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El Real Madrid avanzó semifinales de Champions League tras vencer en penales 4-3 al Manchester City. Tras un partido largo y dominado por el equipo local que terminó 1-1 en los 90 minutos y los tiempos extra, el conjunto español logró resistir, sobrevivir y triunfar. Jugará contra el Bayern Múnich en la próxima ronda el 7 de mayo.
Tras el excepcional partido en el Bernabéu que terminó con seis goles (3-3), definir la serie en el Etihad Stadium podría significar alguna ventaja para el Manchester City, pero favorito no hubo en esta llave.
El Real Madrid fue el primero en golpear al minuto 11. Jude Bellingham bajó el balón con maestría y se lo dio a Vinicius Junior, que envió el centro a Rodrygo y el atacante del Real Madrid le pegó como pudo, pero Ederson atajó casi a quemarropa y Rodrygo la envió al fondo de la red tras el rebote.
El Manchester City comenzó a presionar y buscó los espacios con Kevin De Bruyne y Bernardo Silva. El conjunto inglés estuvo cerca del empate con un cabezazo de Erling Haaland que dio en el palo al minuto 17.
Andriy Lunin, arquero del Real Madrid, empezó a robar protagonismo ante los embates del City. Cortó un centro rasero enviado por De Bruyne al minuto 26 y un remate de Jack Grealish fue rechazado poco después por Antonio Rüdiger.
El equipo de Pep Guardiola expresó dominio con la tenencia de pelota, pero sin opciones claras de gol. Al minuto 44 el arquero Lunin desvió un cobro de tiro de esquina y ahogó lo que podría ser un increíble gol olímpico de Kevin De Bruyne. Así terminó la primera parte.
El segundo tiempo comenzó igual: Manchester City acorralando al Real Madrid en su campo, insistiendo una y otra vez por los costados y buscando un rebote en el centro del área.
Nacho, capitán del conjunto español, despejó un balón muy cerca de la línea del gol en el minuto 51 ante la presión de Erling Haaland. El Madrid, por su parte, esperó tener un espacio para ejecutar un contragolpe, sin éxito.
El Madrid resistió e incluso intentó general peligro al minuto 70, pero Ederson evitó que el balón llegara a los pies de Vinicius.
Dos minutos después, Guardiola acudió al banco con un movimiento ofensivo: salió Jack Grealish y entró Jéremy Doku.
La euforia estalló en el Etihad al minuto 75, cuando un error defensivo de Antonio Rüdiger fue capitalizado por Kevin De Bruyne, que fusiló al arquero Lunin. Empató 1-1 el City, que fue muy superior en la segunda mitad.
Tras el gol, Ancelotti sacó a toni Kroos y metió a Luka Modric. La primera sustitución del conjunto madridista no logró aplacar el ímpetu del equipo de Pep, que mantuvo su asedio.
El empate continuó y el partido se fue al alargue. Guardiola sacó a Haaland y metió a Julián Álvarez.
Doku, más gambeteador, comenzó a encarar a la defensa blanca y el primer tiempo extra pintó el mismo lienzo: un Madrid contra las cuerdas, a la espera de propinar un knockout.
Vinicius fue sustituido por Lucas Vásquez y el Real Madrid tuvo una oportunidad para tomar ventaja en la última jugada del primer tiempo extra, pero Rüdiger no definió bien.
La intensidad del Manchester City sobre el área del Real Madrid bajó en el segundo tiempo extra. La vuelta de los cuartos de final de la Champions no tuvo el brillo del encuentro anterior.
El agotamiento físico del Madrid por un lado y la desesperación del City por el otro, fueron la constante esta parte del encuentro, que ya tenía en la cancha a Stones por Akanji, a Kovacic por De Bruyne en el conjunto de Guardiola, y a Militao por Carvajal en el rival.
El empate obligó a ir a los tiros desde el punto penal. Allí fallaron Bernardo Silva y Mateo Kovacic en el City, y Luka Modric en el Madrid. Los blancos vencieron 4-3.
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