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El Festival Internacional de Cabaret (FICAb) continúa en pleno apogeo desde su inicio el 8 de agosto y se extenderá hasta el 31 de agosto, ofreciendo una vibrante programación en la Ciudad de México, Oaxaca y Puebla. Este evento anual busca descentralizar la oferta cultural y llevar el teatro cabaret a diversos rincones del país.
En una reciente charla con Crónica, algunos protagonistas del festival compartieron sus perspectivas sobre los proyectos y el papel del cabaret como herramienta de crítica social.
Alán Gutiérrez es el director y dramaturgo de la obra “Las fabulosas Loma's Girls”, que se presenta el 29 de agosto a las 20 horas en el Foro A Poco No. Gutiérrez explicó que la obra aborda la desigualdad y el clasismo en México a través de un formato cabaretero. La trama sigue a dos personajes privilegiados de Guadalajara, que emprenden un viaje a la Ciudad de México y enfrentan diversas situaciones que cuestionan sus percepciones y privilegios. Alan comentó que, el cabaret es un género teatral complejo que combina múltiples elementos como el cine, la música y la danza, y que permite una crítica social profunda a través del humor.
“Creo que el cabaret es un espacio ideal para tratar temas de justicia social”, señaló. “A través de la risa, podemos hacer que el público reflexione sobre la realidad de las desigualdades. En nuestra obra, nos burlamos de la clase privilegiada durante casi dos horas, lo que permite que el público vea una crítica que a menudo no se presenta en la realidad cotidiana. El humor permite que la gente baje la guardia y se cuestionen sus propias opiniones y prejuicios.”
En cuanto a la forma en que el cabaret ayuda a abordar temas de desigualdad, el dramaturgo señaló que el formato permite una reflexión profunda mientras se mantiene un tono ligero. “Nuestro objetivo no es burlarnos de las personas que ya están en desventaja social”, explicó. “En lugar de eso, nos centramos en mostrar las absurdidades de la clase privilegiada y hacer que el público reflexione sobre el impacto de sus comentarios y actitudes.”
Karla Gómez, actriz de la obra “Waiting for Julieta”, que se presentará el 30 de agosto en el mismo foro, discutió cómo su espectáculo explora las relaciones amorosas a través de la figura de Julieta de Shakespeare. La obra presenta una visión crítica del amor romántico, situando la historia en el noreste de México y utilizando la tragedia clásica para cuestionar la idealización del amor tóxico. Karla destacó que el cabaret permite una interacción cercana con el público, lo que facilita una reflexión más íntima sobre los temas tratados.
“En nuestra obra, usamos la figura de Julieta para explorar cómo romantizamos el amor tóxico”, explicó la actriz. “Ubicamos la historia en un contexto más familiar y cercano para el público, y a través de la convivencia y la interacción, creamos un espacio donde los espectadores pueden reflexionar sobre sus propias experiencias amorosas. El cabaret nos permite conectar de manera más profunda con el público, haciendo que la reflexión sobre el amor sea más accesible y personal.”
Asimismo, comentó sobre cómo el cabaret transforma obras emblemáticas del teatro. “La manera en que conectamos con el público en el cabaret es diferente a otros géneros teatrales”, dijo. “Creamos un ambiente de convivencia donde el público no solo observa, sino que también participa activamente. Esto permite una interacción más íntima y una experiencia teatral más completa.”
Por su parte, Diana Pimentel, actriz de la obra “Resetearme sí que me dolió”, que se presentará el 31 de agosto, también en el Foro A Poco No, habló sobre el desafío de tratar temas de diversidad de cuerpos en el cabaret. La obra, creada por un grupo de mujeres feministas, explora la relación de las mujeres con sus cuerpos; “La historia gira en torno a una robot que, a través de un viaje en ayahuasca encuentra a otras mujeres que le enseñan a ver su cuerpo desde otros puntos de vista y decide romper con su idea de lo que ella cree que es o el cómo la programaron para creer que ella es”. Pimentel destacó que el cabaret ofrece una oportunidad para abordar temas serios con un enfoque ligero, pero el reto es mantener la seriedad del tema sin que se vuelva risible.
“Uno de los mayores desafíos es encontrar el equilibrio entre la seriedad del tema y la naturaleza humorística del cabaret”, explicó Pimentel. “Queremos que el público reflexione sobre la diversidad de los cuerpos y los problemas asociados a la percepción social de los mismos, pero también debemos presentar estos temas de manera que se puedan abordar con humor. Esto requiere un enfoque cuidadoso para que la reflexión no se pierda en la risa.”
Pimentel también ofreció recomendaciones para disfrutar de la obra. “Les sugiero que entren con la mente abierta y dispuestos a disfrutar”, dijo. “El objetivo es divertirse y permitir que la reflexión llegue después. No se trata solo de observar, sino de vivir la experiencia y dejar que las ideas se desarrollen con el tiempo.”
En resumen, el Festival Internacional de Cabaret 2024 se presenta como un espacio vital para la exploración de temas sociales a través del humor. Las obras destacadas en esta edición del festival demuestran cómo el cabaret puede servir como una herramienta poderosa para la crítica social, ofreciendo una combinación única de entretenimiento y reflexión.
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