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El Gobierno francés teme que las tormentas nocturnas afecten las pruebas en el Sena

El caudal del río es relativamente alto a causa de las lluvias pasadas, lo que provoca que el agua de las cloacas se desborde y termine vertiéndose al río sin pasar por las depuradoras

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Río Sena / X

Río Sena / X

El Gobierno francés teme que las tormentas que están previstas en la región de París desde esta tarde y por la noche echen al traste la posibilidad de celebrar las pruebas de triatlón que deben celebrarse este miércoles en el Sena, después de la anulación esta mañana por mala calidad del agua.

El primer ministro francés, Gabriel Attal, en una comparecencia ante la prensa para lanzar una serie de mensajes sobre la ola de calor que afecta a buena parte del sur y del centro del país, señaló que serán los organizadores de los Juegos Olímpicos de París los que tomarán la decisión sobre los análisis que se harán esta noche.

Attal precisó que la jornada de hoy está siendo seca y calurosa, lo que "tiende a contribuir" a que mejore la calidad del agua del río.

Sin embargo, "se esperan tormentas y lluvia importante al final del día, que podría también tener un impacto", puntualizó.

Al final -concluyó- la decisión la tomarán el Comité de Organización de los Juegos Olímpicos de París (Cojop) y la Federación Internacional de Triatlón a partir de las muestras del agua que se tomarán esta noche.

La temperatura en París ha superado a media tarde los 36 grados, pero el servicio meteorológico francés anticipa para las próximas horas fenómenos tormentosos con lluvia y aparato eléctrico hasta la madrugada.

Esta pasada madrugada se ha aplazado -inicialmente hasta el miércoles por la mañana, cuando también está programada la femenina- la prueba del triatlón masculino porque el agua del Sena no era todavía apta para el baño.

La razón es que el caudal del río es relativamente alto a causa de las lluvias del viernes y el sábado pasado, y cuando eso ocurre el agua de las precipitaciones hace que las cloacas se desborden y se acaba vertiendo al río sin pasar por las depuradoras, con lo que este queda contaminado por las bacterias fecales.

Eso no lo han podido solucionar totalmente los 1.400 millones de euros que han invertido las administraciones francesas desde 2016 en un ambicioso plan para mejorar la calidad del agua y posibilitar a partir del verano de 2025 el baño en el tramo del río que atraviesa París, algo que no ha sido posible desde hace alrededor de un siglo.

Esas obras se han hecho para canalizar ciertos desagües que todavía se vertían directamente al Sena (muchos de los barcos, pero también viviendas, empresas y explotaciones aguas arriba de París), así como para crear depósitos de urgencia.

Pero si las lluvias son muy importantes, eso no es suficiente, que es lo que ha ocurrido después del final de la primavera, que ha sido bastante lluviosa en el norte de Francia.