Cultura

Ramón Vargas: La ópera nunca pasa de moda porque es el espejo de las imperfecciones humanas

El tenor ofrecerá conciertos en el Pabellón Escénico de Chapultepec y una gala en el Palacio de Bellas Artes

recitales

María Katzarava y Ramón Vargas, a la derecha, tras el anuncio de los recitales.

María Katzarava y Ramón Vargas, a la derecha, tras el anuncio de los recitales.

Reyna Paz Avendaño

El tenor mexicano Ramón Vargas (Ciudad de México, 1960) ama su profesión, admite su vocación de maestro y explica que la ópera nunca pasa de moda porque es el espejo de las imperfecciones humanas. Así lo indicó con motivo de la gala que ofrecerá el 4 de julio en el Palacio de Bellas Artes y de dos conciertos con música de Rossini que interpretará en el Pabellón Escénico de Chapultepec.

“Soy una persona que ama lo que hace y eso abre las puertas para todo, en el sentido de que si amas lo que haces, harás lo más que se pueda para que desarrolles esa pasión”, señaló.

En palabras del artista que debutó internacionalmente en 1992 como Edgardo en Lucia di Lammermoor en el Metropolitan Opera House de Nueva York, en sustitución de Luciano Pavarotti, afirmó que la ópera es una escuela de vida.

“A veces la gente cree que son historias antiguas o cuentos, pero casi todas las óperas están inspiradas por compositores que son grandes escritores y lo que está haciendo el teatro en el mundo es mantener el recuento de lo que somos los seres humanos con nuestras virtudes y pecados, con nuestra parte más buena y más mala”, señaló Vargas.

El tenor que presentará su gala acompañado del pianista Ángel Rodríguez y del Corto del Teatro de Bellas Artes comentó que las óperas muestran que los seres humanos somos imperfectos.

“Esa es la finalidad de la ópera y además lo hace de una manera única, a través de la música, del canto y de una historia importante. Y es ahí donde tenemos que trabajar para que las emociones que damos al público sigan siendo auténticas y actuales. Lo que aprendemos de la ópera sigue siendo moderno porque los seres humanos nos equivocamos en las mismas cosas y tenemos las mismas virtudes”, expresó.

A la pregunta de cómo era el Ramón Vargas de hace 40 años, el cantante compartió que tenía muchas esperanzas, mucho vigor y ganas de aprender.

“Sigo siendo el mismo, pero ahora en una posición de mayor tranquilidad, de mayor agradecimiento que de búsqueda. Esa es la diferencia de lo que fui y de lo que soy, es una posición mental en la cual me siento más que agradecido con la vida, con la música y con este teatro de Bellas Artes que me vio nacer”, señaló.

Sobre el repertorio que interpretará, adelantó que iniciará con temas de Donizetti, Rossini y Verdi, después será pura música de Italia y finalizará con temas de México, desde Manuel M. Ponce hasta Armando Manzanero.

VOCACIÓN DE MAESTRO

Además de la gala en Bellas Artes, el tenor mexicano celebrará los 10 años de creación del Estadio de Ópera de Bellas Artes con un evento especial: dos conciertos con temas de Rossini el 28 y 29 de junio en el Pabellón Escénico (entrada gratuita).

“Con el Estudio de Ópera, que tuve el privilegio de fundarlo hace 10 años, haremos una gala de Rossini porque considero que es un compositor fundamental para el desarrollo de las voces”, dijo.

Vargas narró que cuando llegó a Europa, la primera vez que probó suerte en 1986, hubo cosas aprendí por sí mismo.

“Aprendí de manera brutal, por ejemplo, abusos de agentes que me hacían cantar en fiestas porque según obtendría algún beneficio o promesas de gente que decía que me harían debutar. Me di cuenta que hay algunas cosas que aprendes con mucho tiempo y que si alguien te lo pudiese decir antes, te ahorrarías meses e incluso años”, compartió.

Esos detalles son los que le gusta transmitir a las nuevas generaciones, agregó.

“En México estamos retrasados alrededor de tres o cuatro años en relación a los jóvenes de otros países, lo que un muchacho de 24 años o una chica de 24 años está haciendo en Europa o en Estados Unidos, nosotros lo estamos haciendo los 27 años porque no tenemos la infraestructura, pero cada vez se está cortando esa distancia porque tenemos posibilidad de escuchar más y de viajar más”, dijo.

¿El músico mexicano está preparado para la competitividad?

Hay que tener cuidado porque México produce muchas voces, pero tener buena voz no significa que eres buen cantante. México produce muchas voces, pero produce menos cantantes y nuestra tarea es producir cantantes, gente que tenga técnica y capacidad de interpretar para dar emociones de la manera justa, no nada más a grito pelón.

El mundo laboral internacional no es fácil, es muy competitivo, pero siempre confío en las voces de México porque son las más emocionantes que hay. Nosotros tenemos una capacidad interpretativa que no tienen otros países y eso lo puedo decir sin ninguna duda.

Vargas indicó que ese tono se debe, quizá, a que somos una cultura del esfuerzo y porque nuestra música nos enseña los dolores.

“Nuestra música siempre canta la tristeza y será por eso que tenemos este modo de interpretar. Los mexicanos tenemos un alma dramática dentro y cuando lo interpretamos a través de la voz y de los instrumentistas se vuelve algo muy especial”, expresó.

¿DÓNDE?

Los conciertos de Ramón Vargas en el Pabellón Escénico de Chapultepec serán el viernes 28 de junio a las 18:00 y el sábado 29 de junio a las 19:00 (a un costado del metro Auditorio)

La gala de Ramón Vargas será el jueves 4 de julio a las 20 horas en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes.