Escenario

Adriana Llabrés abraza a la comunidad sorda con ‘Todo el silencio’

ENTREVISTA. Aspira al premio de Mejor Actriz en la próxima entrega de los Premios Ariel a celebrarse el 7 de septiembre

cine

Fotograma del filme.

Fotograma del filme.

Cortesía

Después de un paso exitoso en el pasado Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), la actriz Adriana Llabrés continúa creciendo en su carrera gracias a su relevante papel en la ópera prima de Diego del Río, Todo el silencio, donde gracias a su rol como Miriam, una mujer que paulatinamente se está quedando sorda, logró ser reconocida no sólo en el certamen cinematográfico sino con la nominación a Mejor Actriz en la edición 66 del Premio Ariel, a celebrarse el próximo 7 de septiembre.

Crónica Escenario habló con la actriz y productora acerca de esta emotiva historia incluyente que ya está disponible en Prime Video: “El proyecto empezó con pláticas de querer hacer cosas personales y poder acortar la brecha entre el teatro y el cine, yo queriendo producir, Luis Salinas queriendo aportar y dar foco y todo terminó creando este barco”, expresó.

Han sido muchísimos años de mucho trabajo y se logró levantar el proyecto gracias a gente muy talentosa y generosa. Buscamos crear un cine verdaderamente inclusivo y es un orgullo ser una de las pocas cintas, si no es que la primera, que es bilingüe en nuestro país porque hablamos en lenguaje de señas y español”, señaló Llabrés.

“Creo que, además, Todo el Silencio se destaca por ser una cinta que sabe representar muy bien a toda la comunidad sorda así como a la LGBTIQ+ de una forma muy bella, ya que se sacude de etiquetas y muestra una historia que solamente existe gracias a sus personajes”, mencionó.

Me gusta que no haya ningún prejuicio sobre ello, ya sea sobre su sexualidad o sobre la sordera que padecen. Es una propuesta cuya inclusión se siente natural y representativa de aquellos a quienes queremos darles voz”, agregó Adriana.

Lee también

Diego del Río, nominado al Ariel por ‘Todo el silencio’: “El cine es la cara de todo un país’

David Rosas Lira
El cineasta de pie dirigiendo a su elenco en ‘Todo el silencio’.

En Todo el silencio, la joven actriz encarna a Miriam. “Fue un papel muy interesante de hacer. Lo construí con mucho amor debido a mi experiencia cercana con la sordera, pues soy HOPAS (hija oyente de padres sordos) además de que padezco la misma enfermedad que ella en la cinta, otosclerosis”, mencionó.

“Entonces, desde este lugar tan personal que me permite entenderla, fui creando ese arco que ella vive, de ir perdiendo la audición y su forma de conectar o ver el mundo a través de ello”, continuó.

Para Llabrés, era muy importante representar de buena forma a la comunidad de personas sordas.

Parte de la preparación fue estudiar mejor la Lengua de Señas Mexicanas (LSM) al lado de mis amigos de la compañía teatral Seña y Verbo, quienes estuvieron además muy involucrados y nos ayudaron con el tema porque siempre quise que la forma en que Miriam se expresara con ello se sintiera completamente natural y fluyera como una conversación normal pero que no hablara como una sorda profunda, sino como alguien que habla español y cambia sus señas porque habla bien oralmente”, detalló.

Asimismo, la talentosa actriz tuvo una gran compañera en Ludwika Paleta, que también logró una nominación por su papel de Lola. “Trabajar con ella fue maravilloso. Es una gran profesional, muy estudiosa y respetuosa. Recuerdo que para una escena donde tenía que hacer algo que no había hecho antes, me dio total confianza para hacerla al lado de ella. Y de alguna manera, es un gran complemento para el relato de Miriam”, dijo.

Lee también

‘Tótem’ y ‘El Eco’, las grandes triunfadoras del FICM

Ulises Castañeda en Morelia
Lila Avilés triunfa en el FICM.

“Aunque Lola se muestra resistente a lo que su pareja vive, poco a poco tienden un puente en el que ambas se comprenden, se apoyan y siguen adelante. Definitivamente, con todo y el duro proceso que Miriam enfrenta, Lola es parte clave para ello pues la pareja sufre este momento en el que tienen que decidir, cómo se van a expresar entre ellas y poder encontrar ese punto medio entre ambas”, apuntó.

Adriana también funge como productora de este emotivo proyecto, pero ella procuró siempre marcar una línea entre ambos papeles dentro del filme. “Siempre tuve el afán de dejarles espacio, trazando una línea donde no quería que Diego me sintiera como productora, sino más como su actriz. Creo que fue un privilegio estar un poco invisible ante sus ojos respecto a muchas cosas. Lo mismo me pasó en el proceso de edición, donde todo lo veía con Luis y después él le comunicaba nuestras ideas”, destacó.

Como productora, también vio en el guión una gran fortaleza, misma que fue explotada de gran forma por Lucía Carreras. “Es de las mejores guionistas que existen. Hubo un par de tratamientos que leí previamente porque me los pasaba Luis, mi socio. Le daba mis notas a él y había algunos intercambios de cómo queríamos que fuera la historia y después se reunían Luis, Diego y Lucía”, explicó.

“Fue capaz de crear un guión que tiene muchísimas capas, capaz de abrir conversaciones. Definitivamente una de las virtudes más importantes de las cuales puede partir una buena película es que sin un buen guión, no hay manera y ella es maravillosa haciendo lo que sabe hacer”, añadió.

Otro aspecto interesante de Todo el silencio es la presencia teatral y su importancia en el filme “Es una de las formas en las que ella se desarrolla y de ahí venimos Diego y yo, del teatro. Me parece que la teatralidad y esa brecha que quisimos cerrar entre el cine y esta expresión están ahí”, comentó.

Lee también

‘El Eco’: Retrato de un poblado entre la desaparición y el olvido

José Salazar
Fotograma de 'El Eco'.

La misma lengua de señas depende mucho de ello y claro que es un elemento que está muy presente no sólo en la forma en que percibe su mundo sino también en cómo acepta su nueva realidad. Hay una metáfora por ahí que se siente al respecto de la expresión, la lengua y cómo a través de este arte ella logra adaptarse a su nueva condición”, manifestó Llabrés.

Pero lo más memorable es, sin duda, la inclusión sin miedo que se hace sobre la comunidad sorda. “Creo que tenemos que hablar con quienes queremos representar. Con la comunidad de sordos, voy aprendiendo que, por ejemplo, a ellos no les gusta que se diga discapacidad y estaba intentando explicarle a mi familia por qué”, señaló.

Eso puede ser complejo porque tendemos a ver el mundo desde donde pensamos. Hablamos como si los oyentes tuviéramos todas las facultades de forma correcta cuando estoy segura que no es cierto”, criticó Adriana.

A veces hablamos como si tuviéramos todas nuestras capacidades al 100 pero eso es creer que estás en una tabla donde le punto de vista es superior porque aparentemente tiene todas las facultades, casi imaginándose un mundo en que ser sordo, ciego o tener epilepsia y ser neurodivergente existan sin que eso signifique que no eres capaz”, complementó la protagonista del filme.

Y es que, para Adriana, es importante ver más allá de las etiquetas y los miedos. “Entiendo perfectamente por qué se ha mantenido tanto tiempo el término de discapacidad y poner esa etiqueta. Y es que mucha gente le teme al término sordo. Existe una resistencia a decirla porque sentimos que es ofensivo, cuando no lo es”, dijo.

Lee también

‘Tótem’ lidera las nominaciones de los Premios Ariel

Ulises Castañeda
Anuncio de nominados a los Premios Ariel 2024.

Una persona sorda es una persona sorda y es nuestro prejuicio el que es ofensivo, es el que indica que eso está mal cuando los sordos están orgullosos de quienes son y de las otras capacidades que desarrollan a partir de ello como leer labios de manera fantástica”, aseveró.

“Por eso tendríamos que revisar nuestros prejuicios respecto a quien no es igual que uno. Que uno deje de ver lo malo en la diversidad porque eso nos va a ayudar a que se sientan más incluidos y que podamos aceptar a quienes están a nuestro alrededor sin segregar”, complementó la también productora de la multinominada cinta.

Después del gran éxito que Todo el silencio ha acumulado, Adriana Llabrés tiene la vista puesta ya en algunos proyectos futuros. “Quiero tener la oportunidad del espacio para experimentar. Actualmente tengo un proyecto creándose, que todavía es muy bebé, pero planeo hacerlo con Ana Kupfer, que es productora de teatro, y también con Enrique Singer, que es mi colega y socio, así como con Elsa Reyes”, dijo.

Quisiera poder explorar diferentes géneros y temáticas de las que quiero hablar y reflejar lo que pienso, a través de comedias y otros géneros, tal vez fársicas y muy diferentes a Todo el silencio”, sumó.

“La idea de producir proyectos míos viene de poder expresarme y poder comunicar lo que siento, que a veces no puedo con solo palabras. Y como actriz, no hago nunca proyectos que vayan en contra de la manera en la que pienso, pero quiero involucrarme más en papeles que tengan que ver con las ideas que quiero mandar al mundo”, acotó la actriz mexicana.

Finalmente, para ella es grato que la gente conecte con la historia de Miriam, sintiéndose representada de una manera honesta y emotiva. “Me han llegado un montón de mensajes de la comunidad de sordos sintiéndose incluidos. Eso revoluciona mi mundo porque todos estamos muy orgullosos de que este proyecto vaya más allá de la trama”, comentó.

Que ellos sientan que también es una historia para que ellos la vean es importantísimo. Además, a mucha gente la película los ha acompañado en cierto duelo. Que el público esté recibiendo con tanto amor este relato es muy significativo para todo el equipo”, concluyó.