Cultura

Denuncian destrucción del montículo de Atezcatlán, en Milpa Alta

El sitio en El Calvario cuenta con registro ante el INAH, por lo que piden ayuda al próximo alcalde Octavio Rivero para evitar el avance de daños>

Construcción de un muro de contención
Los ciudadanos convocan el próximo domingo 1 de septiembre, a las 15:00 horas, a una protesta ciudadana pacífica ante la destrucción de la estructura. Los ciudadanos convocan el próximo domingo 1 de septiembre, a las 15:00 horas, a una protesta ciudadana pacífica ante la destrucción de la estructura. (Cortesía)

Cronistas de la alcaldía Milpa Alta denunciaron la destrucción con maquinaria de una parte del montículo de Atezcatlán o mejor conocido como El Calvario, sitio prehispánico que cuenta con registro ante el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), por lo que piden ayuda al próximo alcalde Octavio Rivero para evitar el avance de daños.

“Se está destruyendo el montículo histórico de origen prehispánico, conocido en la actualidad como El Calvario, mismo que aparece en el mapa de los límites de los montes comunales de Milpa Alta, de 1690, y es una de las mojoneras que delimitan Milpa Alta, reconocida en la Constitución de la Ciudad de México”, señalan.

Los cronistas mencionan que ahí los habitantes de Tecómitl realizan año con año la representación de la pasión de Cristo y convocan el próximo domingo 1 de septiembre, a las 15:00 horas, a una protesta ciudadana pacífica.

En entrevista, la arqueóloga y responsable del registro del sitio, Blanca Paredes Gudiño explica que el nombre de Atezcatlán se debe a que estaba cerca del lago y es un sitio del epiclásico, es decir, con ocupación entre el 600 y 900 d.C.

“Es un sitio muy importante, de los pocos que quedaban de pie para la época prehispánica y que nos refería la forma de organización de este momento de cambios, de movimientos de población entorno a la Cuenca de México; es un sitio monumental donde se hacían una serie de rituales, entonces es importante protegerlo”, comenta.

La arqueóloga explica que la parte afectada es el basamento “de un templo, por eso tiene escalinatas, no era el único, existían más estructuras, pero la población creció tanto que empezaron a desaparecer estructuras menores que estaban en la parte posterior. Esta estructura que quedaba miraba hacia el Teutli, por eso las escalinatas estaban orientadas hacia el poniente”.

Finalmente, Paredes Guidño indica que desde el INAH se trabaja el sitio. “Ha estado en proceso de investigación, aparte del registro oficial, hice el plano de delimitación del sitio, tenemos investigaciones avanzadas”. 

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