas multidisciplinarias son algunas de las propuestas que se hicieron durante la Mesa 6 de las Reuniones de consulta hacia el Programa Sectorial de Cultura, cuyo propósito es “articular políticas desde el Sistema de Apoyos a la Creación (SAC)”, según recordó José Luis Paredes Pacho, director del Sistema de Apoyos a la Creación y Proyectos Culturales.
Bajo la moderación de Tareke Ortiz, director de Área en el Sistema de Apoyos a la Creación y Proyectos Culturales, la sexta mesa se dividió en 4 momentos para abordar diferentes temáticas: mejoría de convocatorias, actualización y consideración de nuevas disciplinas; economía cultural y economía social; circulación y movilidad de artistas, proyectos y recintos; ecosistema cultural y el Sistema de Apoyo; y los apoyos al cine.
ACTUALIZACIÓN
Que se consideren y apoyen nuevas vertientes poéticas que hacen recurso de otros lenguajes y tecnologías fue la petición que hizo la poeta Rocío Cerón.
Para ello solicitó que se considere un subgénero en las convocatorias de poesía, específicamente dedicado a la poesía expandida o transmedia, con jurados y dictaminadores con los conocimientos y capacidad de comprender y leer estas obras.
“Los géneros artísticos son cada vez más porosos, las fronteras menos visibles y por eso hace falta revisión permanente”, observó y fue una idea que se reiteró en varias participaciones.
En ese sentido, en la primera etapa de la mesa también sobresalió una solicitud para incluir un apartado de apoyos para los juegos de rol, que por definición no alcanza a entrar ni en las convocatorias de literatura ni en teatro.
“Para quienes no están familiarizados con el tema, estos juegos tienen 50 años de haber sido creados. Hay una enorme diversidad y parte de las características que esta forma de actividad cultural posee tiene que ver con la posibilidad de desarrollar historias y de hacerlo de una manera improvisacional, pero dinámica. Esto coloca los juegos de rol parcialmente con relación a la literatura e igualmente en el campo del teatro”, manifestó Edgar Ramírez Hernández.
En representación de Avalon Club de Rol, Edgar Ramírez apuntó que las personas ejecutantes (artistas) son en su mayoría adultos jóvenes, mientras que los beneficiarios de este tipo de actividades van desde las infancias hasta los adultos mayores.
Además, señaló que los juegos de rol son una herramienta didáctica para desarrollar la creatividad a la vez que son una actividad social.
“Actualmente, algunas instituciones le han dado a los juegos de ese lugar que necesita.Por ejemplo, está la Escuela Nacional de Antropología e Historia; la Secretaría de Cultura del Estado de Veracruz, que en sus convocatorias ya han abierto esas posibilidades, Inclusive aquí el mismo LABNL se ha facilitado entrar a esas convocatorias y hemos estado participando. Sin embargo, hay muchísimos lugares donde todavía a nivel institucional los juegos de rol no tienen ese reconocimiento, a veces porque falta el conocimiento y a veces porque no ha habido quien llegue a tocar la puerta”, agregó.
Por otra parte, entre las críticas relacionadas con las convocatorias, Gabriel Antonio Pascal Falcón señaló que cada vez se ha dificultado más la comprensión de las convocatorias y parecería que la intención es ir eliminando a quienes participan en las fases administrativas.
Desde su perspectiva, las convocatorias deben ser planeadas de la mano de creadores en las diferentes especializaciones y aprovechó la ocasión para recordar que “la Secretaría de Cultura debe subsidiar el acceso al arte, esa es su función y debe ser responsable de calidad artística”.
Por ello le parece fundamental subir los montos de apoyo, que aseguró no han subido en años.
OTRAS PETICIONES Y PROPUESTAS
En cuanto a lo relacionado con “economía cultural y economía social ¿qué hay más allá de las becas?”, los participantes indicaron que los recortes y falta de presupuestos son preocupantes y problemáticos, ya que conllevan la precarización de los artistas.
Hubo propuestas como la creación de un sistema de adquisición de proyectos; y crear una Unidad de Inteligencia Financiera para el Arte y la Cultura con fondos públicos y privados.
Asimismo, faltan criterios para considerar a los artistas que tienen un ingreso paralelo a su actividad creadora.
“Mientras que las actividades vinculadas a la docencia suelen entenderse en algunos procesos de evaluación de proyectos como distractoras de una profesión creadora, tal vez se requiere una alternativa para perfiles que aportamos a la cultura como artistas en campo y enseñando a otros”, expresó Samuel Cepeda Hernández.
En aras de pensar los apoyos como detonador de estrategias de autosustento, el artista y docente propuso buscar modelos alternativos de reconocimiento que permitan, además de los incentivos económicos, “anexar credenciales de valor a los perfiles creadores que ejercen actividades de docencia en programas educativos, vinculados a las artes; y la creación de un programa de acompañamiento para el desarrollo de los creadores en el diseño de proyectos que consideren la gestión, la administración de recursos, así como la delimitación de una cadena de distribución y retorno hacia la inserción en modelos de operación que sean viables y sustentables para la generación de riqueza, material e inmaterial”.
En el tema de cine, se cuestionó la diferencia de montos entre categorías de convocatoria, -“como si valiera menos el cine experimental o los procesos no fueran complejos y costosos”- por lo que se propuso que también sean procesos de registro y solicitud distintos, más sencillos para los que aspiran a montos menores.
También se planteó la necesidad de diferenciar cine y transmedia como categorías de creación y la urgencia de que las instituciones de la Secretaría de Cultura hagan sus pagos a tiempo.