Cultura

La Semarnat autorizó un alojamiento provisional en Calakmul, no un hotel

La Sedena solicitó autorización provisional  para construir un alojamiento al personal que da tareas de logística y mantenimiento a la Reserva de la Biósfera de Calakmul

Una vista de Calakmul.

Una vista de Calakmul.

La Secretaría de Defensa Nacional (Sedena) solicitó autorización provisional a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para construir en Calakmul un alojamiento al personal que da tareas de logística y mantenimiento a la Reserva de la Biósfera de Calakmul y ése fue el proyecto que la Semarnat autorizó, sin embargo, se construye un hotel y posiblemente una base militar. Así lo comentó la antropóloga Giovanna Gasparello.

Durante la mesa “Tren Maya: el impacto sociocultural”, organizada por la Dirección de Estudios Históricos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), la investigadora de dicha institución afirmó tener los planos de ese pequeño alojamiento.

“La Semarnat autorizó una obra, pero en realidad se está construyendo otra cosa con un impacto ambiental distinto. Las solicitudes de expropiación del terreno al ejido Plan de San Luis otorga más de 5 mil hectáreas para darlas en gestión a la Sedena, ahí no se habla ni del alojamiento para el personal logístico ni del hotel, se habla de una construcción de una base de operaciones mixtas para la Sedena y Guardia Nacional, para tareas de seguridad en esta zona estratégica”, expuso.

Esto es todavía más grave, añadió Gasparello. “Según la ‘Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas’ todo tipo de infraestructura militar que se construye en territorio indígena debe estar sometido a un proceso específico de consulta, pero a la población que vive en la región no le fue consultado ni la construcción de un mega hotel ni menos la construcción de infraestructura castrense”.

Ese hotel en la Reserva de la Biósfera de Calakmul es un ejemplo de que el Tren Maya alberga proyectos sin licencia ambiental, social ni indígena, argumentó la antropóloga.

“Toda esta opacidad y confusión que hemos señalado redunda en una sustancial falta de acceso de información sobre las obras que se están desarrollando en el corazón de la selva maya, la opinión pública en ningún momento ha sido informada sobre la construcción de nuevas bases militares y de operaciones mixtas en la región, es un dato sensible puesto que el establecimiento y la estancia permanente de personal militar altera la dinámica social y el tejido organizativo en la región”, aseveró.