El Auditorio BlackBerry, minutos antes de las ocho de la noche, abrió sus puertas para dar la bienvenida a los fans de Mateo Sujatovich, músico argentino con su proyecto Conociendo Rusia, quién combina los géneros musicales del rock y pop. Fue recibido en el escenario entre ovaciones y aplausos de los asistentes el pasado 7 de noviembre.
Acompañaron a Mateo Sujatovich el músico Nicolás Btesch, sintetizador y coros; Guille Salort, baterista y Fran Azorai, tecladista. Su primer álbum vio la luz en 2018 y justamente lleva el nombre del proyecto Conociendo Rusia. Para 2019 lanzaron Cabildo y Juramento; en 2021 salió La dirección. Su más reciente material discográfico es Jet Love, el mismo nombre de su Tour.
Conociendo Rusia vivió varios momentos especiales en el recinto, interpretando los éxitos de sus álbumes en el que estuvo acompañado por su banda. Ya entrados en ambiente, los músicos abandonaron el escenario mientras Mateo cantó los temas “La Luna” y “Montaña”, mismos que fueron coreados y cantados al unísono por toda la fanaticada. Esta acción la agradeció diciendo que no hay público más entregado que el mexicano, afirmación constante por los artistas internacionales que visitan nuestro país.
Durante el concierto se podía ver a casi todos los asistentes, si no es que a todos grabando gran parte del concierto con sus dispositivos móviles, para poder capturar el momento exacto de su artista favorito y dejarlo para el recuerdo o simplemente compartirlo en redes sociales para que su asistencia al concierto no pasará desapercibida.
Cabe mencionar que uno de los momentos más nostálgicos se vivió cuando la banda interpretó “Adiós” de Gustavo Cerati y todos los asistentes corearon “No es soberbia, es amor. No es soberbia, es amor. Poder decir adiós es crecer, uh-uh-uh-uh-uh”. A Mateo y a la banda se les podía percibir, pues estaban en un viaje al recuerdo del gran Cerati.
Sin duda fue una noche inolvidable en la que todos los asistentes disfrutaron minuto a minuto y en la que sus rostros de satisfacción se podían ver en el momento que iban abandonando el recinto, mismo que fue abarrotado por los fieles seguidores de Conociendo Rusia.