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El baterista ganador de cuatro premios Grammy y creador de la banda sonora de Birdman (González Iñárritu, 2014), Antonio Sánchez, ha anunciado el lanzamiento de su nuevo álbum, SHIFT (Bad Hombre Vol. II), que llegará a través de Arts Music, una división de Warner Music, el viernes 26 de agosto, prometiendo un viaje apasionante y ecléctico que une voces musicales y perspectivas de todo el mundo. En Crónica Escenario hablamos con el talentoso artista mexicano acerca de este nuevo proyecto aunado a otros detalles de su proceso creativo.
“La huella que dejó el primer disco de Bad Hombre fue de suma importancia para mí porque me di cuenta que podía hacer proyectos solistas en mi estudio, en mi casa como una especie de científico loco haciendo experimentos. Fue un proceso padrísimo el poder hacerlo yo solo sin presiones de tiempo y descubrir eso ha sido muy grato”, comentó en retrospectiva Sánchez acerca del anterior volumen y las puertas que éste le abrió creativamente.
Ahora, Antonio cambió el enfoque, desatando su nueva personalidad creativa en SHIFT. “Cuando comencé a grabar este Volumen 2 pensé que sería genial tener colaboraciones con otros músicos. Y aunque lo más convencional sería que me dedicara a componer la música o que acordáramos con una tercera persona esa parte, se me ocurrió que podría ser interesante si le pedía a los artistas invitados esta vez que me regalaran una canción con su voz en vez de reunirnos en el estudio y hacer algo juntos. El tema podía ser nuevo, viejo o solamente una maqueta pero me darían el permiso de hacer lo que quisiera con ella, de reimaginarla a mi manera con la voz y la batería como mis instrumentos protagónicos”, aportó el músico.
“Resultó muy conmovedor que todos aquellos que aparecen en este álbum aceptaran eso pues la música suele ser muy personal. Para mí es un honor que gente de la talla de Dave Matthews, Trent Reznor, Lila Downs o Ana Tijoux me regalaran sus canciones para reinventarlas. Esto es el sueño de cualquier productor, tener esta materia prima creativa tan bien hecha e icónica desde el principio”, añadió el jazzista mexicano.
Una parte fundamental de esta nueva entrega por parte de Sánchez fue reinventar y dar su toque personal creativo sin afectar la esencia de sus invitados. “Busqué mantener la integridad y espíritu de los temas. Si Reznor o Tijoux me ofrecen ese material, notarás la diferencia. Cuando escuchas el álbum de principio a fin, la línea que traza todo este volumen de Bad Hombre simplemente soy yo, tocando la batería y demás instrumentos, checando los aspectos de la producción. En sí, me gusta pensar que es la visión de una sola persona tratando de aunar los temas de 12 artistas diferentes. Fue interesante tener ese proceso y me quedé con ganas de hacer más”, afirmó.
Curiosamente, Antonio ha dejado crecer al “Bad Hombre” que hay en él, pasando de un concepto nacido en la era Donald Trump en forma de crítica social hacia un alter ego que le ha ayudado a crecer artísticamente. “Definitivamente ha trascendido hasta convertirse en esta personalidad mía que me da permiso de hacer cualquier cantidad de cosas que no tienen que ser identificadas como jazz, porque mucha gente me ubica por esa parte. Pero el jazz ahora también ha cambiado su significado para mí, pues ahora es la música que me ha dado la libertad de hacer todo lo que se me ocurra. Me ha dado la técnica, los fundamentos y las herramientas para desarrollar ese alter ego y hacer lo que en su momento me nazca musicalmente”, expresó.
Además, Sánchez admite que esta etapa de experimentación y libertad creativa es algo que disfruta mucho. “Es lo que más me gusta ahora, porque ya he hecho discos donde creo la música, jalo a un grupo, vamos al estudio, ensayamos y grabamos para presentarlo e irnos a tocar a todos lados. Pero me parece que ser artista es siempre un proceso de investigación interno, de averiguar qué más puedo hacer que ni yo ni nadie más haya hecho antes. Me interesa mucho ese espíritu de innovación”, aseveró el artista.
El experimentado músico y jazzista destacó también las diferencias que existen entre el anterior volumen y éste, enfatizando en la importancia sonora de la batería. “El primero tiene mucha en ritmos acústicos e incluye improvisaciones con elementos electrónicos encima donde obtuve una sonoridad que generalmente no se logra. En el segundo son la batería y la voz la parte fundamental junto con los temas de los otros lo que le da otro enfoque sonoro al proyecto. Y es que cuando escuchas música pop o rock te enfocas siempre en la voz y la batería no sobresale, a menos que seas The Police o Led Zeppelin pero la realidad es que, aunque el trabajo de los productores actuales es muy bueno, mi instrumento natural, la batería, no destaca sobre la vocal o los demás sonidos. Eso hace que este proyecto de SHIFT tenga una sonoridad interesante”.
Charlando acerca de los tracks que hay en el SHIFT (Bad Hombre Vol. II), existe uno donde aparece la aportación de una figura para Antonio, ni más ni menos que su abuelo, Ignacio López Tarso. “Quería que fuera como el maestro de ceremonias pues él ha sido una persona tremendamente influyente en mi vida. Si bien crecí con él, es su faceta artística, saber que siempre hizo lo que quiso y le fue bien y que a sus 97 años sigue haciendo lo que le gusta por esa pasión a la actuación, algo que siempre me ha motivado y he admirado de él”, dijo.
“Aunque nuestras facetas son totalmente distintas, en el primer Bad Hombre puse un pedazo de un corrido que él interpretó en su momento para abrir esa pieza pues ahora quise hacer lo mismo para éste. Entonces le escribí algunos versos, pensando en él como en medio de una plaza de pueblo donde de repente apareciera mi abuelo y nos invitara a entrar de lleno a la experiencia musical de este disco. Me pone muy contento colaborar con él y para mí es y siempre será un honor poder hacer algo a su lado”, confesó emotivamente el músico.
Otro tema particularmente interesante está en “Waiting”, donde Antonio Sánchez se enfrenta a su alter ego, el mismísimo Bad Hombre. Al respecto de esta colaboración, declaró: “Ya tenía un ritmo de batería establecido que estaba guardado en la computadora y empecé a desarrollarla. Originalmente, se me antojaba mucho que Thom Yorke de Radiohead cantara ese track pero fue imposible contactarlo para que participara en él. Así que tenía una maqueta con mi voz y al escucharme me gustó cómo sonaba”, destacó.
“Era la primera vez que yo cantaba algo como vocal principal y como en todos los tracks había un featuring tal o cual artista invitado, siendo éste el primer tema que cantaba en mi carrera pues era obvio que el Bad Hombre tuviera ese featuring con Antonio Sánchez y, la verdad, es que se me antoja mucho irme por ese lado también en este momento tan liberador de mi carrera donde todo pasa por el filtro del jazzista, pues es ahí que sale esta sensibilidad característica de mis proyectos”, añadió.
Además de este interesante proyecto musical, Sánchez sigue musicalizando cintas y series de televisión, todo esto después del éxito conseguido con Birdman, de Alejandro González Iñárritu. Ahora, toca el turno de una serie documental de HBO que le ofreció nuevos retos. “Para los Anarquistas, me enviaron el primer episodio para ver si me interesaba musicalizarlo y me quedé pegado a la televisión. Me interesó mucho la historia de estos personajes tan peculiares y todo en lo que derivó su movimiento”, expresó.
“En cuanto al proceso de composición, fue muy diferente a lo que había hecho antes. En Birdman, el documental Política, manual de instrucciones o la serie Get Shrorty, el elemento principal es mi batería. Pero para este proyecto, que me llegó a la par de Shift, me ayudó a explorar más en la sonoridad compuesta con lo visual. Entonces hice una base donde toco de todo, guitarra, bajo, teclados. Tuve esa libertad creativa para crear la música y agradezco este momento pues me ha permitido generar esta banda sonora tan diferente a otras y seguir descubriendo estas sonoridades tan distintas”, manifestó.
No cabe duda que uno de los grandes cambios que permitió que Antonio rompiera las cadenas del jazz hacia otros experimentos musicales fue el tener su propio estudio en casa. “Eso me ha dado herramientas para lograr esta explosión creativa. Me siento como un pintor que por fin tiene su taller y puede hacer lo que se le antoje. Honestamente, antes me sentía limitado por no tener esa tecnología pero ahora el cielo es el límite porque con ello el proceso de investigación hacia lo que venga y quiera hacer es más práctico para hacer mis loqueras como una rola de rock industrial con Trent o un hip hop en español con Tijoux y todas esas cosas que se alejan del jazz. Eso resulta muy divertido para mí, francamente”, mencionó el polifacético músico.
Para finalizar, Antonio Sánchez reflexionó: “Ha sido un largo camino sin duda desde el Migration hasta ahora, escucho ambos y diría que es una evolución saludable porque si estuviera haciendo discos que sonaran igual desde hace cinco o diez años, implicaría que, como artista, he dejado de crecer. Uno de los ejemplos más claros de ese crecimiento es Miles Davis, que comenzó tocando be bop y terminó haciendo covers de Michael Jackson o Cindy Lauper. Para muchos era un desperdicio de su talento como jazzista al hacer esto pero lo que le admiro, más allá de que me guste o no esa faceta suya, es el hambre de seguir creciendo e ir forjando tu propio camino aunque no les guste a los demás, buscar siempre que tu música conecte con la gente mientras lo vas haciendo y sigues desarrollándote como artista. Ése es el aprendizaje”, concluyó el jazzista.
SHIFT (Bad Hombre Vol. II) ya está disponible para pre -ordenar y pre-ahorrar ahora. Hasta ahora se han liberado “I think we're past that now”, con los miembros del Salón de la Fama del Rock and Roll y dos veces ganadores del Premio de la Academia, Trent Reznor y Atticus Ross. El segundo adelanto es “Mi palabra”, un tema en colaboración con la legendaria rapera chilena Ana Tijoux. Además de que la serie documental de HBO Max, The Anarchists, ya está disponible en su sistema de streaming, añadiendo un nuevo episodio de los seis que la conforman cada domingo.
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