Cultura

Paul Kawczak: La colonización del Congo fue violar a esa nueva “Eva negra” sin tregua

El escritor francés habla de su novela “Tiniebla”, donde relata la mutilación física y cultural contra esa nación

ENTREVISTA

El escritor Paul Kawczak.

El escritor Paul Kawczak.

La mutilación física no fue el único método empleado en la conquista de territorios africanos, existieron otras amputaciones aparentemente no agresivas como la traza de los nuevos territorios y ese oficio, el de topógrafo, es el que desempeña Pierre Claes, protagonista de “Tiniebla”, novela escrita por Paul Kawczak (Francia/Canadá, 1986).

La obra editada por Destino y promovida en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL Guadalajara) por la Delegación General de Quebec en México, relata la colonización hecha por los belgas en Congo, en esa nueva “Eva negra” que se viola sin tregua en la “noche blanca”. En novela aparecen diversos personajes, desde el fiel tatuador y verdugo chino Xi Xiano hasta un Baudelaire con sífilis y un chimpancé nombrado Leonardo.

“Surgió la idea de escribir sobre El Congo y situarme en la segunda parte del siglo XIX porque el capitalismo y la colonización iban de la mano, de hecho pude haber tomado cualquier territorio en cualquier parte del mundo que estuviera colonizado porque al final sucedió casi lo mismo”, expresa en entrevista el Prix Littéraire des Collégiens 2021.

Situar la novela en ese país también le dio la posibilidad a Kawczak de hablar sobre el dominio que ejerció una sola persona: Leopoldo II, quien además de ser un rey belga, fue empresario y accionista. En la historia es quien manda a Claes de expedición para crear el mapa de las nuevas tierras conquistadas.

“Otro tema que me pareció interesante es que la colonización del Congo fue posible gracias a la invención del barco de vapor porque no había manera de ir hasta ese territorio sin dicha tecnología. Entonces intenté ligar cómo la tecnología -que permitió la industrialización- estuvo ligada con la posibilidad de colonizar nuevas tierras”, señala.

Kawczak indica que los colonizadores se hicieron extremadamente ricos por la producción del caucho en Congo, ahí extrajeron esta materia prima para hacer llantas de coches.

“Eso está ligado al capitalismo porque la necesidad de tener este material para producir más autos hizo que los colonizadores explotaran los recursos naturales”, señala.

¿Por qué mostrar otras herramientas de colonización como el trazo de mapas?

Pongo en un mismo plano la mutilación y el dibujar los mapas. Hablo de la mutilación física en donde sin respeto alguno se les cortaban las manos (a los congoleses) y otras partes de su cuerpo, pero esto exactamente es lo mismo que pasó con el territorio: trazar los mapas fue mutilar el territorio africano.

Tal y como se hizo en 1885 con la Conferencia de Berlín donde sin preguntarle a nadie se tomó la decisión re trazar el mapa y dividir el territorio entre varias naciones (Inglaterra, Francia, Bélgica, Italia, Portugal, España y Alemania).

“Otra forma de mutilación fue la cultural. En Congo, lo que decidieron hacer fue separar a la gente, ponerlas en diferentes partes del territorio a trabajar para que no hubiera manera de que se reunirán, juntaron a personas que no hablaban el mismo idioma para aniquilar la posibilidad de rebelión”, expresa.

En la novela, el protagonista Pierre Claes confiesa que su odio no es hacia los africanos sino hacia su interior y a las figuras de autoridad porque de niño su padre estuvo ausente.

“El patriarcado hace a las personas tristes, hace que las mujeres tengan la parte más difícil, pero también la hay para los hombres, ellos dominan pero están tristes”, afirma.

En palabras de Kawczak, un hombre será violento si le reprimen sus emociones. “Algo básico es que si desde niños les enseñas a reprimir todas sus emociones, eso será la semilla que generará hombres violentos. Si Pierre Claes de niño hubiera podido decir: estoy triste, tengo miedo, extraño a mi papá y si alguien lo hubiera escuchado seguramente no hubiera ido al Congo”.

El autor menciona reiteradamente que sus personajes son racistas como todo colono de la generación del siglo XIX, lo cual hoy no ha cambiado del todo.

“En mi percepción, si uno vive en un sistema capitalista y colonialista tendremos una mirada racista. Por ejemplo, para que puedan producir nuestros celulares tienen que obtener minerales de la parte del este del Congo y esos minerales son niños quienes los sacan, son ellos los que mueren cuando hay deslaves en las minas”, comenta.

Inconscientemente al formar parte de dicho sistema, Kawczak acepta que la vida de un niño negro vale menos que la vida de un niño blanco, “esa es la realidad porque los niños blancos tienen prohibido trabajar y ser explotados”.

El libro.

El libro.

¿El amor es la esperanza?

En la novela está el amor del doctor Vanderdope que es un amor romántico excesivo, está más enamorado del amor que de Manon Blanche, amiga de Baudelaire.

También hay otro amor que es el de padre e hijo, otro más discreto es el amor al prójimo que se expresa en el hecho de que los congoleses deciden salvar a Pierre, es el amor por el otro, por los seres cercanos a ti y ese es el amor que da más esperanza.