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El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) no solicitará al gobierno capitalino suspender las obras del distribuidor vial de San Antonio por el hallazgo de vestigios arqueológicos en la zona donde se edifica esta nueva vialidad.
Antier, se encontraron vasijas prehispánicas y restos humanos en el área de construcción, por lo que vecinos urgieron al organismo estudiar la zona y solicitar, en caso de que ésta sea de valor histórico, la suspensión de los trabajos.
No obstante, María Flores Hernández, arqueóloga del Instituto, indicó que la zona ha sido estudiada en reiteradas ocasiones y que los hallazgos no son motivo para que el INAH solicite al Gobierno del DF la cancelación de la obra.
Además, explicó que ese organismo dio el visto bueno al Gobierno del DF para la construcción del distribuidor vial de San Antonio, porque debajo del trazo quedan muy pocos espacios que no han sido modificados por las obras de dotación de servicios.
“El área ya está muy alterada por investigaciones de arqueología y por obras de dotación de servicios, desde los años 20, pasan una serie de drenajes por donde va el trazo del distribuidor… Antes de que iniciara la obra de construcción, nosotros ya teníamos muy investigada esta área”, agregó.
Antes de que el gobierno capitalino pidiera al Instituto de Antropología realizar un estudio para determinar si era factible o no construir el distribuidor vial, el Consejo de Arqueología aprobó un proyecto de investigación en San Antonio y San Pedro de los Pinos, para determinar desde cuándo ha sido ocupada el área y valorar el medio ambiente.
Flores Hernández, responsable del proyecto, indicó que el INAH decidió vigilar los procesos de excavación del gobierno ante un hallazgo inminente.
Así, durante el transcurso de las obras, el Instituto ha encontrado tres cadáveres: dos en Periférico y Murillo, del grupo Tepaneca, y el reciente en Ferrocarril a Cuernavaca casi esquina con Giraldón, donde además se hallaron vasijas prehispánicas.
Con el trabajo realizado, la investigadora dijo que se puede establecer, previamente, que la ocupación en la zona no comenzó en el período clásico, como lo suponía el INAH sino en el preclásico; Es decir, desde el año 850 antes de Cristo hasta el presente.
La investigadora comentó que el hallazgo del martes —restos humanos acompañados de vasijas—, no es inédito, porque se han encontrado varias sepulturas prehispánicas, período anterior a la conquista. Aunque “fue un encuentro afortunado, considerando que el suelo está sumamente alterado”.
Ayer, la arqueóloga retiró los restos que se encontraban en una de las excavaciones realizadas para colocar una de las columnas del distribuidor vial.
Los restos humanos, conformados por la columna vertebral, tibia, peroné, pelvis y extremidades inferiores, así como las vasijas prehispánicas, fueron trasladadas al INAH, donde serán analizadas. Posteriormente el organismo presentará un informe técnico, el cual podría estar listo en julio.
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