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El arqueólogo mexicano Eduardo Matos Moctezuma (Ciudad de México, 1940), quien inició hace 44 años el Proyecto Templo Mayor, una de las investigaciones más importantes del país, y quien ha sido el principal promotor del mundo mesoamericano, es el ganador del Premio Princesa de Asturias de Ciencias Sociales 2022 “por su excepcional contribución al conocimiento de las sociedades y culturas prehispánicas”.
Así lo dio a conocer ayer la Fundación Princesa de Asturias en donde el jurado destacó su "extraordinario rigor intelectual para reconstruir las civilizaciones de México y Mesoamérica, y para hacer que dicha herencia se incorpore con objetividad y libre de cualquier mito”.
“En la madrugada me fue comunicado por la Fundación Princesa de Asturias, que radica en Oviedo, el que se me había otorgado por el jurado este premio, lo cual agradecí muchísimo porque es un premio de gran significado”, expresó en entrevista el también Premio Crónica y miembro de El Colegio Nacional.
El investigador emérito del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) narró vía telefónica que quienes lo propusieron al premio fueron la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Academia Mexicana de la Lengua (AML).
“A ambas instituciones les estoy muy agradecido. También conté con cartas de apoyo de otros investigadores que en el pasado recibieron el premio cuando era Príncipe de Asturias, me refiero a dos académicos de primer nivel como son Francisco Bolívar Zapata y Pablo Rudomin, ambos miembros de El Colegio Nacional” dijo.
Para Matos Moctezuma los premios no son sólo un reconocimiento para la persona que los recibe, sino que es una distinción para las instituciones que lo formaron.
“Mi vida académica la he pasado durante 62 años en el Instituto Nacional de Antropología e Historia y me formé en la Escuela Nacional de Antropología e Historia, es mi alma máter, esta escuela que ha padecido en los últimos meses reducciones de presupuestos y sin embargo es una escuela que dio a diez premios nacionales en México", expresó.
Es por ello que el arqueólogo considera el Premio Princesa Asturias un agradecimiento a las personas que lo han apoyado en sus estudios e investigaciones.
"Mi agradecimiento a estas instituciones y también a mis maestros que me formaron. A la vez uno se convierte en maestro y forma a nuevas generaciones de arqueólogos. Estoy muy contento por este galardón”, dijo.
MÁS APOYO A CIENCIAS SOCIALES.
Matos Moctezuma enfatizó que las ciencias sociales necesitan contar con un apoyo decidido.
“Sus investigaciones son importantísimas porque permiten conocer, como su nombre lo dice: ciencias sociales, a las sociedades, al hombre, conocer su proceso de desarrollo y ver cuáles son las directrices que se deben dar para que estos científicos se desarrollen y puedan aportar, a través de sus investigaciones, todo un caudal de conocimientos para el mejoramiento de la sociedad”, expresó.
El apoyo debe ser irrestricto y decidido para que nuestros futuros investigadores cuenten con todos los elementos que son indispensables para llevar a efecto una buena investigación, agregó.
A una de las figuras que más admira el galardonado es al antropólogo y arqueólogo Manuel Gamio (1883-1960).
"Desde hace muchos años, hace un siglo que se publicó una obra de Don Manuel Gamio, ‘La población del Valle de Teotihuacán’, es un proyecto que llevó a cabo en 1917 y sus conclusiones se publicaron en 1922, cumple un siglo y ahí ya Don Manuel había conjuntado un grupo de especialistas de diferentes ramas, era un proyecto inter y multidisciplinario", narró.
Gracias a ese equipo pudo llevar a cabo toda la investigación del Valle de Teotihuacán, añadió Matos Moctezuma.
"Actualmente yo siempre he visto con enorme admiración la figura de Don Manuel Gamio más ahora que se cumple un siglo de que se publicara su obra maestra con la colaboración de muchos investigadores", expresó.
Matos Moctezuma señaló que Gamio marcó el camino a seguir en la investigación arqueológica.
"Hoy varios proyectos han conjuntado especialistas, entre ellos, el Proyecto Templo Mayor que actualmente dirige Leonardo López Luján, y el Programa de Arqueología Urbana que dirige Raúl Barrera, ellos continúan adelante con las investigaciones, con nuevas técnicas, con nuevas ideas y eso es lo interesante: debe de haber esa renovación para que se continúe siempre con las investigaciones de punta que han dado resultados muy satisfactorios", indicó.
El jurado del Premio Princesa de Asturias de Ciencias Sociales 2022 destacó la labor del arqueólogo mexicano en el estudio de ciudades prehispánicas como Tula, Teotihuacán y Tenochtitlan. En especial, destacaron el Proyecto Templo Mayor en donde reconocieron “la intensidad y la continuidad de la investigación de campo, páginas ejemplares del desarrollo científico de la arqueología y del diálogo fecundo con el pasado, entre culturas distintas y entre las ciencias sociales y humanas”.
TRAYECTORIA ACADÉMICA.
Eduardo Matos Moctezuma fue director y fundador del Proyecto Templo Mayor en 1978, director del Museo Nacional de Antropología (1986-1987) y del Museo del Templo Mayor (1987-2000). Entre su vasta obra destacan “El Templo Mayor de los aztecas” (1988), “Muerte a filo de obsidiana” (1996), “Estudios mexicas” (1999-2005) y “La muerte entre los mexicas” (2010).
Ha sido ganador del Premio Nacional de Ciencias y Artes 2007, la Universidad de Harvard lo distinguió con la Medalla Henry B. Nicholson en 2002 y en 2016 estableció una cátedra con su nombre. Ingresó a El Colegio Nacional el 24 de junio de 1993.
En enero de 2021, cuando recibió la Medalla Museo de Antropología de Xalapa, su discípulo Leonardo López Luján, director del Proyecto Templo Mayor, narró las contribuciones de su maestro al entendimiento del mundo mexica.
“Un 18 marzo de 1978 se funda el Proyecto Templo Mayor y quien lo encabezará es un joven de 38 años de edad, pero que ya en ese momento había sido director de la ENAH y presidente del Consejo de Arqueología. Sin embargo, no fueron esos puestos los que lo hicieron merecedor a encabezar este gran proyecto, sino porque había dirigido antes otro proyecto: Tula, que en su momento fue revolucionario”, dijo.
Matos Moctezuma comenzó la excavación del mayor edificio del imperio mexica y los pocos lugares donde era posible comenzar la excavación eran los solares vacíos que se utilizaban como estacionamiento en la Ciudad de México, añadió el arqueólogo.
“Comenzó con la excavación un proceso muy debatido y polémico de la demolición de los edificios que ocupaban 13 mil metros cuadrados que luego se confirmó que eran edificios modernos, hechos de concreto y de cristal. Había más de 600 trabajadores en ese equipo interdisciplinario laborando intensamente para sacar en un muy poco tiempo a la luz todos los tesoros de la principal pirámide de Tenochtitlan”, recordó.
Fue así que obreros de la Compañía de Luz y Fuerza localizaron la escultura monumental de Coyolxauhqui, la cual fue excavada por un equipo de Salvamento Arqueológico del INAH. El hallazgo de este monolito marcó un parteaguas en el estudio de la cultura mexica. Esto ocasionó que el plan original del INAH para crear el Museo de Tenochtitlan se transformara en el Proyecto Templo Mayor.
RECONOCIMIENTOS.
Eduardo Matos Moctezuma también es miembro del Seminario de Cultura Mexicana, de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, de la Sociedad de Antropólogos del Caribe, de la Asociación de Escritores de México, de la Academia Mexicana de la Historia, de la Academia Mexicana de la Lengua, miembro honorario del Archaeological Institute of America y miembro honorario de la Society of Antiquaries of London.
En 2009, la Universidad de Londres lo distinguió como Honorary Professor en el UCL Institute of Archaeology y, en 2016, la Universidad de Harvard estableció una cátedra con su nombre. En 2022, la Academia Americana de Artes y Ciencias lo nombró miembro honorario internacional. Es doctor honoris causa por la Universidad de Colorado y por la Universidad Nacional Autónoma de México.
Además ha realizado una importante labor de difusión a través de varios programas en los museos mexicanos, destinados a acercar los contenidos a los menores o a personas con discapacidad física o intelectual. Ha dirigido exposiciones, entre ellas “Aztecs” para la Royal Academy of Arts de Londres, “Isis y Quetzalcóatl” en el Fórum de las Culturas de Monterrey o “Tenochtitlán y Tlatelolco. A 500 años de su caída” en el Museo del Templo Mayor.
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