Búsqueda
El turismo ha generado una intensa urbanización en la Península de Yucatán y eso implica despojo de tierras, razón por la que el geógrafo Renaud Lariagon realizó “Mayapolis”, documental que reúne 12 voces de académicos que han estudiado la región caribeña y como un territorio indígena está proceso de metropolización y como un espacio temático maya producido por y para la economía turística.
Este documental se presentará el sábado 11 de marzo a las 10:00 horas en el Centro de Convenciones y Exposiciones Yucatán Siglo XXI como parte de las actividades de la Feria Internacional de la Lectura de Yucatán (FILEY) que se celebrará del 11 al 19 de marzo.
El mismo sábado, pero a las 16:15 horas, el investigador de la Facultad de Ciencias Antropológicas de la Universidad Autónoma de Yucatán, Samuel Jouault, presentará “Ecoturismo comunitario en el sureste de México”, libro que reúne 40 proyectos de turismo hecho por comunidades, entre éstas 19 mayas y que el gobierno y que ha ignorado durante la construcción del Tren Maya a pesar de existir un convenio firmado.
EXPANSIÓN URBANA
“Mayapolis” es un documental que muestra, a través de testimonios de 12 especialistas, cómo el turismo es el nuevo eje de acumulación de capital en la Península de Yucatán y cómo lo será aún más con el actual proyecto del Tren Maya.
“Demuestra problemáticas que existen en la costa, en la ciudad y en espacios rurales, y evidencia cómo el turismo va penetrando en esas grietas”, expresa en entrevista Samuel Jouault, una de las voces participantes en el documental.
Los testimonios que reúne el audiovisual son investigadores de instituciones como la UNAM, UAM, IPN, Ciesas y la Universite d’Angers, y todos coinciden en señalar que, desde la creación de Cancún, la Península de Yucatán se convirtió en un lugar incontrolable en términos de turismo.
¿La tenencia de la tierra es uno de los principales problemas?
El 50 por ciento de la tierra está bajo un régimen de propiedad social y definitivamente hay toda la ola de expresión capitalista que se traduce con agronegocios, granjas porcícolas, granjas avícolas, proyectos de capitalismo verde como parques fotovoltaicos, así como el desarrollo inmobiliario alrededor de regiones que pueden ser costeras y ahora en este momento aparecen alrededor de las estaciones del Tren Maya donde vemos florecer manifestaciones de impacto ambiental.
Por ejemplo, en Sisal (Yucatán) hay 90 manifestaciones de impacto ambiental y es bastante preocupante porque es una comunidad de 2 mil o 3 mil habitantes, pero en 10 o 15 años puede convertirse en una localidad de 50 mil personas, en una ciudad donde no hay condiciones geográficas para seguir viviendo en armonía con la naturaleza.
¿Por qué?
Sisal está ubicado en la península donde entra una laguna sobre una duna costera que está frente al mar, ¿qué sucederá con todos los temas de gestión de aguas negras, los desechos sólidos, el abastecimiento de agua potable que ya es problemático?
Las otras voces que aparecen en el documental son: Marco Almeida Poot, Matilde Córdoba Azcárate, Claudia Davila Valdés, Yannick Deniau, Maxime Kieffer, Manuel Francisco Lemas Valencia, Álvaro López López, Clément Marie dit Chirot, Eliana del Pilar González, Luis Alberto Salinas, Ana García Fuentes, Gabriela Torres-Mazuera y Manuel Xool Koh.
Jouault también reconoce que el turismo es una esperanza para muchas personas, “para aquellos que no deciden migrar y desarrollan una actividad turística en su localidad, pero sin duda es una actividad que gana más espacios en las sociedades donde vivimos”.
ECOTURISMO IGNORADO POR FONATUR
Otro trabajo de investigación a presentarse en la FILEY es el libro “Ecoturismo comunitario en el sureste de México” que en palabras de Samuel Jouault es una guía que promueve e inventaría 40 iniciativas de ecoturismo comunitario en tres grandes regiones de México: Península de Yucatán; Oaxaca, Chiapas y Tabasco; y Puebla y Veracruz.
“Sabemos que una de las problemáticas de este tipo de iniciativas colectivas es la promoción y la comercialización de sus servicios, es decir, cómo llegar al turista indicado”, indica el investigador de la Facultad de Ciencias Antropológicas de la Universidad Autónoma de Yucatán.
En los años 70, cuando se pensaba el turismo, el gobierno pensaba en captar divisas extranjeras, pero lo que los autores Jouault y Maxime Kieffer plantean es la necesidad de que el ecoturismo comunitario sea conocido por los mexicanos tomando en cuenta una estadística del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH): que el 80 por ciento de los visitantes a zonas arqueológicas y museos del país son mexicanos.
“Queremos regresar la necesidad de recordarnos que el turismo en México es primero el turismo de los mexicanos y aunque vemos muchos proyectos florecer éstos no son pensados para los que vivimos en este país”, afirma.
Las iniciativas que aparecen en el libro coeditado por la UNAM, ENES Morelia y CEMCA se caracterizan por estar en manos de los locales organizados a veces en familia, ejidos, bienes comunales o en cooperativas.
“Por ende estas personas tienen el control de la tierra y de la actividad turística, son dueños de las infraestructuras y equipamientos, toman decisiones colectivas y reparten de manera equitativa, entonces yo como externo no voy a interferir en la toma de decisiones de ese colectivo”, detalla Jouault.
Los autores también incluyeron proyectos que fueran una empresa social ubicada en una comunidad rural y donde hubiera una forma de trabajo colectivo, que la empresa opere bajo una forma jurídica colectiva y que tenga un vínculo con un Área Natural Protegida que puede ser Ek Balam, donde los habitantes decidieron implementar una reserva ejidal.
En el caso de la Península de Yucatán aparecen 19 iniciativas, entre éstas: Kíichpam K’áax, Serpientes colgantes de Kantemó, Punta Laguna Najil Tucha, Cenote ecoturístico X Canché, U Najil Ek Balam, Yaax Tekit, Raíz del Futuro la Mancolona, Campamento Yaax’Che e Isla Pájaros.
¿Hubo un acercamiento con este tipo de proyectos durante la construcción del Tren Maya?
Hubo un acercamiento, hubo un convenio que fue firmado entre el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) con la Alianza Peninsular para el Turismo Comunitario que agrupa a 24 comunidades, pero desde el cambio de administración en Fonatur-Tren Maya se silenció.
Desde mi punto de vista las comunidades han hecho el esfuerzo de organizarse para dialogar con el Estado pero el Estado está mudo y sigue construyendo; temo que cuando se acerque el tiempo de la inauguración del tren se quiera subir a las comunidades pero será demasiado tarde porque existe una competencia desigual entre el capital privado y el capital social.
El 11 de enero de 2022, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció cambios en su gabinete, entre éstos, que Javier May Rodríguez dejaría la Secretaría de Bienestar para asumir la dirección de Fonatur.
Copyright © 2023 La Crónica de Hoy .