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Después de años de haber pisado el escenario del Domo de Cobre en México siendo abridores de la ya extinta banda Moderatto, Ale Sergi y Juliana Gattas cumplieron un sueño al llenar por completo este recinto en su primera aparición en solitario con su exitosa banda, Miranda!, llenando de muy buena vibra pop el disco de la vida de muchos de los presentes.
Fieles a su siempre extravagante estilo, el dúo dinámico argentino hizo su aparición en esta versión ampliada del Hotel Miranda! ni más ni menos que entrando en un cisne blanco por la lateral del público, navegando entre ellos mientras la primera rola de la noche sonaba, “Ya lo sabía”.
Con algunas bolas de disco en medio de la estructura del Palacio de los Deportes, Miranda! puso a bailar y cantar a todos los asistentes, creando el ambiente necesario para su pop rock único y cumplir la promesa de volver esta noche en una fiesta disco, misma que seguía con “Nadie como tú”.
Lo que siento por ti mantenía altas las vibras de un setlist casi idéntico al de previas presentaciones. Los bailarines vestidos en plata con peluca roja constantemente estaban al lado de Ale y Julieta fungiendo como las trabajadoras del Hotel con Discoteca Miranda! a la par de “Extraño”. El primer cambio en su guardarropa se daba con unas nuevas chaquetas, distintas a las del inicio para entonar la dolorosa “Uno los dos”, ideal para aquellos adioses después de un romance ideal.
Después del momento de tristeza general donde las lágrimas del alma rodaron, Ale y Julieta continuaron mostrando su eterno lado excéntrico y fashionista, sello de la banda fundada en 2001. Como todo buen espectáculo de los argentinos, lo visual suma siempre a la experiencia de sus tocadas. En este caso, las pantallas detrás de ellos sumadas a las laterales ayudaban a la ampliación del Hotel de esta noche.
“Como amigos” y “Dos” mostrarían los primeros indicios de la novedad de esta noche, pues en la imagen detrás del escenario saldrían a acompañarlos aquellos con quienes hicieron colaboraciones en sus rolas. Primero, Ana Mena y después Dillom, un factor que realmente no era necesario para la banda pues Miranda! puede por sí mismo enloquecer a los cerca de 20 mil fans que se dieron cita en el Palacio de los Deportes.
Mientras una bola disco aparecía sobre el escenario principal, la fiesta y el beat se mantenía imparable, casi sin pausas. Así llegaba “Puro talento”, recibida con aplausos y gritos mientras la Gattas aprovechaba un pequeño bloque para lucir su voz y Ale bailaba y brincaba alrededor, incluso en “Para olvidar tu amor”. Y de repente, el tono de telenovela haría aparición después de un corte dramático.
Rindiéndole un sentido homenaje a otro dueto sudamericano popular, Miranda! interpretó su cover a Pimpinela, con “Ese hombre”, mientras en el video detrás, el invitado a cantar con ellos en el Hotel, Abraham Mateo, acompañaba a los argentinos que nuevamente habían cambiado su atuendo por trajes con un exagerado estilo victoriano visto en sus mangas y cuello blanco.
Calamaro aparecía, pero solo en video, para entonar otra de las de dolor de la banda argentina con “Tu misterioso alguien” que, con la imagen en blanco y negro le daba un toque de nostalgia a ese tema de aquellos que saben que los han superado por alguien que los sabe hacer felices. Pero fue con “Perfecta”, aun con la versión rara del 2023 con “FMK” y María Becerra, que el Domo de Cobre resonó con fuerza al unísono.
Ese himno de los amigos que se convierten en perfectos amantes mostró una de las grandes virtudes que tiene la banda: la conexión emocional con sus fans, siendo para muchos de ellos sus letras un retrato de sus vidas amorosas o sus sueños y rencores más guardados. Miranda! se ha convertido en el gran confidente de muchos.
Por amar al amor mantenía bailando a algunos de los presentes que también brincaban y movían las manos como “fieles sirvientes” del Hotel Miranda!, siempre administrado por Sergi y Gattas. Pero el público hospedado volvió a enloquecer con ensordecedora devoción con “Prisionero”, himno para aquellos que le dedicarían a los amores pasados ese canto de arrepentimiento y disculpas.
Hola y su insinuación directa hizo que el disco de los corazones de los fans sintonizara la frecuencia correcta de la banda argentina con todo y propuesta indecorosa para conocer su habitación con una explosión final de serpentina plateada. Pero todo festejo necesita un momento de calma, que llegó con un momento acústico con “Lejos de vos”. Ahí, los pasos de baile se cambiaron por una bella balada mientras una luna roja en el video de fondo acompañaba a este gran dúo en este instante de calma y nostalgia.
El Hotel estaba a punto de cerrar sus puertas pero “El Profe” en un remix de 8bits con el baterista acompañándola en el escenario fue coreada por los fans más antiguos (y tal vez perversos) de la banda. Mientras, un espectáculo de bailarinas y el “profe” con la máscara de simio, daban cátedra de un buen entretenimiento que se ligaría a una sorpresa muy especial.
De repente, su nuevo sencillo, “Mejor que vos”, sonó con una invitada especial, Lali, que los acompañó con la siguiente rola, “Yo te diré”, mientras los tres lucían esa vestimenta de plata característica de la canción nueva mientras las palmas y el coro de todos invocaban esas relaciones a escondidas donde todo sucede a escondidas, cuidando el qué dirán y la fuga triunfal de un idilio ilegal.
Me gustas tanto, “Traición” y “Ritmo y decepción” no pararon la energética fiesta de un Domo de Cobre convertido en un baño de luz, baile y canto imparable cual bola disco. Así, llegaba el turno de otra colaboración en “Siempre que lo beso”, con Kenia Os de fondo en la pantalla rodeada de rosa, un claro ejemplo de que Miranda! ha sabido diversificar y asociarse a buenos artistas que han mantenido vivo su legado a diferencia de otras bandas, creciendo cada vez más mientras los años pasan.
La noche en el Hotel Miranda! cada vez se acercaba más a su dulce final, y como ya ha sido tradición antes, el mágico combo de “Mentía con fantasmas” seguía el paso de una celebración eterna donde resultaba impresionante ver a viejas y nuevas generaciones ser movidas por los ya himnos que los argentinos han clavado en el corazón de la audiencia.
El cierre de puertas esperado llegaba entonces con dos icónicos rolones. Primero, “Enamorada”, un himno para aquellos que la han pasado mal en el amor pero encontraron de repente un rayo de luz al lado de alguien que les quiere y los valora. A la par de la emotiva voz de Juliana, fue de las más coreadas de la noche por muchos.
Y esa sencillez y sinceridad en Miranda! solo podía explotar con la infame guitarra de Lolo. “Don”, el éxito que los lanzó a la estratosfera musical en el 2001 con su álbum Sin restricciones, se convirtió en el punto de unión común entre aquellos que abrieron su ser que estaba tan mal y encontraron en la música de los argentinos ese don que requerían para curar todo mal.
Tan agradecidos como siempre y a pesar de la casi nula plática con los fans y detalles en el sonido de algunos temas, Miranda! decidió agradecer a todos por este sueño cumplido, por hacer su propio disco de este Hotel que por una noche se llamó Palacio de los Deportes, de la mejor forma posible: con una rola más. Y así, con “Romix”, le dijeron adiós una vez más a un país donde se han convertido en una sensación popera sin descanso, pero más importante aún, en la banda sonora del disco de nuestros corazones.
