Cultura

Matos Moctezuma: “El Princesa de Asturias es también para mis maestros e instituciones que me formaron”

La ciencia y la cultura son dos factores fundamentales que realmente hacen grande a un país, añade el también Premio Crónica · El 28 de octubre recibirá el galardón en la ceremonia que se realiza en el Teatro Campoamor de Oviedo

entrevista

En 2017, el arqueólogo Eduardo Matos Moctezuma inauguró la cátedra binacional que lleva su nombre en el Auditorio Jaime Torres Bodet del Museo Nacional de Antropología e Historia.

Estos premios estimulan y son un compromiso para uno mismo, porque te invitan a seguir adelante y a ser mejor, dice Eduardo Matos Moctezuma.

Cuartoscuro/Archivo

Eduardo Matos Moctezuma señala que el Premio Princesa de Asturias, que recibirá el 28 de octubre en el Teatro Campoamor de Oviedo, “no es solo para la persona que lo recibe, sino también para los maestros y las instituciones donde uno se forma y desarrolla su labor profesional”.

Son las palabras del arqueólogo a unos días de viajar a España y recibir el premio. La plática se da el viernes 21 al mediodía por teléfono y Matos Moctezuma cuenta que es un galardón importante que han recibido otros mexicanos destacados como Silvio Zavala, Pablo Rudomin, Bolívar Zapata e instituciones como la UNAM y El Colegio de México, por tanto “es muy honroso que el jurado se haya fijado en mí para otorgarme el premio”.

Pero también, dice, “es un reconocimiento a nivel internacional muy importante y en la ceremonia que se va a realizar, de los ocho galardones que se van a entregar, la Fundación escogió a cuatro para que ofrezcan algunas palabras sobre el premio que van a recibir, no para hablar en nombre de todos los laureados, y entre ellos soy uno de los elegidos”.

Cuenta que ya trabaja en lo que va a ser su discurso y adelanta algunas de las ideas que va a contener: “Se trata sobre todo de agradecimiento, porque desde el 18 de mayo, día en que me hablaron para avisarme que había sido elegido para recibir el premio en la categoría de Ciencias Sociales, comenté que estos reconocimientos no sólo son para la persona que lo recibe, sino también para los maestros que lo formaron a uno, para las instituciones donde uno estudia, en mi caso la Escuela Nacional de Antropología e Historia, y también para las instituciones en las que uno pudo desarrollar su labor como investigador, en mi caso es el Instituto Nacional de Antropología e Historia, al cual pertenezco desde hace más de 6 décadas”.

Esas son algunas de las cosas que va a mencionar Eduardo Matos, Premio Crónica en Cultura, pero también cuenta que va a mencionar la admiración que ha tenido por sus maestros e inclusive recordará a otros, que no fueron sus maestros en las aulas, pero a los cuales admira como a Manuel Gamio y su concepto integral de la antropología; a Gordon Childe, el arqueólogo australiano, por su concepto dialéctico, y a dos historiadores mexicanos, que fueron sus amigos, como son Miguel León-Portilla y Alfredo López Austin.

–¿El premio es ver el valor de las ciencias y la cultura?

La ciencia y la cultura son dos factores fundamentales dentro de cualquier país, que deben estimularse y apoyarse y no restringirles medios ni fondos para que se puedan formar nuevos cuadros de investigadores, para realizar nuevos estudios, porque esto es lo que realmente hace grande a un país.

Se han restringido apoyos a la cultura y la ciencia y creo que premios como el Princesa de Asturias enaltecen y distinguen, precisamente, esos aspectos culturales y científicos. Y en este caso se reconoce a una persona, en mi caso, pero también a la antropología, a la búsqueda del pasado, a la búsqueda de la historia y esto es muy relevante.

–¿Y cómo se siente Eduardo Matos con este sabor asturiano?

Estos premios estimulan y son un compromiso para uno mismo, porque te invitan a seguir adelante y a ser mejor.

La inteligencia científica de Eduardo Matos

La Fundación Princesa de Asturias publicó en su página web del 18 de mayo la entrega del premio a Eduardo Matos con estas palabras: “Con este fallo, el jurado quiere reconocer el extraordinario rigor intelectual del premiado para reconstruir las civilizaciones de México y Mesoamérica, y para hacer que dicha herencia se incorpore con objetividad y libre de cualquier mito. Sus trabajos en Tula, Teotihuacan y, muy especialmente, en el Templo Mayor de Tenochtitlan constituyen, por la intensidad y la continuidad de la investigación de campo, páginas ejemplares del desarrollo científico de la arqueología y del diálogo fecundo con el pasado, entre culturas distintas y entre las ciencias sociales y humanas. Por su inteligencia científica, por su capacidad de divulgación y por su compromiso social, Eduardo Matos Moctezuma y su obra sirven de inspiración para las próximas generaciones de científicos sociales y de ciudadanos”.