En los últimos años la afición (o seguidores) al automovilismo en México ha crecido hasta ser una de las más numerosas del continente. Eso se puede ver con los más de 300 mil asistentes al Gran Premio de la Ciudad de México de Fórmula 1. Más allá de analizar su verdadero nivel de conocimiento o si sólo se trata de salir de la foto, son personas a las que les gusta ir al autódromo, consumir y disfrutar de los autos en pista.
El contar con Sergio Pérez en Fórmula 1 por más de 10 años hizo que se formara una base de miles de personas que hablan de la categoría. Las redes sociales así lo comprueban. A ‘Checo’ se le suman, en las carreras estadounidenses, Daniel Suárez en NASCAR y Patricio O’Ward en IndyCar.
Tenemos representantes en la Fórmula 2, la Fórmula 3, la Fórmula Regional y casi cada una de las series mayores en el mundo.
Entonces, la lógica indicaría que el automovilismo local es sólido, bien cimentado, y que hablamos de un auténtico semillero de pilotos, pero...
Bandera verde… Es triste ver la realidad: No es así. Los pilotos que llegan a categorías internacionales lo hacen debido a su enorme talento y al apoyo de sus familiares y contadas empresas. Para decirlo claramente: no hay un automovilismo mexicano de alta competencia.
Existen sí, series regionales y competencias locales. Y no es que eso esté mal, para nada. Cada promotor cumple una función y es bueno que existan, pues mantienen a los pilotos amateurs y semiprofesionales, ocupados.
Al momento, podemos hablar de dos series profesionales a nivel nacional: NASCAR México y Super Copa. Ambas con autos V8 como estelares (stocks). Pero, los autos fórmula simplemente han quedado en el olvido, a pesar de la gran tradición con la cual contamos.
Hay quienes se levantarán velozmente para decir “¡tenemos una Fórmula 4!”. Y sí, pero se trata del primer paso luego del kartismo, es decir, no se puede considerar a la par de una Fórmula 3 europea o incluso la Indy Nxt, la categoría soporte de IndyCar Series...
Entrada a pits… La realidad es que para hablar de una serie fórmula de prestigio, que de verdad sirva como semillero para pilotos mexicanos rumbo a categorías mayores, tenemos que irnos décadas atrás. Esos campeonatos de Fórmula K, Fórmula 2, Fórmula 3 o el Panam GP Series, han quedado sólo como un hermoso recuerdo.
Los promotores tenían en Sergio Pérez al gran pretexto para involucrar a las marcas en el automovilismo mexicano y no supieron cómo hacerlo. Ya sé, no es fácil, seguro que no, pero nada lo es.
Hoy, el automovilismo en México carece de una serie de autos fórmula que pueda presumir el ser lo suficiente para preparar talentos para alguna Fórmula 3 europea, o que pueda dar el salto a IndyCar, como antes sí ocurría...
Salida de pits… Y no, no exagero. Así fue como dieron el salto pilotos como Alfonso Toledano, Adrián Fernández, Carlos Guerrero o incluso Michel Jourdain. Hoy, para que tengamos otro Sergio Pérez, los volantes deben emigrar a Europa justo al salir de karts y son ellos quienes buscan camino, como lo han hecho Santiago Ramos, Noel León o Rafael Villagómez.
Cuando Checo llegó a la Fórmula 1 se dijo que México tendría que trabajar en una serie de autos fórmula que fuera un semillero y que nadie tuviera que volver a pasar el sinuoso camino que le tocó a ‘Checo’. Han pasado 14 años y ese campeonato no existe. Espero no ser ave de mal agüero, pero si no lo consiguieron con ‘Checo’ en la cima del deporte, no sé cómo lo hagan ahora...
Bandera a cuadros… México se ha consolidado como país sede de grandes campeonatos, como Fórmula 1, Fórmula E y próximamente NASCAR. Pero sería sano que los promotores dejarán de ser solamente “vendedores de boletos” y se convirtieran en verdaderos organizadores de campeonatos. Encontrar el chasis indicado que sirva como paso intermedio entre la Fórmula 4 y alguna categoría estelar en Europa o Estados Unidos y usarlo en un campeonato de fórmulas, que ya sabemos que gustan a la afición. Vaya, que las tribunas llenas en el Hermanos Rodríguez comprueban que el negocio ahí está. ¿Habrá quien levante la mano, o sólo los que la estiran para cobrar?
Así las cosas… sobre ruedas.