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En marco de la decimotercera edición del Festival Internacional de Cine Fantástico Feratum se presentó como función inaugural el filme Estación Wadley del realizador regiomontano Héctor Martínez, la función se llevó a cabo en la explanada Vasco de Quiroga con una afluencia significativa.
Al otro dia de su presentación el cineasta, parte del crew de producción y parte del elenco dieron una charla con medios de comunicación al respecto del filme y su paso por Feratum 2024, además luego de esta conferencia de prensa Crónica Escenario charló con el director Héctor Martínez y se profundizó sobre la gestación de Estación Wadley y su peculiar y extensa relación con Jacobo Grinberg.
Nico Navarro es un padre ausente, es su búsqueda de retomar la relación con su propia familia muere su padre lo que lo conduce a encargarse del patrimonio familiar, tras encontrar un objeto extraño en la casa de antaño de su padre, Nico descubre un secreto que lo hará confrontarse consigo mismo además de con su pasado.
Así es como se narra la historia de Estación Wadley, ópera prima de Héctor Martínez, protagonizada por Pablo Cruz Guerrero, y en la que también aparecen Roberto Sosa, María de la Fuente y Ramón Medina. Filme en el que aseguró el director estar más relacionado con el trabajo de Jacobo Grinberg y con la idea de conciencia que con el viaje en el tiempo, primicia fundamental del filme.
“Estábamos en la creación de una serie, una antología de nueve capítulos, pero era un proyecto bastante ambicioso, pero de ahi surgio la idea y crece porque pasamos por un momento bastante fuerte en nuestras vidas y es basicamente este brinco al interior de enfrentar a estos monstruos con los que todos los días vivimos y basándonos en la experiencia propia, la lucha, el aprendizaje y entendimiento que deja la oscuridad es de donde surge esta idea”, recordó el realizador.
“El título fue algo fortuito, se me hizo curioso que en Real de Catorce existiera la estación Wadley, cuando vemos esto u queríamos hablar de estas cosas de conciencia y por allá vimos las plantas ancestrales y de ahí nos empezamos a preguntar por lo curioso del nombre de herencia inglesa o norteamericana”, agregó.
Estación Wadley surge más que explorar las vicisitudes de la sociedad de un brinco al interior, la autoexploración y el autoconocimiento, aseguró el cineasta.
“Fue partir de cuestiones un poco extrañas sobre el tiempo y el espacio y el que no existen, estamos en un constante presente, pero sanar es como dicen ‘el tiempo sana las heridas’ pero no da entendimiento, y si no hay entendimiento no hay conciencia, y si no hay conciencia no se puede expandir el ser, entonces de esta perspectiva ocupas ser consciente de tu vida y para esto hay que e hace un brinco al interior, entender lo que es la conciencia, la cualidad de la experiencia dice Jacobo (Grinberg)”, explicó.
“Desde esta perspectiva cuando tu eres capaz de observar tu ser que está siendo comandado para la creación de la realidad por tu inconciente, y uno piensa que uno toma las decisiones pero en realidad es tu programación que está adentro, entonces cuando tu tienes esta capacidad de observación de la realidad, de cómo estás construyendo la realidad, no solo de cómo la estás construyendo sino como está sucediendo desde tu pensamiento y tus emociones”, siguió.
“Ahí es donde realmente comienza la sanación, entonces este brinco hacia adentro nos damos cuenta que somos solo un patrón de repeticiones que somo s un loop interminable de experiencias y no podemos salir de ellas hasta no ser capaz de observarlo, que logremos tener conciencia y entendimiento, pero estamos tan acostumbrados a que el tiempo nos sane”, ahondó.
El realizador aprovechó el contexto para dar más detalles: “Yo cambio radicalmente mi profesión, mi forma de ver la vida porque yo me sentía infinitamente triste y no sabía el porqué, fue el cuestionarme el que me faltaba, porque profesionalmente y mi familia estaba bien, me tope con la tesis de Grinberg, ¿existen los monstruos? O somos los humanos negando nuestra oscuridad la que crea todos estos cuentos y leyendas”, enfatizó.
“Entonces me tope conmigo, con mi monstruo, y es como precisamente empiezo a encontrarme en la conciencia de las cuestiones de chamanismo y pachita y todas estas posibilidades increíbles”, recordó.
Es desde ese punto que vienen las mayores virtudes del proceso: “Entendí que tenía algo que compartir sin querer aleccionar, por eso la forma en que se construye es como una aventura, el que quiera sacar algo de ahi pues bienvenido, y si no, si se entretuvo viendo un viaje en el tiempo pues que padre también”, sumó.
“Eso también se convierte en colectivo, cómo vamos viviendo lo mismo y si no somos capaces de observarnos y que somos los creadores de la realidad entonces, apuntamos al gringo, apuntamos a AMLO, apuntamos a cualquiera y deberíamos empezar observando nuestros pensamientos, nuestras conductas, nuestras emociones, empezar por uno mismo solito el contexto empieza a cambiar, pero el cambio comienza en uno mismo”, siguió.
“No creo que exista una moraleja como tal, yo quiero pensar en que es entretenimiento y que cada quien le saque lo que quiera, que cada quien construya una película a través de lo que está viendo, yo creo que con eso me voy conforme”, añadió.
Finalmente el realizador adelantó un poco del siguiente trabajo en el que está trabajando, un largometraje: “Traigo en mente seguir con la tesis, seguir explorando si existen los monstruos o es la humanidad la que realmente cuando nos negamos en la oscuridad creamos todas estos cuentos y leyendas, y por ahí vamos a abordar temas”, concluyó.