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Previo a la Gran Gala de Pedro Páramo, el Festival Internacional de Cine de Morelia realizó una conferencia de prensa con la presencia de Mateo Gil, guionista del filme, el elenco conformado por Roberto Sosa, Giovanna Zacarias, Mayra Batalla, Ilse Salas, Dolores Heredia, Manuel García-Rulfo, el productor Stacy Perskie y el director Rodrigo Prieto que hablaron sobre este nuevo viaje a Comala y que marca la primer aventura como director del cinefotógrafo.
“Todo fue culpa de Stacy que me llamó un día y me dijo que habían comprado los derechos de Pedro Páramo y estaban buscando director y querían que fuera yo. Decidí entrarle a esta aventura, atreverme a avanzar y pues no puedo estar más agradecido por ese momento y todos los que se dieron después”, dijo el fotógrafo, ahora cineasta.
“Esto es un viaje de todos estos personajes, pero también es mío, personal, utilizándolos a ellos. Cada uno expresa su propia versión de ellos mismos, pero también van incluidas ahí mis emociones, mis traumas, mi sangre. Entonces, eso es Pedro Páramo”, explicó Prieto.
“Tuve la oportunidad de trabajar con Rodrigo dos películas al principio de mi carrera y desde entonces siempre lo admiré mucho como persona, me parecía muy talentoso y su aproximación como fotógrafo a la historia me encantaba”, recordó Perskie sobre la elección de Rodrigo para dirigir este ambicioso filme.
Mateo Gil, que hace años iba a dirigir su adaptación, habló de los retos para llevar el texto de Rulfo al cine. “Me dejé llevar un poco por el instinto y más allá de ello hay un sentimiento. Tuve mi proceso de duelo cuando no pude hacer esta cinta pero me puse otro chip cuando llegó Rodrigo y cuando la veo, lo hago desde otra perspectiva”, afirmó el español. “Aunque se habla muchísimo de la mexicanidad en la cinta, el acercamiento que tengo a la novela es totalmente personal”.
“Él ya tenía esa idea pero después me tocó poner mi sello en eso y encontrar qué fragmentos dejamos, cuáles quitamos. Además, no queríamos que fuera de tres horas, por lo que tuvimos que encontrar cómo resumir una obra que hasta pensamos que podría ser una miniserie. Tuvimos que seleccionar lo que buscamos contar dentro de esta obra, utilizando en los diálogos el texto de Rulfo, usando su sonido, lo cual fue un tanto complejo de mantener”, añadió Rodrigo.
Además, el primerizo director buscó darle una autenticidad de tiempos modernos. “Quisimos traer esta obra al día de hoy, siendo un cuento de época, pero traer eso que nos vibra actualmente a nuestra palabra. Junto a ello, manejamos muchas referencias, especialmente de fotógrafos mexicanos para crear Comala, incluyendo al mismo Juan Rulfo”, comentó.
“Con ello, la película tiene la ventaja que ves dónde estás, pero quise que la imagen no fuera tan claramente con algún truco fotográfico, que sintieras una ambigüedad en la época mientras esperamos que el espectador participe, así como el lector, en este rompecabezas”, siguió.
“De alguna forma, quise mantener visualmente ese mundo que se siente naturalista, pero al mismo tiempo, surreal. Buscamos contar una historia donde los personajes se sientan auténticos y reales, pero que pasan cosas muy extrañas”
— Rodrigo Prieto
“Si bien el lenguaje sigue siendo el mismo, es muy particular esta manera de narrar, de la poesía que hay hasta en los silencios que componen la narrativa de Rulfo”, complementó.
El cast también comentó sobre su cercanía a la obra de Juan Rulfo y cómo esto los impactó. “Es capaz de crear un universo fantástico para seguirnos contando a nosotros mismos, donde surge siempre, para mí las preguntas: ¿qué nos hace ser mexicanos? ¿En dónde está la mexicanidad? Siempre obtengo respuestas muy poéticas que me componen, me ayudan a seguir entendiéndome como mexicana”, dijo Dolores Heredia.
“Tristemente no tuve una infancia cerca de la obra de Rulfo, me habría encantado, pero sí es cierto que casi todos lo leímos de jóvenes. La mayoría lo leímos 20 años después y estábamos realmente impactados de cómo se dimensiona pues leerla ya en una edad adulta me hizo ver que no la había entendido”, manifestó a su vez Ilse Salas.
“Cuando estaba preparándome para conocer a Rodrigo, me aterroricé, me fasciné, me pasaron un montón de cosas que afortunadamente solo fueron creciendo”, continuó.
“Y es que Susana San Juan implicaba un reto porque hay muchas tesis alrededor de ese personaje que simboliza un montón de cosas para mucha gente. Es algo demasiado especial porque Páramo captó en un libro tan chiquito la sangre, el sudor, todos nuestros intestinos”, añadió la actriz.
“Lamento no haber tenido ni la experiencia de vida ni la madurez como lectora para entender la obra. Pero regresé a ella 20 años después y fue como el primer reto para acercarse a la obra. Vi de frente a la novela y conversé con ella”, señaló a su vez Mayra Batalla.
“No quiero decir que hay que faltarle el respeto, pero sí había que bajarla, porque la novela es muy poética, pero para mí es muy cotidiana, muy cercana al pueblo mexicano por la muerte y la relación que tenemos con ella, tan emblemática”, añadió.
Uno de los personajes clave es, sin duda, Dorotea, interpretada por Giovanna Zacarías, funcionando como puente entre dos mundos. “Me gusta mucho mi personaje, siento que es una persona que se encuentra una conexión entre los vivos y los muertos. Ella me parece alguien muy fuerte. Rodrigo me pidió que cambiara mi voz y transformara mi cuerpo. Fue un proceso muy amado donde uno sí que lucha bastante”, dijo.
El veterano Roberto Sosa, que da vida al Padre Rentería, habló del recelo hacia esta adaptación, tercera hecha en el cine mexicano. “Creo que una de las bellezas del arte, como el cine, es la cantidad de lecturas que podemos tener de una historia. Entonces los invito a que nos demos el regalo de ver esta nueva aproximación. Por supuesto, cada uno tenemos nuestro propio Pedro Páramo y Comala y es tan válido como cualquier otro”, aseveró.
El director multinominado al Oscar como cinematógrafo ahondó también en la creación de un universo muy especial para su Pedro Páramo. “Cuando entré al proyecto, Eugenio Caballero ya llevaba algo de tiempo en él y, desde tiempos pasados, había hecho algunos diseños, entonces él ya estaba muy sumergido en este mundo. Llegué y me fui metiendo, viendo lo que tenía pensado. Podemos ver el cambio de un pueblo fantasma hasta algo rebosante de vida”, explicó.
“Además, pudimos hacer cosas mucho más complicadas gracias a los efectos visuales con los que contamos donde pudimos mostrar una evolución entre el pueblo y los personajes, mostrando su juventud con tecnologías para hacerlos verse más jóvenes y después, con el maquillaje, más viejos. Creo que esta visión de Pedro Páramo es única en este momento”, añadió.
Salas, a su vez, enfatizó la complejidad y riqueza que tiene la historia de Rulfo y que busca acercarlo a una nueva generación. “Cuando quieres contarle a alguien que no ha leído esa novela, no puedes. Pienso que la hazaña simplemente de relatarlo de principio a fin, ya es un paso gigantesco dado en esta versión. Y eso es muy emocionante y siento que es un regalo para todos nosotros que nos volvimos a acercar a la obra porque seguimos hablando de eso”, comentó.
“Esperaría que eso se contagiara también para toda la gente, que esta cinta pueda hacernos entender la mexicanidad, la muerte, la violencia de género, el mestizaje de donde venimos, porque seguimos acatando las órdenes de caciques que no tienen ni idea de lo que están haciendo. Todo ese dolor y tristeza, pero también esperanza, es simplemente un reflejo de lo que estamos viviendo”, siguió.
“Hay varios tópicos dentro de la novela pero me enfoqué en el dolor y el enojo. El rencor es lo que destruye a Comala. La película es trágica pero es esos temas donde encontramos nuestros propios caminos no una solución sino una búsqueda al enfrentarnos a lo que nos duele”, meditó Prieto.
“Es tratar de entender un poco más del pasado y de porque no nos perdonamos a nosotros mismos y a quienes los lastimaron que es lo que creo le pasa a todos estos personajes”, complementó.
Con todos estos retos sorteados, quedaba el más grande para Rodrigo: el dirigir a este ensamble coral sin quitarle la magia al relato. “Era importante que todo se sintiera cotidiano. Sentía que los actores tenían que conocer el texto a fondo para después soltarlo y faltarle un poco al respeto al decir las líneas como les saliera. Rulfo construye todo de forma poética pero también bastante cotidiana”, dijo.
“A veces podría sonar shakesperiamo pero el trabajo con los actores fue que fluyera natural como si naciera de ellos y encontrar el acento característico de esa zona de Jalisco. Siempre buscaba que sonará auténtico”, puntualizó.
Finalmente, el cinefotógrafo ofreció un emotivo agradecimiento por formar parte de esta edición del certamen. “Estoy muy contento especialmente de compartir este momento con este increíble elenco. Es un equipo de gente hermosísima, no solo por su talento, sino por la calidad humana de cada uno de los que están aquí, realmente me emociona muchísimo, creo que no podría ser con un grupo de gente que me entusiasme más compartir este momento”, concluyó.