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Después de 20 años La Gran Feria de México regresó con una gran oferta gastronómica, diversas atracciones para chicos y grandes, y un cartel musical para todos los gustos. Con el objetivo de que los chilangos se diviertan en un ambiente familiar y con el tiempo forme parte de la identidad citadina, el evento se encargó de juntar a reconocidos artistas de diferentes géneros para crear noches inolvidables.
El pasado miércoles fue turno de dos grandes grupos: El Gran Silencio y Los Kumbia Kings. A partir de las 20:00 horas las personas comenzaron a llegar, era evidente que entre el público se encontraban varias generaciones reunidas, diferentes estilos e incluso familias completas esperando a que el espectáculo comenzará, eso sí, los unía el amor por cualquiera de los dos grupos (o ambos).
Después de una hora de espera y sin aviso previo, El Gran Silencio salió al escenario iluminado de luces azules, rojas y amarillas, que, a decir verdad, eran un poco incomodas para la vista. El primer tema fue “El retorno de los chúntaros”, Tony Hernández fue el primero en caminar sobre el escenario para acercarse a sus fanáticos y al ritmo de la música pidió que movieran las manos. Posteriormente, Capricornio Man tomó el micrófono para saludar a la audiencia y de inmediato recibió gritos eufóricos y aplausos: “Buenas noches cabrones, arriba las manos mi gente, ¿cómo dice?”.
El amor también fue celebrado, pues la agrupación dedicó “Tonta canción de amor” a todos los enamorados presentes y todos los acompañaron a corearla. El ambiente siguió con “Círculo de amor” y definitivamente la noche apenas comenzaba.
La agrupación se encuentra festejando sus 30 años en la música, agradeció por todo el apoyo y reiteró la razón de sus canciones; así mismo, en una parte muy especificativa de su tocada, proyectaron (como era de esperarse) imágenes sobre la cultura de la cumbia rebajada. Aprovecharon la ocasión para rendirle homenaje al príncipe de la canción, José José, interpretando “Lo que no fue no será”, una canción a la cual le dieron su propio toque desde hace seis años.
Para la recta final del show, la pista ya se encontraba completamente llena, pues los Kumbia Kings estaban por salir. El Gran Silencio se despidió con su éxito más esperado “Chúntaro style”, poniendo a todos a bailar, gozar y cantar; las luces de los juegos mecánicos de fondo ambientaron de una forma mágica el momento, por supuesto que el éxtasis estalló.
Los Kumbia Kings vestidos todos de azul reyes y diversos accesorios, ofrecieron una conferencia de prensa antes de subir al escenario y agradecieron por la presencia de sus fans, “gracias por acompañarnos, siempre es un placer estar aquí, muchas gracias al público que sigue presente. Esta semana que pasó, comenzó la gira y estamos muy contentos por la respuesta del público”.
En los primeros meses la agrupación estará presentándose en Argentina y Europa por primera vez, aseguraron que las plataformas de streaming han sido de gran ayuda para llegar a otras audiencias. Adelantaron que el libro sobre la historia del grupo ya se encuentra en la última fase, pues fue concluido en 2020 pero tuvo que ser modificado porque 2021 y 2023 han sido años increíbles.
A las 23:05 horas una voz narró un pequeño fragmento sobre el grupo y la emoción subía conforme pasaban los segundos, inmediatamente se escuchó “México, ya llegaron los reyes de la cumbia”, y de pronto salieron al escenario con toda la actitud presentándose como “auténticos y reyes”. Desde el primer hicieron a todo el mundo mover el cuerpo con “Muévelo”, entre luces rosas y azules los artistas lo dieron todo en tan solo su primera canción.
Procedieron con “Sshh”, una de los temas favoritos de su público y durante toda la canción se podían escuchar a las personas coreando y aplaudiendo, esto no fue todo, los cantantes bajaron a bailar con sus fans, saludarlos, abrazarlos y tomarse algunas fotos. Además de cantar con todas sus ganas, mostraron sus coreografías y con toda la energía estaban dándolo todo, incluso algunos miembros se subieron a los postes del escenario. Si para este punto alguien estaba cansado o abrumado, definitivamente la agrupación llegó a subirles el ánimo y las ganas.
“Dime quién” fue un momento memorable ya que en la pantalla apareció la bandera de México, esto hizo que la fiesta continuara. El ambiente se puso un poco nostálgico con “Me estoy muriendo”, un tema que fue iluminado con luces azules y como la noche caía cada vez más, la rueda de la fortuna también parecía parte del show. Los Kumbia Kings no podían irse sin cantar su más grande éxito y el que marcó a muchas generaciones “Na na na / Dulce niña”, un momento de explosión e incluso lágrimas; “otra, otra, otra”, así los despidió el público. De esta manera se vivió otra noche en La Gran Feria de México dentro de las inmediaciones del Parque Bicentenario.
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