
La ópera “Lady Macbeth de Mtsensk” es una de las obras más famosas del compositor ruso Dimitri Shostakóvich (1906-1975) Fue estrenada hace 91 años, en 1934 en Leningrado, y apenas hace unos días en México (marzo 2025). La ópera es una adaptación de la novela “Lady Macbeth del distrito de Mtsensk” de Nikolái Leskov.
La música del joven de sólo 27 años Dimitri Shostakóvich, más que acompañar a los cantantes es todo un personaje que comenta y crea un ambiente sonoro emocional y constituye una parte protagónica de la ópera. El lenguaje musical de Shostakóvich, aunque es moderno resulta accesible; lleno de ritmos complejos, armonías disonantes y melodías rotas que dibujan la brutalidad de la obra. La sección de percusiones de la orquesta del Teatro de Bellas Artes, merece una mención aparte y una felicitación, muy eficientes y destacados.
La historia se centra en la figura de la joven Katerina Lvovna, casada con un hombre adinerado. Ella vive atrapada en un matrimonio monótono, sin pasión ni propósito. Conoce al simpático joven Sergei y se enamora, comienza así un romance clandestino.
Muy sorprendente la actuación y el canto de Lada Kyssy, que interpretó el personaje de Katerina. Prácticamente toda la obra está cantando y su voz no muestra mayores signos de fatiga pese a que canta con toda la voz, con gran fuerza la mayor parte del tiempo, su actuación llena de verdad escénica. A medida que la historia avanza, Katerina se convierte en un ser cada vez más oscuro y despiadado, que comete homicidios para continuar su relación con Sergei, tratando de ser feliz.
Quienes más se lucen en esta obra son la orquesta, el compositor y Katerina.
El personaje del suegro de Katarina, el rudo Borís estuvo a cargo del bajo argentino Hernán Iturralde; estupendo en su canto y en su actuación.
La ópera fue un éxito en su estreno mexicano, como lo fue en su época, pero pronto fue objeto de críticas por parte de las autoridades soviéticas, que acabaron censurándola y sacándola del repertorio. Obligaron a Shostakóvich a retractarse y a prometer que en el futuro sería más soviético y apegado a los lineamientos estéticos de su patria.
El tenor mexicano Evanivaldo Correa, interpretó muy brillantemente el personaje de Zinovi, el marido de Katarina e hijo de Borís.
El otro personaje principal es el de Sergéi (el amante) interpretado valiente y vigorosamente por el tenor ruso Sergei Radchenko que a pesar de que su voz estaba en mal estado, sacó el trabajo adelante y de manera correcta.
Los personajes secundarios también muy notables, hay que destacar a los tres mexicanos Dhyana Arom que encarnó el personaje de Aksinya la cocinera abusada por los obreros; magnífico canto y actuación de la maestra. Víctor Hernández que encarnó al obrero ebrio, cantó de maravilla. Ese personaje incluso canta una convulsa aria cuando descubre el cadáver en la caja fuerte; su actuación un poco exagerada, pero quizá así se lo pidió el director escénico. Tomás Castellanos en su personaje del sargento de policía se lució con su canto y actuación que incluyó una “aria” con coro, ¡felicidades!
Excelentes la dirección orquestal del ruso Migran Agadzhanyan y la dirección escénica del argentino Marcelo Lombardero, así como el coro cantaron actuaron y se desplazaron por el escenario como verdaderos artistas.
José Luis Reynoso, interpretó al Pope y un viejo convicto; nos dejó sorprendidos por su voz, su técnica vocal y su actuación. Notables también Carlos Santos y Armando Gama.
¡Enhorabuena a todo el equipo que hizo posible ésta muy difícil ópera! Hacía mucho que no se veía en Bellas Artes algo de tan alto nivel.
“Lady Macbeth de Mtsensk” sigue siendo una de las óperas más importantes e influyentes del siglo XX; historia oscura y música innovadora de Shostakóvich, una experiencia única.