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Un hermoso edificio diseñado hace 95 años por el arquitecto catalán Antonio Gaudí podría levantarse en el sitio del destruido World Trade Center, si se realiza el sueño de un grupo de artistas y arquitectos que promueven en Nueva York este ambicioso proyecto.
El diseño -que aún ahora, casi un siglo después de creado, es totalmente futurista- fue elaborado por Gaudí (1852-1926) para un hotel en Nueva York, el Hotel Attraction, que nunca fue construido, explicó a la AFP Marc Mascrot Boix, uno de los impulsores de este proyecto.
El proyecto arquitectónico consiste en varias torres de acero y concreto, con curvaturas y alturas diferentes, que se levantan alrededor de una torre central y que recuerdan una de las joyas gaudianas, el templo de la Sagrada Familia, en Barcelona.
Ahora, Mascrot, junto con un grupo de artistas y diseñadores catalanes, apoyados por la Generalitat de Cataluña y por un arquitecto estadounidense, Paul Laffoley, están luchando para que este proyecto se construya en el sitio donde se levantaban las torres gemelas. O si no, en otro lugar de Nueva York.
"Hemos reactualizado y llevado este proyecto a un nivel de concreción, y tenemos la firme intención de devolverlo a la ciudad para la que fue creado", afirmó Mascrot, al explicar su objetivo de que el diseño gaudiano sea tomado en cuenta entre los proyectos para la reconstrucción del World Trade Center.
Hasta el momento, siete proyectos han sido propuestos ante la Corporación para el Desarrollo del bajo de Manhattan (LMDC), pero ninguno de ellos ha provocado una respuesta entusiasta de los neoyorquinos, que les reprochan que no hacen justicia a la inmensidad de la tragedia.
Incluso uno de esos siete proyectos acaba de ser retirado de la competencia, anunció esta semana la presidencia del LMDC.
Según Mascrot, "ninguno de los arquitectos que han presentado proyectos para la reconstrucción del World Trade Center le puede hacer sombra a Antonio Gaudí, un genio de la arquitectura, un genio de todos los tiempos".
"Todos los proyectos presentados ofrecen el mismo concepto de edificio. La propuesta de Gaudí es totalmente distinta: propone un cambio real, que va con el nuevo milenio y con una nueva manera de ver la ciudad", estima Mascrot.
Explicó que el proyecto que Gaudí diseñó en 1908 es un edificio de 360 metros, con una cúpula de 120 metros que lo corona. Por debajo de la cúpula hay cinco grandes salones, cada uno de ellos dedicado a la cultura de un continente, y por debajo de esos salones un gran hall de entrada que podría reservarse a conmemorar las víctimas de los atentados.
El joven artista reconoció sin embargo la dificultad de presentar el proyecto en la competencia oficial. "Se necesitan recursos astronómicos", dice. "Pero Nueva York merece este sueño, que tiene ya 95 años esperando. Y un proyecto tan bonito no puede quedarse en el olvido", agregó Mascrot, que el jueves por la noche empezó a divulgar el proyecto ante los neoyorquinos, durante una presentación en un centro de altos estudios de la Universidad de la Ciudad de Nueva York.
"Cualquier edificio que se construya en el sitio de la tragedia tiene que tener un componente espiritual muy fuerte, y cualquier obra de Gaudí tiene ese componente", señaló.
"Además, es un edificio que les habla a los neoyorquinos, les habla de su multiculturalidad, porque esta es la ciudad más multicultural del mundo. Nueva York es una ciudad pacifista, que no quiere la guerra, y Gaudí está hablando de esto, de paz, de unión, de muchas cosas que hay que leer entre líneas".
"Por eso no hay competencia posible", dijo, tajante. "Y para hacerlo realidad, vamos a ser muy pesados. Hemos empezado presentándoselo a los neoyorquinos, y ahora queremos que se vuelva un proyecto de todos. Ya ni a Gaudí le pertenece, es de todo aquel que quiere sentirse atraído por él".
"El proyecto está hecho para Nueva York", insistió. "No se podría hacer en Las Vegas. Y si no es para el World Trade Center, lo haremos en otro lugar, en Queens, pero este proyecto es para esta ciudad", afirmó, agregando que la primera piedra del edificio tiene que ser puesta antes del 2008, cuando se cumpla el centenario del diseño de Gaudí.
Ahora, los artistas y diseñadores catalanes esperan que los neoyorquinos presionen en favor del diseño ante la comisión encargada de la reconstrucción del WTC, que ha indicado que prevé escoger el diseño el próximo 11 de septiembre, cuando se cumplan dos años de los ataques que dejaron unas 2.800 víctimas.
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