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Se esperaba con impaciencia la llegada de Johnny Depp a Cannes y su desfile por la alfombra roja no defraudó. El público le dio una acogida triunfal, tanto, que eclipsó la presencia de Michael Douglas, Palma de Oro de honor, que llegó acompañado por su mujer, una deslumbrante Catherine Zeta-Jones.
En la primera alfombra de la 76 edición de Cannes coincidían dos eventos importantes: la inauguración oficial, con el filme Jeanne du Barry, dirigido por la francesa Maiwenn, que lo coprotagoniza junto a Depp, y la Palma de Oro de honor, que Douglas recibe en la primera gala del festival.
La presencia de Depp estaba confirmada para la rueda de prensa de este miércoles en la que hablará de un filme histórico en el que interpreta a Luis XV y que cuenta su relación con la cortesana Jeanne du Barry, pero no era seguro que participara en la alfombra roja.
Los medios estadounidenses criticaron en los últimos días que Depp fuera el encargado de inaugurar el filme ya que su imagen pública está muy dañada en su país por las acusaciones de maltrato por parte de su exmujer Amber Heard, pese a que fue el actor el que salió victorioso del proceso judicial.
Sin embargo, ya ayer el delegado general del festival, Thierry Frémaux, aseguró no haber seguido el proceso judicial y valoró únicamente su talento como actor. Unas declaraciones que avanzaban la buena acogida que tendría Depp en Cannes.
Pero no se esperaba tanto calor en la recepción por parte del público, que se congregaba frente al Palacio de Festivales de Cannes desde esta mañana, bajo un radiante sol y altas temperaturas.
En el momento en el que Depp se bajó del coche oficial, con traje oscuro y gafas de sol, comenzaron los gritos y salían de todas partes carteles que mostraban apoyo al actor estadounidense.
Depp se dedicó un buen rato a firmar autógrafos y a hacerse fotos con sus fans antes de dirigirse a la alfombra roja, donde se escuchó una enorme ovación al anunciarse su nombre.
Ovación repetida cuando todo el equipo de la película fue recibido en lo alto de la escalera por Frémaux, para después entrar en el Gran Théâtre Lumière para asistir a la gala de inauguración.
Ya en el interior de la sala, todos los asistentes -con mil 68 plazas- recibieron en pie al actor y al equipo de Jeanne du Barry, con otro larguísimo y fuerte aplauso.
La presencia del actor eclipsó casi totalmente a Michael Douglas, que llegó muy sonriente y con un esmoquin impecable, acompañado de Zeta-Jones, espectacular con un vestido en rojo y fucsia, y de su hija, Carys.
Antes de las dos estrellas de la noche, por esta primera alfombra de Cannes pasaron grandes nombres del cine como una elegante Catherine Deneuve, que es la protagonista del cartel de esta edición.
Elle Fanning, Mads Mikkkelsen, Helen Mirren, Uma Thurman y todos los miembros del jurado oficial -Brie Larson, Paul Dano, Ruben Östlund o Damián Szifrón- también participaron en el evento.
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