Furious Monkey House se aleja de la inocencia infantil para llegar a una etapa de ensoñación adolescente

ENTREVISTA. “In the void” es la carta de presentación para una nueva etapa de la banda, quienes ahora presentan un sonido más maduro

música

Mariana Garibay

11/04/2023 15:55

Oneiric “es la transformación” de acuerdo con la vocalista de Furious Monkey House, Mariña Paz; pues la creación de este nuevo álbum, disponible desde el 17 de marzo en todas las plataformas digitales, los acompañó por casi tres años en sus vidas adolescentes.

“Las temáticas de las canciones tienen mucho que ver con la huída, la evasión querer estar en otro sitio”, reflexionó Paz en entrevista para Crónica Escenario, sobre el porqué del nombre del nuevo disco, el cuál se traduce como “onírico” y hace referencia al mundo de los sueños, el cual consideraron como “un refugio fácil y bonito pero que puede ser muy oscuro, se puede relacionar con las pesadillas”.

“Teníamos como 16 años”, señaló la cantante sobre los inicios de un disco que hoy define como maduro y que asegura “refleja muy bien ese momento de sus vidas y cómo ha cambiado ahora”. Sin dejar atrás los guitarrazos, en esta ocasión los sintetizadores son protagonistas de la música del grupo, con lo que generan una mezcla entre el synth pop y el rock noventero.

Si bien Mariña asegura que todos los miembros siguen siendo muy parecidos a como eran antes, no dejó pasar el hecho de que la edad sí ha provocado algún cambio en ellos: “Evidentemente hemos pasado una adolescencia entonces nuestros pensamientos son más complejos, nos relacionamos de formas nuevas, pero en esencia somos los mismos”, dijo.

Esta maduración adolescente trajo nuevas olas musicales que terminaron convirtiendo a Furious Monkey House a unos tonos mucho más oscuros y que deja desde el imaginario de la vocalista, una sensación “flotante e intangible como los sueños”, como se puede notar con “In the void” o “Mesmerism”, últimos sencillos de la agrupación.

La cantante aseguró que la banda antes hacía pop rock pero ahora cuenta con influencias más variadas: “Todas las bandas para seguir tienen que evolucionar”, señaló Mariña “lo que hicimos fue utilizar en nuestra música nuevas referencias de artistas que nos iban interesando”.

De gustos parecidos e ideas claras, con los años los niños crecieron y “cada quien se fue a una cosa” por lo que resultó complicado, más no imposible, el encontrar “una unión entre todas las cosas”.

En esta nueva etapa la banda deja al característico mono que los acompaña mientras tocan, pues asegura la vocalista que la huída de mono simboliza “la desaparición de la inocencia” que los acompañó siendo niños en la música.

El siguiente paso para este grupo impredecible es el compartir sus nuevas canciones.