La Ciudad de México se destaca por su vibrante escena gastronómica, donde la creatividad y la tradición se fusionan para ofrecer experiencias únicas a sus habitantes y visitantes. Entre tacos, antojitos y cocina de autor, las heladerías han logrado ocupar un lugar especial en el corazón (y en el paladar) de los capitalinos.
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Si bien existen innumerables opciones en la ciudad, algunas se han ganado una reputación inigualable por sus sabores únicos y su compromiso con la calidad. Hoy te presentamos seis de las mejores heladerías que no puedes dejar de visitar en la CDMX.
Nómada Heladería
Lo que comenzó como un food truck en las calles de la ciudad se ha transformado en un punto de referencia para los amantes del helado artesanal. Nómada Heladería, ahora establecido en un taller en la Avenida Ámsterdam, se caracteriza por su innovación en sabores y su dedicación a utilizar ingredientes frescos y de origen local.
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Uno de sus productos estrella es el helado de yogur con hierbabuena, servido con piña asada y un granizado de jengibre, que logra equilibrar el ácido del yogur, la frescura de la hierbabuena y el toque tropical de la piña. Esta propuesta no solo resalta la versatilidad de los ingredientes mexicanos, sino también la capacidad de la heladería para reinventar la experiencia tradicional del helado.
Helados Amorino
En el elegante entorno del Parque Lincoln de Polanco, Amorino ofrece una experiencia que va más allá del simple sabor. Reconocida por sus helados artesanales presentados en forma de rosa, Amorino crea verdaderas obras de arte en cada porción. Cada pétalo es moldeado meticulosamente, haciendo que cada helado sea no solo un deleite para el gusto, sino también para la vista.
La cuidadosa elaboración y la presentación impecable hacen de esta heladería un destino obligado para quienes buscan combinar estética y sabor en un solo bocado. La reputación de Amorino se ha consolidado gracias a la calidad de sus ingredientes, su técnica artesanal y su enfoque en elevar el helado a una experiencia sensorial completa.
Helados Cometa
Para quienes disfrutan de la innovación y están dispuestos a experimentar nuevos sabores, Helados Cometa es la opción perfecta. Esta heladería se destaca por su compromiso con ofrecer productos de alta calidad, presentando opciones que van desde los sabores clásicos hasta combinaciones arriesgadas que desafían lo convencional.
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La propuesta de Helados Cometa es ideal para aquellos que no temen probar nuevos ingredientes y texturas, lo que se traduce en una amplia variedad en su menú. La creatividad que respalda cada creación se complementa con un ambiente moderno y acogedor, haciendo de cada visita una aventura culinaria que despierta la curiosidad y el placer.
Joe Gelato
El verdadero arte del gelato italiano también encuentra espacio en la CDMX a través de Joe Gelato. Especializado en gelatos artesanales, este establecimiento fusiona técnicas tradicionales italianas con ingredientes locales y de temporada, lo que le permite ofrecer sabores que evolucionan constantemente.
La calidad de la elaboración se refleja en la suavidad del gelato, la intensidad de sus sabores y la frescura de cada preparación. La experiencia en Joe Gelato es única, ya que cada visita promete descubrir una nueva creación, fruto de la constante experimentación y la pasión por este producto tan apreciado. Es el destino perfecto para quienes buscan disfrutar de un helado auténtico con ese toque distintivo que solo la técnica italiana puede ofrecer.
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Heladería Escandón
Para los amantes de lo exótico y de propuestas inesperadas, Heladería Escandón es un verdadero tesoro. Esta heladería ha logrado captar la atención por sus sabores audaces y presentaciones creativas. En su menú se destacan opciones tan atrevidas como helados con infusión de alcohol, además de una variada oferta vegana que no sacrifica ni sabor ni textura.
La originalidad de sus combinaciones le ha permitido ganarse un lugar especial en la preferencia de los clientes, quienes valoran tanto su innovación como la calidad y frescura de sus ingredientes. En un ambiente que invita a la experimentación, Heladería Escandón es la prueba de que el helado puede ser una ventana a nuevas sensaciones y experiencias gustativas.
Nevería Roxy
Finalmente, la Nevería Roxy es un ícono tradicional de la Ciudad de México, con casi 80 años de historia en la elaboración de helados y nieves. Fundada en los años 40, esta nevería ha mantenido intactas sus recetas originales, convirtiéndose en un símbolo de nostalgia y autenticidad. Ubicada en una zona emblemática, Nevería Roxy es reconocida por su sabor inconfundible que evoca recuerdos de la infancia y momentos compartidos en familia.
Su propuesta es sencilla, pero poderosa: helados elaborados con técnicas tradicionales y una atención que ha trascendido generaciones. La inalterable calidad y el arraigo cultural hacen de Nevería Roxy una experiencia imprescindible para quienes desean saborear la historia y la tradición de la heladería en la Ciudad de México.
La Especial de París
La colonia San Rafael resguarda una joya que el tiempo no ha logrado derretir: La Especial de París. Fundada en 1921 por Domingo Lozada, la heladería comenzó su andadura recorriendo en el antes llamado “Distrito Federal” con un par de tinas de madera, ofreciendo sabores tan sencillos como el limón y la vainilla. En 1929, las cubetas se transformaron en un puesto de madera en la calle de París, lo que le dio el nombre a este negocio familiar. Con el tiempo, en 1942, el local se trasladó a una nueva ubicación debido a los cambios urbanos provocados por la construcción de la avenida Insurgentes.
A lo largo de las décadas, La Especial de París ha permanecido como una herencia familiar. Pese a los desafíos, incluida la pandemia que cobró la vida de algunos empleados queridos, la heladería ha mantenido la tradición intacta. La especialidad del lugar es su helado de vainilla, elaborado con vainilla natural, a diferencia de otros establecimientos que recurren a saborizantes artificiales. Además, La Especial ha diversificado su menú con sabores únicos como chocolate, almendras, té chai, ron, tabaco, palanqueta, mate, granada, zapote y maracuyá. Su legado fue incluso mencionado por el célebre cronista Salvador Novo en “Nueva grandeza mexicana” (1946), distinguiendo sus helados de la “lamentable mecanización” que azota a otros “ice creams” en el país.
Un mosaico de sabores y tradiciones
Cada una de estas heladerías aporta un matiz especial a la amplia oferta gastronómica de la CDMX. Mientras que Nómada Heladería destaca por su innovación y fusión de sabores locales, Amorino lleva la estética y la precisión artesanal a otro nivel, convirtiendo el helado en una obra de arte. Por su parte, Helados Cometa y Joe Gelato ofrecen propuestas que estimulan la experimentación y la reinvención constante, asegurando que cada visita sea única. Heladería Escandón, con sus sabores exóticos, reta a los comensales a romper con lo convencional, y Nevería Roxy se erige como un baluarte de la tradición, conservando los sabores que han marcado la identidad de generaciones.
En resumen, si eres un amante de la buena gastronomía y buscas una experiencia refrescante y llena de sabor, no puedes dejar pasar la oportunidad de visitar estas siete heladerías que se han ganado el reconocimiento y el cariño de los capitalinos. La próxima vez que pienses en disfrutar de un postre o simplemente en compartir un momento especial con amigos o familia, recuerda que en la Ciudad de México encontrarás opciones que te harán vivir una experiencia culinaria inolvidable. ¡Atrévete a probarlas y déjate sorprender por cada cucharada!
