El pasado 17 de marzo se inauguró en la sala de exposiciones temporales de El Colegio Nacional la muestra “Vicente Rojo: Volcanes”, como parte de las actividades que esta institución realizó para recordar al artista mexicano en su primer aniversario luctuoso. La muestra, conformada por quince piezas de la obra escultórica del autor, permanecerá abierta al público hasta el próximo 1 de julio de 2022, en las instalaciones de este recinto, ubicado en Donceles 104, Centro Histórico, en la Ciudad de México. Para dar a conocer un poco más de esta muestra, compartimos con los lectores de Crónica algunos textos que dan cuenta del trabajo en exhibición.
“Vicente Rojo: Volcanes”
Los volcanes —motivos significativos en la geografía y el arte mexicano— cruzan la imaginación y la mirada de quienes los contemplamos desde lejos. Esta exposición, producida por El Colegio Nacional, presenta un paisaje volcánico único, nacido del ingenio y talento de Vicente Rojo, miembro de esta institución. En esta muestra se presentan quince piezas de la obra escultórica del autor, las cuales se agrupan en tres propuestas formales principales: Volcanes construidos, Volcanes encendidos y Volcanes despiertos, así como un Volcán armado y un Volcán metálico.
Realizadas entre 1998 y 2005, las formaciones geológicas de Rojo ofrecen a la vista diversas texturas y materiales como el bronce, la cerámica y el aluminio, que nos remiten, a su vez, a ríos de lava, cordilleras rocosas, columnas de nubes y fumarolas que conectan la tierra con el cielo y que nos siguen mostrando un camino de símbolos perdurables que la plástica nacional no ha dejado de representar.
En palabras de Sergio Pitol, “en este mundo de pirámides y volcanes, Rojo organiza un orden para más tarde abatirlo y levantarlo. [...] Propicia una fusión de fragmentos oníricos con retazos de eso que cada vez con mayores reticencias llamamos realidad [...]. Una manera no de evadir el mundo real, sino de abrazar todas sus posibilidades”.
Vicente Rojo legó esta colección escultórica a El Colegio Nacional para el estudio y goce artístico de las formas y texturas de esta serie.
Vicente Rojo
Escultor, diseñador gráfico y artista plástico. Nació en Barcelona, España, en 1932, donde realizó sus primeros estudios de escultura y cerámica. En 1949, exiliado de la Guerra Civil Española, llegó a México para reunirse con su padre. Aquí encontró la libertad y, en sus palabras, quedó “deslumbrado por la luz, una luz que no había vivido ni conocido hasta entonces”. Inició su formación cultural como un joven mexicano ávido de aprender, asombrado por la arquitectura, el arte prehispánico, la cultura mexicana y la obra de José Clemente Orozco, Diego Rivera, Rufino Tamayo y Carlos Chávez.
Se consolidó como pionero del diseño gráfico. Su labor en la industria editorial y en la difusión cultural fue ponderada por Carlos Monsiváis en los siguientes términos: “es el precursor, y el continuador, y el renovador”. Se le consideró, también, uno de los artistas más importantes del abstraccionismo en México y formó parte de la llamada generación de la ruptura (término que le parecía desafortunado, por lo que prefería hablar de una “apertura”, de una búsqueda de nuevos cauces expresivos).
Gran parte de su obra pictórica se agrupa en las series Señales, Negaciones, Recuerdos, México bajo la lluvia, Escenarios y Escrituras. A partir de 1980 comenzó a alternar la pintura con la escultura a fin de enriquecer su trabajo, en cuyo centro buscó reflejar “como en un juego de espejos, dos soledades, la del creador y la del posible espectador”. Gracias a su afán renovador fue reconocido en 1993 como creador emérito del Sistema Nacional de Creadores y en 1994 ingresó a El Colegio Nacional.
Su obra ha sido exhibida en cientos de exposiciones individuales y colectivas en recintos como el Museo de Arte Moderno, el Palacio de Bellas Artes y el Museo Nacional, en México, y el Centro de Arte Reina Sofía, España. En 2015, el Museo Universitario Arte Contemporáneo de la UNAM exhibió la retrospectiva Escrito / Pintado. De sus obras más recientes, destacan Versión celeste (2019), un vitral en el patio central del Monte de Piedad, y Jardín urbano (2020), un mural en la fachada del Museo Kaluz.
Vicente Rojo falleció el 17 de marzo de 2021 en la Ciudad de México. Su legado inconfundible en las artes plásticas de nuestro país lo hace un artista imprescindible para la posteridad.
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