Fue una noche perfecta para Diablos Rojos Femenil en el Estadio Harp Helú. El encuentro parecía un guión cinematográfico y los bates de las locales fueron los grandes protagonistas del tercer y último juego de la Serie de la Reina, la gran final de la Liga Mexicana de Softbol (LMS).
Diablos Rojos, usando la tradicional franela escarlata, vencieron 5-0 a Sultanes de Monterrey y de esa manera se coronaron campeonas de la segunda temporada de la LMS, al conseguir tres victorias consecutivas.
Con este triunfo la organización roja consigue su tercer título nacional vigente, pues son los monarcas de la Liga Mexicana de Beisbol y de la Liga Nacional de Basquetbol Profesional.
A MARCAR PRIMERO
Desde el primer inning atacaron las Diablos R-ojos. Steffy Aradillas se embasó con hit al izquierdo, y la poderosa Mia Davidson conectó un cuadrangular de 240 pies, por encima de la barda del jardín central, para empujar a la de la quiniela y colocar la pizzara 2-0.
En la tercera entrada continuó el ataque de las locales, con jonrones espalda con espalda de Steffy Aradillas y la campeona de bateo Jazmyn Jackson, para aumentar la ventaja a 4-0.
La quinta carrera de Diablos Rojos vino un inning después, en los spikes de Rosi del Castillo, quien se embasó con batazo al central, avanzó a segunda por toque de sacrificio de Yamilet Sandoval, llegó a tercera por ‘wild pitch’ y anotó gracias a un hit de Jackson.
CIERRA LABOR
Para cerrar el encuentro, Denisse Fuenmayor sólo permitió que Yilian Torres lanzara los primeros cinco innings, y los dos finales colocó en el centro del diamante a su estrella Megan Faraimo, quien cerró la labor y dejó a las visitantes en cero.
Fue un triunfo que resumió la temporada de las Diablos, con una contundencia clara y un dominio que hoy, las convierte en campeonas.