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El actor y escritor estadunidense Gene Hackman, conocido en la industria por tener un intenso carácter y que consagró una carrera de 60 años con dos Premios Oscar, murió junto a su esposa, la pianista Betsy Arakawa, y su perro en su casa, dijo la oficina del sheriff en Santa Fe, Nuevo México, la madrugada de este 27 de febrero.
Las autoridades dijeron que los agentes encontraron al actor, de 95 años, y a Arakawa, de 64, muertos el 27 de febrero por la tarde, alrededor de la 13:45 horas. No se sospechó que se hubiera tratado de un crimen, pero las autoridades no revelaron las circunstancias de sus muertes y dijeron que se estaba llevando a cabo una investigación.
“En este momento no se sospecha que haya habido un crimen como factor en esas muertes, pero no se ha determinado la causa exacta de la muerte. Esta es una investigación activa y en curso por parte de la Oficina del Sheriff del Condado de Santa Fe”, dijo la portavoz Denise Avila.
El actor acababa de cumplir 95 años el pasado 30 de enero; Arakawa, con quien se casó en 1991, tenía 63 años.
Él era una leyenda actoral del Nuevo Hollywood que protagonizó clásicos como French Connection (1971), La conversación (1974) o Sin perdón (1992), llevaba retirado de la gran pantalla desde 2004.
Hackman fue también un ex marine conocido por su voz ronca y apareció en más de 80 películas, así como en televisión y teatro durante una larga carrera que comenzó a principios de la década de 1960.
¿QUIÉN FUE GENE HACKMAN?
El actor nació en San Bernardino, California, en 1930 y durante su juventud Hackman estuvo alistado en la Marina estadounidense, destinado a China y Japón como operador de radio. Su elección por la actuación llegó a finales de la década de los cincuenta cuando se inscribió en la prestigiosa escuela californiana Pasadena Playhouse.
Cabe destacar que Hackman obtuvo las calificaciones más bajas de la institución, demostrando que su estilo actoral era muy distinto al establecido. Al menos, allí conoció a su amigo Dustin Hoffman.
Con nada más que llevarse de allí, se trasladó a Nueva York, donde compartió piso con Robert Duvall. Se empezaba a gestar la generación de actores que cambiaría el aspecto de las estrellas del cine de Hollywood en las dos siguientes décadas.
Aunque había debutado unos años antes, el primer papel fundamental del actor fue el de Buck Barrow en la película de Bonnie y Clyde (1967) dirigida por Arthur Penn, con Warren Beatty y Faye Dunaway de protagonistas.
Este trabajo significó su primera nominación a los Oscar y una distinción que fue el disparo de arranque de lo que se llamaría el cine del Nuevo Hollywood, del que Hackman sería uno de sus mayores iconos.
UNA NUEVA ERA PARA EL CINE DE EU
Ese estatus quedó refrendado con el Oscar de mejor actor por su interpretación del policía Popeye Doyle en la mencionada French Connection. Contra el imperio de la droga (1971), el thriller de William Friedkin que revolucionó el cine policiaco para siempre. Después vendrían otros papeles inolvidables como Espantapájaros (Jerry Schatzberg, 1973) o La conversación (Francis Ford Coppola, 1974).
Hackman acabó su década maravillosa de los setenta de la forma más histriónica posible, como el Lex Luthor del famoso Superman (1978) de Richard Donner. Esa vena cómica, que no había ocultado tampoco en El joven Frankenstein (Mel Brooks, 1974), le acompañaría hasta algunos de sus últimos papeles más recordados, como el de Royal Tenenbaum en Los Tenenbaums (2001), de Wes Anderson.
En los ochenta y noventa sumó otro buen puñado de títulos memorables como Otra mujer (1989) de Woody Allen, además de Sin salida (1993) de Sydney Pollack y su segundo premio Oscar, por el western Sin perdón (1992) de Clint Eastwood.
También fue nominado a un Premio de la Academia por su papel como agente del Buró Federal de Investigaciones en el drama histórico de 1988, Mississippi Burning, de Alan Parker.
DESCANSE EN PAZ
Hackman podía aparecer en la pantalla como amenazador o amigable, trabajando con un rostro que describió al New York Times en 1989 como el de “un minero común y corriente”.
Actor de método, se inspiró en su experiencia personal para dar forma a un papel. Sus personajes a veces eran crudos y violentos y abarcaban desde un entrenador de baloncesto de un pequeño pueblo en la película deportiva Hoosiers (1986) hasta el archirrival de Superman, Lex Luthor que tuvo una secuela en Superman II (1980).
Se retiró a los 70 años, diciendo que los papeles que le ofrecían eran demasiado paternalistas. Su último papel importante fue en la comedia Welcome to Mooseport (2004).
Hackman, que vivía en las afueras de Santa Fe, se casó dos veces y tuvo tres hijos: Christopher, Elizabeth Jean y Leslie Anne, con su difunta ex esposa, Faye Maltese, quien murió en 2017. Se casó con Arakawa en 1991.