El pasado jueves la Ciudad de México amaneció con un clima muy frío y por la tarde una fuerte lluvia cayó en diversas zonas, creando en la ciudad una atmósfera nostálgica y melancólica, perfecta para disfrutar un concierto cantándole al amor y al desamor, y que mejor que asistir a la presentación de Lagos en el Teatro Metropólitan.
Las puertas del recinto abrieron desde las 19:00 horas, aunque el show estaba destinado dos horas después; la gente llegó al lugar poco a poco, pues toda la CDMX era un caos por el clima y la brisa nunca se detuvo. La primera hora las butacas rojas permanecieron completamente vacías, se podía apreciar el silencio y las grandes columnas blancas esperaban a los invitados.
Poco a poco el recinto se llenó y a las 21:00 horas salió al escenario Sebastián Llosa, quien fue el encargado de abrir la noche con temas como “Carolina”, “El plan”, entre otros. Su presentación fue muy breve, 15 minutos aproximadamente, a pesar de ello el público estuvo muy eufórico durante este lapso.
“Muchas gracias, esto es algo muy nuevo para nosotros y México es el país que junto con el mío que más nos ha apoyado en esta corta, pero maravillosa carrera que estoy teniendo. Esto es gracias a su apoyo, gracias por venir y bueno ya estoy sin palabras. Es una noche increíble para nosotros y un fuerte aplauso para mi banda”, expresó Sebastián.
Después de algunos minutos en el escenario apareció la palabra “LAGOS”, lo que provocó los gritos de toda la audiencia y por supuesto, anunciaba que el momento más esperado de la noche estaba por llegar. Todo el lugar se iluminó y al mismo tiempo sonó la intro del espectáculo, posteriormente aparecieron Agustín y Luis, quienes conforman Lagos; ambos con smoking negro y con toda la actitud para hacer una velada muy especial.
“Julia” fue la primera canción de la noche, uno de sus temas más populares y fue inevitable que la audiencia coreara a todo pulmón. Al concluir se tomaron algunos minutos para darles la bienvenida a sus fanáticos y agradecer por su primer Teatro Metropólitan.
“Bienvenidos a nuestro primer Metropólitan ¡Carajo, Salud! Uno, dos, tres…”, expresaron ambos artistas mientras sorprendieron a todos con una explosión de serpentinas para dar paso a “En Línea”, una canción que hace referencia al amor moderno y las redes sociales.
Algunas otras canciones para cantarle al desamor fueron “Tengamos pasado”, “Cámbiate el nombre”, “Reset” y “Guerra Fría”, las cuales hicieron de la primera parte del concierto algo inolvidable. El dueto más aclamado de la noche estuvo brindando con su público y en todo momento lograron crear un ambiente íntimo y melancólico.
Claro que no se podía quedar fuera “Milímetros”, también otra de sus canciones más populares. Pasaron a una de sus canciones más despechadas, “Roma” y es que en la vida todos los caminos nos llevan a Roma o a regresar con algún ex amor que nunca olvidaremos. Agustín tuvo algunos minutos en solitario para cantar “Mejor dejarte ir”, para este punto toda la audiencia estaba berreando, no importaba si estabas con el corazón roto o no, Lagos te hace extrañas amores que ni siquiera existen.
No todo fue nostalgia y tristeza, llegó el punto de bailar con algunas de sus canciones con más ritmo y claro que los asistentes se levantaron para mover un poco el cuerpo y disfrutar de la última etapa del concierto. “Soltando a pedazos”, “Clásico” y “Cuerno” fueron las canciones que formaron parte de esta etapa, todo se iluminó, pero solo anunciaba el inicio del fin.
El dueto agradeció a México y se despidieron, como era de esperarse regresaron al escenario con una joyita de canción, “Ojos marrones”, un cover a la canción original del venezolano Lasso; ese momento fue cumbre, no es un secreto que el tema sigue sonando en todos lados a pesar de que ya tiene más de un año desde que se estrenó, pareciera que en la vida de cada uno existe un par de ojos marrones inolvidables.
El invitado especial fue Reik, sí, la agrupación con la que decenas de personas crecieron y han sido acompañadas en sus desamores con sus mágicas canciones. Cuando salieron al escenario los gritos fueron ensordecedores y más de un minuto estuvieron esperando para que el público los dejara cantar “No se acaba hasta que acabe”.
Para cerrar con broche de oro, Agustín y Luis concluyeron con “Mónaco”, su rola más viral en colaboración con Danny Ocean, desafortunadamente no los pudo acompañar, pero eso no fue impedimento para que el recinto vibrara con las decenas de voces y el espectáculo terminara de la mejor manera. Así fue como se vivió una noche espectáculo en compañía de Lagos en la zona centro de la Ciudad de México.
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