El clásico cuenta que conocemos de La Bella y la Bestia, emprende una nueva aventura, esta vez deja la pantalla, para levantar el telón del Marketeatro, bajo el nombre de Bella: El musical.
“No movemos nada de la historia, creemos que es componente principal que ha logrado acaparar la atención del público infantil principalmente, dándole vida a los personajes mediante personas reales y más allá de la fantasía”, declaró en entrevista con Crónica Escenario, Farid Caram, productor de la puesta en escena.
Una producción que llega a refrescar los contenidos infantiles, de los cuales, hace énfasis en que se han olvidado y se han encargado de irlos dejando en el abandono, así como al propio público infantil.
“Nuestra labor está en seguir trabajando con proyectos que no dejen morir el teatro infantil, Bella es una de las historias más vistas dentro del contenido infantil, y aunque parezca mucho el tiempo, comprobamos que mientras esté bien contada, con la luz que amerita la escenografía y con los personajes tan de cerca, los niños están al filo de la butaca”, mencionó.
La historia como bien se conoce, donde la hermosa princesa vive en un poblado, y su padre se ve envuelto en problemas, llevándolo al castillo de la Bestia, donde mediante sucesos inesperados, llevarán a Bella a quedar como prisionera y finalmente, queda en una historia de amor y amistad.
“De eso se trata, de poder resaltar los valores a través del mundo del teatro, es el arte que más permite acercarse al público y conectar con las historias. Es un llamado a las familias que se den la oportunidad de consumir el trabajo que hacemos todos los que formamos parte de la compañía”, dijo.
Una propuesta que como su nombre lo dice, tiene mucho que ver con la música, por lo que los arreglos brindan al espectador, la posibilidad de conectar sus sentidos al compás de las notas e ir imaginando como si estuvieran dentro del castillo.
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