Búsqueda
En 2018, la historia de la animación daría un giro inesperado gracias a la llegada de un filme que mezclaba CGI con 2D, creando una especie de pintura viviente que ofreció una experiencia cinematográfica sorpresiva. Dirigida por Peter Ramsey, Robert Persichetti Jr. y Rodney Rothman, Spider-man: Un nuevo universo, fue un paseo que se sentía como una aventura dentro de las viñetas mismas, presentando un nuevo héroe arácnido en el cuerpo de Miles Morales, un joven de raíces latinas que resulta mordido por una araña radioactiva.
La recepción para este nuevo personaje fue avasalladora. Con todo y la presencia de Tom Holland en el live action del MCU, además de la herencia dejada por Andrew Garfield y Tobey Maguire con sus respectivas interpretaciones de Peter Parker, fue ese estilo visual único, su dinamismo y el carisma de Morales los que, sin temerla ni quererla, provocaron un rejuvenecimiento de esta saga que dejaba de lado al Hombre Araña habitual para dotarlo de una nueva personalidad, raíces, dudas y miedos, mismos que se verían sacudidos con un gran salto de fe.
Cinco años después de ser este parteaguas en el género y con los live action alrededor del vecino amigable un tanto disparejos, Miles Morales está de vuelta con los directores Joaquim Dos Santos, Kemp Powers y Justin K. Thompson tomando la batuta para llevarnos en un viaje a través de múltiples mundos y diferentes encarnaciones del arácnido con la enriquecedora Spider-man: A Través del Spider-Verso, secuela en la que, nuevamente, dejan la vara en alto para cualquier tipo de animación existente.
Casi año y medio después de lo visto en el anterior filme, Miles Morales (Emilio Treviño en la versión doblada) sigue aprendiendo todo lo que tiene que ver con ser un digno Spider-man en su universo. Sin embargo, el regreso de su interés romántico de otra dimensión, Gwen Stacy (Alondra Hidalgo) hará que un nuevo villano inexperto ponga en jaque al Spider-Verso: La Mancha (Javier Ibarreche en la voz). El reencuentro y la misión se dificultan cuando el líder de la Sociedad Arácnida, Miguel O´Hara (José Luis Rivera), quien busca poner control sobre el multiverso, choca con los principios heroicos de Morales, pudiendo llevar todo hacia un tremendo desastre.
Si la anterior entrega lucía espectacular, en ésta el largo grupo de animadores detrás de esta experiencia, incluyendo a cerca de 40 mexicanos que ayudaron a crear el aspecto visual de todo lo que percibimos en esta secuela. El experimentado Cruz Contreras, experto en diseño de cabello y otros aspectos de ciertos personajes, es la cabeza de un talentoso grupo que incluye a Miralda Medina, Héctor Torres y Leticia Maycotte, entre otros artistas nacionales que han ayudado a poner la vara más arriba que lo hecho en su antecesora.
Desde esos primeros 20 minutos de prólogo se puede notar la gran apuesta del proyecto: usar aún más estilos de animación que sean el sello característico de cada uno de los personajes que vemos en la pantalla. Los colores que viven en los universos de cada uno son acordes al diseño y estilo. El mundo de Stacy luce como acuarela deslavada poco a poco, mientras que un villano es plano y con colores sepia, o Spider Punk desencaja totalmente por su estilo anárquico. Ver todo eso metido en una sola secuencia es impactante.
La expansión del universo de Miles para incluir a todas las diferentes versiones de Spider-man y sus respectivas tierras de origen es ambiciosa pero brillante, atreviéndose a meter hasta aspectos de live action en ella. Ni qué decir del diseño de los protagonistas. Peter B. Parker vuelve ahora como un padre desaliñado que carga a todos lados con su bebé, mientras que O’Hara luce un aspecto un tanto monstruoso e imponente, haciendo un interesante juego de colores cuando está tranquilo en azul a cuando está molesto, viéndose más oscuro. El nivel de detalle es, en verdad, algo sin igual.
También tenemos el trabajo de doblaje, algo que ha levantado polémica en los últimos meses debido a ciertas decisiones con las que los fans no están tan de acuerdo. Sin embargo, la presencia de ese ‘star talent’ no opaca la labor hecha por Treviño y sus experimentados compañeros arácnidos, algunos que están de vuelta después de su participación en la anterior y otros que se unen a la familia, siendo Ibarreche el que más participación tiene de ellos como La Mancha. Aunque no está aún al nivel de sus compañeros y por momentos se siente medio desfasado conforme a lo que hace su personaje, si le da una personalidad al villano. Eso sí, la labor en el doblaje de los padres de Miles con acento ‘latino’ se escucha bastante forzada.
Ni qué decir de la historia que, como buen ejemplo del Spider-Verso, está llena de capas. Primero, nos ofrece un mejor enfoque a las motivaciones de Gwen y esa soledad que siente, algo que la lleva a extrañar a Miles. Por otro lado, Morales y su vida doble lo están volviendo un poco loco, costándole ciertos conflictos con sus queridos padres mientras sigue adaptándose al rol de héroe. Incluso el villano tiene un interesante enfoque de génesis, ese que lo liga inevitablemente al destino final que pueda tener Morales en esta aventura, haciéndolo interesante.
También existe la complejidad de los multiversos, misma que es explicada con relativa sencillez, algo que ni el MCU ha podido establecer bien. En un breve segmento, se nos explica que en este Spider-Verso existen eventos que no pueden ser rotos, que son ‘canónicos’, algo por lo que los diversos héroes arácnidos tienen que pasar para convertirse en lo que son. Eso produce una cuestión muy interesante acerca de la naturaleza del héroe y si en verdad tenemos ya una línea determinada de hechos que nos forjan o si existe la posibilidad de un cambio que no ponga en riesgo todo.
Con un montón de sorpresas bajo la manga, referencias de todo tipo por doquier y un sentido del humor que conquista a todo el público, Spider-man: A Través del Spider-Verso resulta ser una secuela que supera a su antecesora en todo. No solamente por cuestionar incluso el concepto mismo del heroísmo sino que muestra que la animación es un arte, un recurso para contar historias maravillosas como ésta y que apenas estamos viendo la punta del iceberg en este estilo. No queda más que dejarse enredar en la telaraña de este vecino amigable y sus diferentes versiones, pues aún queda un episodio más por ver que, si logra la mitad de lo que esta cinta propone, promete ser un cierre espectacular.
Copyright © 2023 La Crónica de Hoy .