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El sol se ocultaba tímidamente en el horizonte mientras el metro llegaba a la estación Velódromo, rápidamente comenzamos a descender fanáticos de todas las edades para emprender el camino hacia el Palacio de los Deportes.
Los distintos objetos de la banda que ofertaban los diversos comerciantes se podían apreciar, algunas personas comprándolos y poniéndose inmediatamente la sudadera o la playera, otras con la prisa de ya formarse para ingresar pues aunque aún no era tarde, no querían perderse ni un minuto.
Mientras los asistentes comenzaban a ocupar sus asientos salió al escenario Donovan Morales, quien se dio a la tarea de amenizar la espera e incluso comenzar a levantar la euforia del público que ya estaba ansiosa.
Fue a las 20:40 cuando las luces se apagaron, la oscuridad y el grito del público se apoderaron del lugar hasta que llegó Camilo Séptimo para hacer contacto con su público, pues con el simple sonido del sintetizador del tema fue suficiente para poner a todos de pie para cantar.
“Eres” y “Ser humano” fueron los temas que sonaron de inmediato, lo que provocaba que el público continuara con esa explosión eufórica inicial para comenzar a bailar, brincar y agitar sus brazos con más energía.
La banda tocaba y se apoderaba del increíble escenario el cual maravillaba a los asistentes con su gran juego de luces, las cuales se combinaban perfectamente a los ritmos de la banda y nos transportaban al universo cósmico de Camilo Séptimo.
La canción que continuó fue “Ecos”, tema en que aprovechó el cantante para gritar “arriba” para ocasionar el grito y el aplauso al ritmo de la música.
“Cómo están amigos, muchas gracias por estar aquí con nosotros, hoy es un día muy especial, un día mágico. Hoy se cumplen 10 años y qué mejor que sea aquí. ¡Viva México! Esperamos que la pasen increíble, que la pasen muy bien y bueno, que comience el show”, fueron las primeras palabras de Manuel Coe en este show para su público.
Después del gran grito que se produjo tras las palabras del cantante, las sorpresas comenzaron a llegar, pues el tema “Como tú” contó con la colaboración de Donovan Morales, quien fue recibido con un gran aplauso.
Otra de las cosas que sorprendía a los asistentes eran los magníficos visuales que se proyectaban en las pantallas detrás de los músicos, los cuales jugaban con la música, pero por momentos también nos mostraban el rostro de los músicos.
A su vez las luces que en un principio maravillaron, ahora se lucían al doble, pues con más colores y más movimiento: “Cómo están amigos, apenas vamos calentando, nos queda un largo show”, fueron las palabras del cantante para darle paso a Efímera.
“¡Camilo, Camilo!” era el grito de ovación que el público le dedicaba a la banda quienes continuaron la noche con “Veneno”, “Aura” y “Sintergia”¸ esta última en compañía de David Velasco, vocalista de Porter, lo que causó un nuevo grito.
“Está canción que sigue la quiero dedicar a mi mami hermosa que está por aquí y a mi papito hermoso que está en el cielo” y con esas palabras el vocalista logró un momento emotivo y una atmósfera nostálgica mientras cantaba “Galáctica” en compañía de Francisca Valenzuela.
El siguiente tema fue miénteme, en el cual el público con la luz de su celular alzada en lo más alto lograron recrear un universo como regalo para los músicos quienes se veían felices y sorprendidos por la entrega de sus fans.
El público feliz brincaba y cantaba y las sorpresas para ellos aun no terminaban, pues los invitados especiales aun no acababan y fue así como Luis Jiménez, guitarrista y cantante de Los Mesoneros, se hizo presente en el escenario, así como Sebastián Franco, bajista de Bengala.
“Amigos, los sueños se cumplen, nosotros veníamos aquí a ver nuestras bandas favoritas soñando con tocar aquí y hoy lo hemos cumplido, los sueños se cumplen amigos”, comentó lleno de emoción para seguir con el tema “Neón”.
El final de esta noche mágica llegaba, por lo que llegaba el turno de “Vicio” tema con el que llenaron de color todo el escenario, las luces bailaban al ritmo del bajo y el confeti bañó a los asistentes quienes felices brincaban y cantaban el tema.
El recinto se oscureció, los músicos bajaron del escenario, pero solo por un momento, pues después de una breve pausa y tras los gritos del público regresaron para cantar “Nos vemos en el 27”.
“La siguiente canción la quiero dedicar a mi amor y a mi hijo Matías, nuestro amor eterno”, comentó al público para continuar con “No te puedo olvidar”.
Los músicos después de aventar una chamarra como regalo al público continuaron con “No confíes en mí” para así llegar a “Inevitable” cerrando de manera perfecta esta noche mágica en la que se celebran 10 años de esta exitosa banda.
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